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POV SeungKwan

Después de nuestra pequeña charla mis futuros "suegros" se retiraron, mi madre me pidió ir a casa y cuidar a mi padre. Así que hice lo que ordeno, cuando llegue salude a mi padre. Él miraba televisión así que fui a mi habitación, agradecía que mi madre no notara el chichón en mi cabeza.

Cuando Vernon nos encerró en el camerino empezamos a besarnos y justo cuando su mano rozo mi pezón nuevamente levante mi cabeza con mucha fuerza y sin darme cuenta me golpee contra la pared, estuve a punto de gritar pero nuestros compañeros estaban afuera así que mordí el hombro de Vernon. Realmente no podía creer que casi tenemos sexo en los camerinos, pero no me arrepentía de habernos besado como lo habíamos hecho.


***


El día siguiente llego sin novedades realmente, Seungcheol había venido a la pastelería después de la escuela, junto a mi madre y a Vernon le enseñamos a hacer un pastel, definitivamente el chico a quien se lo daría quedaría encantado. Era viernes y como de costumbre las clases eran aburridas, me mantuve mirando por la ventana y sonreí al ver a Seungcheol junto a un pequeño chico de la mano, así que su "persona especial" era JiHoon, uno de los entrenadores del equipo.

- ¿Qué tanto miras? – susurro Vernon a mi lado.

- A los chicos del equipo de fútbol – conteste – se ven animados – no mentía.

- ¿A Seungcheol le fue bien? – pregunto.

- Parece que si – sonreí – están de la mano.

- Eso es bueno – asintió - ¿Quiénes eran los señores del otro día? – dijo de la nada.

- Por qué preguntas eso – suspire – eran solo clientes.

- Vamos di la verdad – me miro – eran los padres de tu prometido ¿verdad? – asentí.

- ¿Qué querían? – ladeo la cabeza.

- Nada solo...- empecé a guardar mis cosas – debo volver a casa.

El timbre anuncio que las clases habían terminado, mis compañeros ya estaban saliendo.

- Te veo el lunes – trate de sonreír y me puse de pie.

- Vamos a mi departamento – dijo levantándose también.

- ¿Estás loco? – fruncí el ceño.

- No – negó – pero quiero que hablemos de esto.

- ¿Qué quieres que te diga? – pregunte.

- Todo – tomo mi mano y me arrastro fuera del salón.


***


No habíamos hablado mucho mientras íbamos hasta su departamento, apenas unos cuantos *espera* o *no camines tan rápido* de mi parte, aunque era ignorado totalmente.

- Pasa – dijo abriendo la puerta, me adentre en su departamento y fui hasta la sala - ¿Quieres algo? – pregunto mientras iba a la cocina.

- Un poco de agua estaría bien – me senté en uno de los sofás, no tardo mucho y se sentó a mi lado ofreciéndome un vaso con agua – gracias.

Mi cumpleaños [Verkwan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora