POV SeungKwan
Definitivamente todos mis días estaban destinados a ser miserables, de verdad odiaba la escuela y mucho mas la clase de educación física.
- ¡Boo! – grito uno de mis compañeros mientras me pasaba la pelota, "Demonios" pensé; yo era pésimo y me había negado a jugar pero este idiota me hacía un pase. La pelota ni siquiera llego a mí, pues ya era robada por alguien del otro equipo.
- ¿Estas ciego? – pregunto alguien mientras golpeaba mi cabeza – era tuya, solo tenias que correr un poco más.
- No soy bueno en esto – conteste mientras miraba a mis compañeros quienes estaban obviamente enojados.
Fui hasta la banca y solo pedí cambio, no podía ni quería jugar más. No espere a ver los resultados del partido, me dirigí a las duchas para después ir a casa; por suerte era la última clase. El camino hacia casa era un poco largo, me encantaba ponerme los audífonos y por un momento perderme en mi mundo. Mientras salía de la escuela mire a uno de los chicos más populares de la escuela coqueteando con una de sus tantas admiradoras; rodé los ojos ¿Qué tenía de interesante? Por supuesto Choi Seungcheol era el chico guapo, inteligente y bueno en los deportes, eso lo hacía muy interesante ¿verdad?
Puse la música a todo volumen y salí de esa cárcel llamada escuela. Mientras caminaba iba pensando cuales eran mis tareas y como terminarlas pronto, para poder ayudar a mis padres. Teníamos un negocio familiar muy reconocido, mis padres eran los mejores reposteros, sus postres eran muy populares; incluso servíamos en banquetes de gente adinerada y se llevaban una gran impresión. Pero no todo podía ser felicidad, la vida nunca es tan buena; hace unos meses atrás tuvimos un pequeño problema, mi padre enfermó y la única salida era una cirugía muy costosa; tuvimos que vender la casa junto al negocio y buscar un lugar más pequeño para vivir, respecto al negocio ahora arrendábamos un pequeño local que poco a poco iba prosperando al igual que la salud de mi padre. Entre a la casa después de haber caminado alrededor de treinta minutos, esta se encontraba en un pequeño condominio, en el cual también estaba ubicado el negocio; todos nuestros ahorros tenían un solo objetivo, volver a nuestra vida de antes; una casa propia y un negocio propio.
- ¿Cómo te fue? – pregunto una de mis hermanas, mientras salía de la cocina para recibirme.
- Muy bien – sonreí, no podía decirle el tormento que era la escuela - ¿Cómo esta papá? – pregunte.
- Mucho mejor – me regalo una hermosa sonrisa – acaba de tomar sus medicinas, ahora está dormido.
- Me alegro – suspire y camine junto a ella hasta el comedor.
- Come un poco y luego has tu tarea – dijo mientras me servía un plato – cuando termines ayuda a mamá.
- ¿Ya comiste? – pregunte mirándola – recuerda que no debes saltarte comidas.
- Ya comí pequeño bribón – beso mi frente y se quitó el delantal – volveré en la noche.
- Que te vaya bien – dije mientras ella salía de casa rumbo a la universidad.
Cuando termine de comer lave mi plato y fui hasta mi habitación para cambiarme, empecé hacer la tarea; agradecía que mis maestros no mandaran mucha, la literatura y el inglés eran muy interesantes así que no tarde mucho en acabar todos mis deberes. Estuve por salir de casa para ir hacia el negocio cuando escuche un pequeño grito, venia de la habitación de mis padres.
- Papá ¿Estas bien? – dije entrando de inmediato en esta.
- Oh SeunKwannie – sonrió al verme – no pasa nada pequeño, solo un mal movimiento al acomodarme.
- Me asuste – reí y camine hasta él – debes tener más cuidado, no queremos que te pongas peor.
- ¿Ibas a alguna parte? – pregunto.
- A ayudar a mamá – dije mientras tomaba una de las almohadas y la acomodaba - ¿Así está mejor?
- Mucho mejor –acaricio mi mejilla – tratare de sanar pronto, ten un poco más de paciencia.
- No es nada – le sonreí – tú no te preocupes, nosotros nos haremos cargo de todo.
- Tengo los mejores hijos del mundo – dijo y señalo la puerta – ve, tu madre debe estar esperando – asentí y salí de casa.
Me dirigí al negocio, en cuanto llegue mire que en la puerta se encontraba colocado el cartel de cerrado. Abrí la puerta, encontré a mi madre junto a mi otra hermana y una pareja mientras conversaban de algo no muy bueno; al menos la expresión de mi madre no lo era.
- Buenas tardes – dije mientras entraba y me colocaba cerca de mi madre. Ella de inmediato tomo mi mano - ¿Qué está pasando aquí?
- Son los nuevos dueños del condominio – contesto mi hermana – venderán este local – dijo con un hilo de voz.
- ¡¿Qué?! – solté un grito ahogado – no pueden hacer esto – los mire, lucían malditamente adinerados.
- La decisión está tomada – dijo uno de ellos a modo de respuesta.
- Debe haber una manera de arreglarlo – mire a mi madre, estaba en un completo shock.
- Hay una – dijo la señora mirándome – nosotros tenemos un hijo – me miro y luego a mi hermana – que les parece un matrimonio.
- Lo haré – dijo mi hermana sin pensarlo dos veces, mi madre y yo la miramos asustados – estoy de acuerdo.
- No es necesario – dijo mi madre – no dejare que lo hagas.
- Aunque ella lo quisiera – esta vez era el señor quien hablaba – nuestro hijo ya eligió a quien quiere - tanto mi madre, hermana y yo nos quedamos inmóviles.
- Su hijo ya las conoce – dijo mi madre asustada – no venderé a ninguna de mis hijas.
- Eso está bien – hablo la señora – porque nuestro hijo se decidió por el suyo.
- ¿Su hijo me quiere a mí? – dije incrédulo – debe ser un error, soy hombre y además aún soy menor de edad.
- ¿Cuánto falta para que seas mayor? – pregunto el señor.
- Seré mayor en enero – conteste.
- Entonces ¿Aceptas casarte con nuestro hijo? – dijo la mujer, mientras examinaba mi reacción.
- Esto es innecesario – mi madre se levantó – fuera de aquí, desalojaremos el lugar y punto.
- Madre espera – dijo mi hermana mientras la tomaba de la mano – lo perderemos todo.
- No puedo sacrificar a tu hermano – dijo mi madre con un nudo en la garganta.
- Nos retiramos – dijo el señor y salieron del lugar.
Escuche como mi hermana y madre empezaban a llorar, en serio todos mis días eran miserables; esta vez todo dependía de mí, el negocio, la casa, nuestro futuro.
- Mamá – la mire – no te preocupes por mí, yo estaré bien – camine hasta la salida y detuve al hombre antes de que se subiera a un auto – acepto – dije serio – me casare con su hijo.
🍀💧🌈
Bueno aquí el primer capítulo de esta historia, las ideas surgieron de mi mente y la de mi hermana (ella ama el VerKwan) :3 espero que les guste ¡GRACIAS POR LEERME!

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Mi cumpleaños [Verkwan]
Fanfiction"Estoy comprometido" "Encontrare una solución" ✨🍰Pareja Principal: VERKWAN ✨🍰Menciones: MEANIE, JICHEOL, H8SHI ✨🍰Género: Romance-comedia ✨🍰Partes: ❤ + 15