Esta Parte De Mi Vida

Capítulo 29. Primera Cita

Se hizo de noche, son las 7:30 PM.

- ¿Tienes hambre? – Le pregunto al voltear a verla, mientras cierro la puerta del despacho.

Ella sostiene su bolso rosa con ambas manos por delante de su vestido, mostrando timidez.

- Si, la verdad es que ni si quiera he comido

- Entonces, te llevare a cenar ¿qué se te antoja?

Sonríe y me dice: - Bueno, la verdad es que tengo ganas de una hamburguesa

- De hecho, hay un tipo (Cesar) que vende hamburguesas fabulosas cerca de la casa

- Estupendo, entonces... ¿a que esperamos?

Ahora yo le sonrío a ella. Me está cayendo mejor.

- No tengo auto, tendremos que irnos en autobús

- Claro, no hay problema

**

Platicando en el autobús recordé la primera plática que tuve con Melanie. El día que nos conocimos. Recordé lo que sentí. Como me había hecho sentir.

Estaba empezando a sentir lo mismo con Vanessa.

No quise hablar del caso. No quería que pasara por un mal momento recordando todo aquello (ya había sido suficiente que lo recordara en la tarde). Hablamos de lo que sucedió después de la prepa y, como nos había ido a ambos. No le mencione nada al respecto de Melanie. No me gusta compartir mis problemas con los demás. Nunca me ha gustado. Prefiero resolverlos por mí mismo. Y por supuesto mucho menos quería que me tuviera lastima de mi.

Evitando todos esos temas empezó a surgir una plática muy amena y... juguetona. Vanessa reía y reía, y yo con ella. No recuerdo haberla visto nunca tan feliz. Siempre espere verla así.

Hay personas que marcan tu vida para siempre.

Aunque no quiera admitirlo Vanessa marco un punto en mi vida. Son de las cosas que nunca olvidas y, por alguna razón al pasar de los años siguen ahí.

Terminamos la cena. Fue tan cómoda y divertida. Hace tanto que no me divertía así.

**

- Es un poco pequeño, lo sé. Pero hay suficiente espacio para los dos – Digo mientras abro la puerta de mi departamento.

- Ya te dije que no te preocupes. Ya estás haciendo mucho por mí – Dice mirándome a los ojos. Se sonroja y echa una mirada tímida al piso,

Siempre lo mismo. Y sigue volviéndome loco.

Extiendo mi mano mostrándole que puede pasar – Después de usted

Cuando pasa, entró y cierro la puerta.

- Esto es todo lo que poseo – Digo extendiendo los brazos – Una tele - Continuo señalando las cosas – Un sofá, una mesa con sus...respectivas sillas, una cocina con solo lo indispensable, una cama matrimonial, dos cuartos (uno lleno de ropas sucia) – Digo bromeando – Y una que otra cosa. Dale un recorrido a la casa si quieres – Me siento en el sofá de un sentón.

-¿Dónde planeas que duerma?

-Donde quieras, está el piso – Se ríe entre dientes – También el sofá y la cama.

- ¿Dónde dormirás tu?

- Pensaba regresar a dormir en mi cama... pero eso fue en la mañana

- Ya...