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Julio 16
Jaen
15:36

Saco un cuaderno de notas el cual poseía una lista extensa de opciones para futuras carreras disponibles. No era de aquellos chicos seguros de sí mismos, si por algo me diferenciaba era por ser una persona contradictoria e insdeciso.

—Leche chocolatada por favor.  —Solicito algo angustiado sin dejar de observar el cuadernillo y chocar el lapicero una y otra vez contra la mesa.

El mesero sonríe y asiente. Su vida parecía tan ligera, solo atender a los pocos clientes que venían a esta cafetería. Parece un hombre sin problemas... solo preocupándose porque hayan las suficientes bebidas requeridas por sus consumidores.

Trae delicadamente la taza de leche entre sus manos y me la deja en la mesa.

—¿Le pasa algo joven? —pregunta curioso. Nunca supe su nombre, y mucho menos me atreví a preguntarle alguna vez.

—Solo... no es nada, son decisiones inestables, cosas mías, algo estúpido sin importancia.  —Observo al joven que miraba exactamente cada detalle de mi libreta al frente suyo.

—Por lo visto no sabe que carrera profesional escoger, ¿no es así? Mire, tome mi consejo: lo he visto escribir, ¿por qué no se dedica de lleno a aquello, no tiene nada que perder al intentarlo — una leve sonrisa se dibuja en su rostro. 

Procedo a trazar una línea recta horizontal en todas las opciones para quedarme con solo una.

La escritura.

Simplemente era leche chocolatada.

Y el mesero.

Un Simple Café©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora