La chica que decidió no seguir al héroe

Capitulo 1: Desaparecer y aparecer (parte 1)

Nunca creí ser especial en ningún sentido. Cara normal, estatura normal, vida normal de estudiante. No destacaba para nada y solo tenía algunos amigos, lo mas corriente. Pero hubo un día el cual cambió todo.

Era casi de noche. Ese día había ido a terminar una tarea de biología a la casa de una amiga que vivía convenientemente cerca de mi hogar. Sin darme cuenta, ya había pasado bastante tiempo. Me fui a mi casa caminando lentamente.Mis pies estaban cruzando la calle cuando vi un auto venía a gran velocidad. No pude llegar a pensar en nada.

Justo en ese momento, mi alma dejó este mundo llamado tierra para siempre. En los últimos segundos de existencia que tuve conciencia, solo pude sentir un gran dolor en todo mi cuerpo. Sangre y un gran frenado.

Aunque nunca pude volver a recobrar los sentidos como una persona residente de la tierra.

Cuando abrí los ojos, me encontré en una sala extremadamente cómoda. dos sillones se encontraban justo al medio de la sala, mirándose el uno al otro. Un chico me vio y me hizo una seña para que me acercara. Yo, sin saber que es lo que estaba pasando, me senté en el sillón de al frente.

.- Hola-. me dijo con calidez.

Cuando lo analicé, casi se me salieron los ojos. Nunca había visto a una persona tan hermosa y simétrica. Con dificultad, le hablé, estando todavía confundida.

.- Ahmm, ¿donde... estamos?-.

Dije mientras miraba todo a mi alrededor. Todos los muebles de la sala eran blancos. Lo único que era de otro color era las sillones y la mesa larga que los separaba. En unos momentos me di cuenta de lo que había pasado. Fui atropellada.

.- Vaya, ¿estoy aquí por qué estoy batallando por sobrevivir o ya estiré la pata?-.

El chico que parecía un ángel cerró los ojos y movió la cabeza hacía los lados. Al recibir su silenciosa respuesta, solo me quede en blanco, tal como en la sala en donde estaba.

.- Ya veo. No puedo creer que el shock todavía no me esté golpeando ¿Cuando tiempo duré en el hospital?-.

.- Moriste al instante después que el auto te golpeara. Te mando volando y tu cabeza casi se aplastó contra el pavimento. Lo bueno es que falleciste cuando te golpeo, por lo que no sentiste la caída al suelo-.

.- Y...¿Ahora qué?-. le pregunté.

Mas bien, ¿y que hago yo aquí? y ¿Quien es el?

.- Supongo que te haré renacer en otro mundo. Tu alma todavía es joven y como no alcanzaste a terminar tu vida, te perdiste de un montón de cosas. Por eso, debería limpiar tu alma y renacerías en un mundo distinto. Aunque, esta vez haré algo distinto-.

El chico sonrió con malicia. Me daba un poco de miedo.

.- No eres la única que renacerá con recuerdos. Hazme un favor, y cuida al idiota que se fue primero. Ah, por cierto, para no matar de inmediato tu cuerpo cuando nazcas, tus recuerdos volverán a ti mas o menos a los 9. Quizás no estén completos, pero siguen siendo algo, y te daré un pequeño regalo para tu estado ¡No vayas a decepcionarme!-.

Con una sonrisa me despidió. Una somnolencia me atacó de repente y mis ojos se cerraron.

Mi alma renació en un mundo completamente diferente.

Mi nombre cambio. En mi segunda vida, fui llamada Lavanda, por la flor preferida de Madre.

Pasaron unos años, mientras yo solo era un bebé corriente, ya que mi alma había bloqueado todos los recuerdos de mi vida anterior, en lo mas profundo de mi existencia.

Después de cumplir los nueve años, justo el día de mi cumpleaños, el sueño de esa noche hizo que regresaran completamente mis recuerdos. Ese día mis sirvientes pensaron que yo me había resfriado, así que me cuidaron hasta que supuestamente sane por completo. Mi cuerpo se sobrecargo y sobre-calentó por la cantidad excesiva de información, dando como resultado una horrible fiebre que venía acompañada de horribles dolores de cabeza.

Cuando todos mis recuerdos se ordenaron y mi cuerpo pudo recuperar su condición, pude notar mi existencia por primera vez.

Toqué mis manos y el resto de mi cuerpo. Una sensación extraña recorrió mi cuerpo, un sudor frió pasó por mi espalda. Me levanté rápidamente de la cama y busqué el espejo mas cercano.