Anteriormente...
- Hola… -salude tímida, pero amistosa-
- Hola, tu eres ____ ¿no?
- La misma…
- Anoche cuando llegué, encontré a Liam haciéndose una cama en el suelo –dijo entre risas- ¿te quedaste dormida?
- Si –dije avergonzada- lo siento mucho, no era mi intención
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Cap 6
- No importa… al menos le hiciste compañía a mi pequeño, como yo trabajo hasta tarde el se queda solito todo el día… -sonreímos- ahora, debes tener hambre, y hay muchos hotcakes que comer, asique… siéntete como en casa.
- Muchas gracias. –Sonreí y comí un poco- mmm están exquisitos
- ¿lo ves mama? Haces los mejores hot cakes del planeta.
- Si, estas riquísimos. –Dije alegre- ¿Dormiste muy mal anoche? –Pregunté comiendo más del hotcake y mirando a Liam-
- No, al contrario… dormí muy bien, aunque el suelo era algo... ¿duro? –dijo chistoso- . ¿Y tú? ¿Cómo dormiste?
- Tu cama, es muy suavecita, en realidad dormí excelente. –Sonreí- esto es tan raro… te conozco hace un par de días y acabo de dormir en tu casa. –Mencione luego de unos segundos- ¡Es para no contarle a Louis!
- Bueno… todo porque “algún día serás monja” –la madre de Liam nos escuchaba atentamente entre risas- ¿y porque no le tenemos que contar a Louis sobre esto?
- ¡no se! –Reí- porque es tan loco que nos molestaría de por vida…
- tienes mucha razón, además te ama. –Dijo entre risas-
- ¿Cómo es eso?
- No sé, desde que te vio hace algunos días pasa todo el día diciendo “es tan linda”
Al terminar el desayuno mire mi reloj y eran casi las 12 de la mañana… mi madre me mataría.
-¡Liam! –Lo miré- me tengo que ir, mi madre me asesinará –exagere- y ya sabes, no quiero estar muerta.
- OK… te acompaño a la puerta. –Sonrío- espero que tu mama no te asesine.
- esperemos… -me acerqué a su madre- Adiós señora payne… muchas gracias por esos hotcakes tan exquisitos.
- Adiós, espero verte por aquí luego… para que vengas a comer otra vez.
- la traeré pronto mama… -sonrío Liam- le enseñaré a ser una chica buena.
Salimos a la puerta y miré a Liam atenta.
- ¿Cómo es eso de que me enseñaras a ser una niña buena?
- Bueno, anoche, cuando te miraba cuando dormías…-pausó algo tímido y yo sentía que mis mejillas se ruborizaban, no es normal que alguien te mire mientras duermes- me di cuenta, que a pesar de conocerte hace 2 días casi –río- soy tan bueno que te puedo ayudar a serlo…
- ¡al fin admites que eres un niño bueno! –alcé mis brazos- acepto tu oferta pero ten cuidado porque te puedo convertir en un niño malo –reí- y no quiero convertir a más gente mala, ya que la maldad no es una buena forma de vida.
