04.

73 4 4
                                    

El chico se me acerco, puso sus manos en mi cintura, pero se quedo mirando mis ojos, durante un largo tiempo, yo estaba incomoda, pero perdida en esos hermosos ojos azules que tenía a centímetros de los míos.

-Hay algo en ti que me parece un poco familiar, es como si ya te hubiera visto antes.

-¿Cómo? No te conozco Be...chico.

-Lo sé, ignoremos eso, ¿bailas?

-Claro, por eso estoy aquí, ¿no?

-Verdad, lo siento.

Comenzamos a bailar al ritmo de la canción, moviéndonos con el bajo, y no debo negar que Benjamin baila muy bien; deslizaba sus manos por mi espalda, hasta llegar a la parte baja, quite mi mano de su hombro y le subí la mano, que no se crea, no tan rápido al menos. Al terminar la canción me separe del chico y fui hacia la barra, donde minutos después se sentó Sean a mi lado, tomamos un poco de cerveza.

-¿Bailamos? Has bailado con muchos, y tu pareja soy yo.

-¿Celos? Bueno no, vamos Sean, bailemos entonces.

 

Nos levantamos de nuestros asientos y fuimos hacia la pista de baile, Sean me jaló y me apego a su cuerpo hasta que llegamos a un lugar disponible para bailar, en ese momento, el puso sus manos en mi cintura y comenzamos a movernos al ritmo de la sensual canción que estaba en las bocinas del club. Sean se acercaba a mi oído y me susurraba cosas que me causaban risa, pasamos riendo y bailando durante 5 canciones, hasta que nos fuimos de nuevo a la barra.

Al llegar a la barra nos encontramos a los chicos ahí. Comenzamos a hablar y a reírnos, al momento volví un momento mi cabeza y vi a unas chicas susurrando entre si y señalándome, hubo algo en ellas que me llamó la atención pero lo ignore y seguí hablando con mis amigos. Tomé un sorbo de la cerveza que había dejado en la barra y después nos paramos a bailar otra vez. Minutos después me sentí un poco mareada, y después, todo se tornó negro.

 

Me desperté muy confundida en una habitación conocida pero extraña,  me apoyé en los codos y recorrí la habitación con la mirada, había posters de bandas de rock por todos lados, y en seguida supe de quien era.

En el momento entró Sean sólo en bóxers, y me miró. Siguió caminando como si nada, con movimientos elegantes, moviendo las caderas de un lado a otro, me quede idiotizada viéndolo, como se transportaba a través de la habitación, como si estuviera sólo, como si yo no estuviera ahí.

-¿No tienes hambre?

-No hace ni diez minutos que te despertaste, ¿ya tienes hambre?

-Un poco, ¿Qué sucedió?

-Creo que te drogaron, ¿por qué?

-¿Por qué? Ah, no lo sé, quizá porque me desperté en tu habitación sin siquiera saber en qué momento habíamos salido del club, y quizá porque no recuerdo casi nada de lo que paso anoche. Quizá eso, o es sólo saber si me violaron, eso, casual.

-Tampoco debías ser tan sarcástica.

-¿Ah no? Ah ok, ¿ahora me responderías?

-Vale, lo siento, estábamos en el club, bailando tú y yo casi por primera vez en toda la noche y después tú simplemente te desmayaste, ni siquiera pudimos bailar la canción completa.

-¿Ah? ¿La canción? Claro, a mi mejor amigo le importa sólo que no pudiéramos bailar la canción completa, no le importa que yo me haya desmayado. Claro, normal.

-Estaba bromeando, te desmayaste en medio de la pista, pensamos que habías muerto o algo, así que llamamos a una ambulancia, te di respiración boca a boca y nada, así que dijeron que estabas bien, sólo dormías, así que nos fuimos del club y te trajimos a mi casa, te acosté en mi cama, y por cierto, duermes terrible.

¿Qué opinan ahora?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora