—O sea que puedo vender la mansión.
—No puedes vender la mansión.
—¿Por qué?— mis ojos se abrieron tal que parecían platos.
—Tu abuela lo prohibió.
—Pero si ya está muerta.— si, de acuerdo, eso fue muy grosero y egoísta de mi parte.
—Ella pensó en todo, Amy. No puedes burlarla.
—¡Maldición!— solté y peiné mi mojado cabello hacia atrás en señal de desesperación.
—Cuando dije que te parecías a tu abuela, lo decía con base. Son muy precavidas y testarudas, odian que alguien las desobedezca.
—Te he dicho que no me compares con ella.
—Es una dura verdad.
—¿Qué era lo que me decías sobre el departamento?— pregunté para evadir el tema.
—Hice una averiguaciones sobre unos departamentos de tu agrado y eso era que ibas hacer hoy.
—¿Aun puedo ir a verlos?
—Claro. Llamaré al chofer para que prepare el auto.
—Por favor.
—¿Amy?
—¿Si?
—Ve a cambiarte, por favor.
—Vale.
Fui a cambiarme a algo mas seco y a buscar algún calmante para el dolor. Carlo llegó rápidamente y nos condujo al primer departamento cerca del centro de Huntington; era asqueroso y ruidoso para mi gusto. Fuimos a tres mas en el mismísimo centro y ninguno cumplía mis simples expectativas.
—Clary… Cuando hablas de departamentos, ¿Te refieres a algún tipo de mazmorras o qué?
—¡Tu querías un departamento!
—¡Esos "departamentos"— hice comillas con mis dedos.— parecen cuartos de manicomio! ¡Uno de ellos tenia sangre en las paredes!
—¡De acuerdo! Carlo, iremos al departamento de la playa.
—¿Qué?
—Es el último que encontré. Si no te gusta, estamos muertas.
Carlo nos condujo hasta un departamento con vista al mar, era hermoso y perfecto. Cumplió con mis expectativas y mucho mas.
—Me encanta.— dije con una gran sonrisa y mirando todo a mi alrededor.
—¿En serio?— cuestionó Clary.
—Si.
—¿Segura?
—Si.
—¿Lo quieres?
—¡Si!
—¡Gracias a Dios!— dijo dramáticamente mientras se sentaba en el suelo del departamento.
—No seas exagerada, Clary.
—No soy exagerada, solo me canso.
—Por eso y muchas cosas mas es que no quiero ese todo que me ha dejado mi abuela.
—No te gusta el estrés.— afirmó.
—No.— fui y me senté a su lado.
—Yo antes soñaba con una vida. Esposo, mascotas e hijos. Y ahora mírame: no tengo ni la cuarta parte de eso. Aunque tengo uno de los mejores sueldos de California, no es lo único que quiero.
—Pero, Clary; eres hermosa, una chica con características perfectas para un hombre de aquí ¿Quién no ha de quererte?
—Si, lo sé;— rió con cansancio.— pero ¿con qué tiempo voy a buscar a un hombre?
Me levanté y le tendí la mano.
—Vamos. Haremos el papeleo para comprar este departamento. Me encanta.— le sonreí.— Luego iremos al Centro Comercial.
—¿Qué haremos allá?
—A comprar jabones para baño…— dije sarcásticamente.— Iremos a buscarte un esposo o quizás una mascota. Y si no encontramos a tu hombre allí, iremos al parque.
—¡Pero…!
—Sin peros, Clary.
Hizo un breve puchero pero en seguida lo cambió por una gran sonrisa. Llamó al dueño de departamento y arreglamos los papeles para la adquisición. Decidimos ir a un enorme Centro Comercial cerca de allí, compramos muchas cosas para el hogar ¿Creíais que me iba a llevar los muebles de mi abuela?. Luego de eso, nos sentamos a tomarnos un café; mas que jefe y asistente, parecíamos mejores amigas.
—¿Y ese rubio de ojos marrones?
—No lo se, se ve extraño…
—Vale… Oh ¿y aquel de sombrero verde?
—Su nariz es horrible.— dijo y tomó un sorbo de la bebida.
—Vamos, Clary, tía. ¡Abrete a las opciones!
—Es que no me gusta ninguno.
—Ostia, pero…
—¡Mira a ese de allá!— exclamó de tal manera que casi escupo el café.
—Ese que está de espaldas y un gorro.
—Pero si solo lo has visto de espalda.
—No lo sé. Solo me atrae.
Me levanté y antes de irme le dediqué una mirada pícara a Clary, quien aun no sabía que me proponía hacer. Caminé hasta el chico que estaba de espaldas y sentado en una banca solitario.
—Hola… Disculpa pero… WHAT THE FUCK?!
—¡Señorita Jones!
—¡Johnny! Bueno, yo…
—¿Quería decirme algo?
—Primero: no me digas "Señorita Jones", solo Amy. Y no me trates de "usted".
—De acuerdo.
—Y quería presentarte a alguien. ¿Puedes venir?
—Estaba esperando a alguien; pero si, vamos… Oye, ¿qué le pasa a tu pie?
—Me caí.— me sonrojé al recordar ese vergonzoso momento.
Caminamos hasta la pequeña mesa donde se encontraba Clary, inmutable como siempre. Johnny, con tres golpecitos en el hombro, logró hacerla voltear.
—¡¿Clary?!
—¡¿Johnny?!
—Amy…
—¡¿Matt?!— exclamé al volverme.— los dejaremos solos.— les sonreí y caminé hasta una banca cerca de allí; con Matt siguiéndome.
—¿Estás mejor?— dijo al sentarse a mi lado.
—Si, se ha aliviado un poco el dolor.
—Ah…
¿Por qué? ¿Por qué tantos silencios incomodos entre nosotros? Odio eso.
Mierda, por qué me sudan las manos.
—¿Qué pasó con Clary y Johnny?
Y ahora qué le digo.
—A Clary le "atrajo" Johnny.
—Wow.— dijo y rió un poco.— El gnomo tendrá novia. Por fin.
—Johnny es muy lindo y Clary también. Hacen bonita pareja, de verdad.
—Te diré un secreto… A Johnny le "agrada" mucho Clary y por eso no había tenido novia.
—¡Uh! Bueno, ahora es turno de Clary de dar un paso. Es muy cerrada y exagerada.
—Si, lo sé.
Silencios incomodos, destinados a hacerme enojar y sonrojar. Como me detesto por no tener nada de que hablarle. Algo me distrajo de repente, un mensaje: Amy, lo siento pero Johnny me invitó a comer y no pude negarme. Ve al departamento y si quieres comenzar a decorarlo, puedes llamar a algún empleado para que te ayude. Las cosas ya llegaron al piso. Clary… PD: Muchas gracias, Amy:)"
Genial. Gracias por dejarme sola, Clary.
—¿Pasa algo?— cuestionó Matt al instante que me levantaba de la banca.
—¿Eh?… No, nada, solo que Clary irá a comer con el Gnom… digo Johnny y…
—"Te dejó sola. Ahora tendrás que ir a decorar tu nuevo departamento sola".— hizo una muy mala imitación de mi voz.
—¡Deja de imitarme! ¿Cómo sabe que tengo que ir a decorar mi departamento? ¿Cómo sabes que compré un departamento?
—Clary acaba de enviarme un texto pidiéndome que te dijera que yo te ayudaré junto con otros dos empleados de la mansión. Que eres muy necia y de seguro ibas a decorarlo sola.
—Mierda.— dije por lo bajo.
—Te escuché.— se levantó y comenzó a caminar. Se detuvo solo para decirme.— Tu conduces.
—Dame las llaves.— me detuve a su lado justo para tomarlas.
Ya en el auto, comenzamos a hablar sobre el por qué de mi obsesión con los patos y algunas cosas de mi trabajo.
—…Yo no los persigo, ellos solo llegan a mi.— dije mientras soltaba una pequeña risita.
—Si, claro. ¿Y quién fue la loca que entró a la laguna para jugar con ellos?
—Vale, vale. Yo solo quería una foto para el Blog.
—Por cierto ¿Tu cámara…?
—Irreparable. Compré una nueva pero antigua, me encantan esas cámaras.
—Que bien.— me sonrió.— ¿Donde cruzo?
—A la derecha.— dije apuntando a la calle que daba al departamento.
—¿Es aquí?
Asentí y le pedí que esperáramos en el auto hasta que llegaran los chicos que nos ayudarían.
Daban casi las 6:30 de la tarde y habíamos llegado a las 5:00.
—¿Estás seguro de que Clary les avisó?
—Si. De hecho, yo mismo le envié la dirección a Carlo.
—¿Sabes qué? Al diablo los chicos, decoraré mi departamento sola.
Matt resopló y comenzamos a subir las cosas a mi pequeño hogar. Ya con todas las cosas dentro, comenzamos a decorar a mi gusto.
Matt y yo nos divertimos decorando y desempacando cosas. Gracias a Dios no pintamos porque las paredes ya eran negras.
—¿El póster de Nirvana debería ir aquí?—pregunté Matt a lo que este negó.
—Debería ir en tu habitación o en la cocina. Allí deberías colocar a Pantera en todo su esplendor.— tomó el póster de Pantera y lo pegó si yo siquiera decir "si".
—Vale, vale; Pantera en su grandeza pero el póster de Queen y The Beatles irán en la pared de atrás y sobre el televisor.— le sonreí y le lancé un cojín que tenía cerca.
—¡Auch!— se quejó.— Es un cojín pero lanzas fuerte.
—Eso es por los videojuegos.— sonreí ampliamente.
—Sabes que nunca me vencerás en Call of Duty.— espetó de forma retadora pero con una gran sonrisa. Reí.
—Quiero verte completar Assassin's Creed en un día. No me puedes superar, lindo.— reí aun mas fuerte.
Mi teléfono empezó a sonar con aquella melodía tan reconocida de The Runaways.
—Espera… ¿Aló?
—Amy…
¿Mi cuerpo se heló como de costumbre? ¿Solo una sonrisa se dibujo en mi rostro? Una risita la acompañaba para mas vergüenza ¿Vosotros creéis que me pasa algo con Matt? Esperad ¿Qué siento por Matt? Esto es algo que va mas allá de lo profesional.
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