Venganza dicen que no ayuda en nada, que es sólo una idea absurda para las personas. Para Louis era el inicio de su paz interna.
Harry quería su perdón pues se lo iba a dar pero a cambio de unos favores.
-¿Dónde lo tienes?- preguntó el castaño.
-En el sótano.- se limitó a decir Harry.
-Llévame con él.-
Era muy tarde para arrepentimiento, él era así y no iba a cambiar. El mundo, las personas, todo lo que lo rodeó hicieron que él fuera así, ya es muy tarde y es imposible que pueda cambiar.
-Por favor.... Ya no...-
Louis escuchaba la horrible voz de Juan, ese tipo que abuso de él, el hijo de puta que lo condenó a un infierno con Harry. El que destruyó lo que empezaban a tener.
El hombre estaba atado a una silla, tenía golpes y sangre en su rostro. Si pudieras verlo o siquiera imaginarlo te daría pena pero... ¿Quién tuvo pena por él hace años?
-Lo-Louis...- tartamudeo.-Ayu-ayúdame... Por fa-favor.- el ojiazul estaba frente a él, mirando sin expresión.
-Vivirás el infierno que yo viví por tú culpa.- sonrió tirando del cabello de Juan.-
[...]
Los golpes ya no los sentía Juan, estaba tan adolorido que no sentía los nuevos que daba Louis. Tenía cortes en todo su cuerpo, pronto morirá y eso lo sabía.
-Te creiste muy hombresito cuando me drogaste y abusaste de mi.- Sonrió.- Ahora ríe, ríe como lo hacías en el vídeo, como lo hiciste la última vez que te ví.-
-Er-Eres una... Pu-puta...-
-Di lo que quieras.- Louis dejó el palo de madera que tenía para tomar una navaja.
-Aún.. aún recuerdo... Lo.. bue-no esa noche...- el castaño miró desconcertado a Juan.- Por.. por eso te quise en... Mi cama de nuevo...-
-¿De qué mierda hablás?- el ojiazul frunció el ceño.
-Tenías... Quince años... Mis... Mis amigos y yo... Te-te hicimos mujer...- rió.- Éramos cinco.... Estabas tan bueno... Aún recuerdo tus gemidos.... Ah.. ah... Ah..- el hombre empezó a gemir.
El cinismo era un método para no mostrar miedo, aún cuando sabes que te podrías orinar del susto muestras cinismo.
-Cállate.- las lágrimas en Lou salían. Harry no estaba a su lado, le había dejado solo para que descargue ese odio hacia Juan.
-Ese culo... Moviéndose... En mi polla...- sonrió.- Tus mejillas sonrojadas... Ah...Ah..Ah..- siguió gimiendo.
-Cómo se llaman los otros -
-No te... No tengo porque decirtelo.-
-Lo vas hacer.- colocó la navaja en la garganta de Juan.- Dilo.-
-No...-
-Entonces dile adiós a tu familia.- sonrió Louis.- Harry está dispuesto a todo por tenerme y si yo le pido acabar con tu hermana y sus hijos lo hace.-
-No.. no podrías... Atentar...Contra niños.-
-Pero tú si de mi cuando apenas estaba creciendo.- Dió un golpe en su rostro.- No crees que a tu hermana le guste sentir lo que ustedes me hicieron.-
-Esta bien... No les hagas nada... El nombre de uno de ellos es Fabrizio Ferrero.-
-El resto.- exigió.
-Eres un... Hijo de puta...- Juan sentía como su cuerpo se empezaba a dormir.- Sigues igual de sabroso que antes... Estas igual de... Igual de bueno...- rió.- Disfrutamos mucho... De ti y asesinar a... A ese chico...-
-¡Cállate!- recordar las heridas que creíste sanar duelen más.
-Ahhh... Ahh..- Juan reía gimiendo.
-¡Silencio!- Louis se abalanzó a él y lo apuñaló, recordar todo eso le afectaba, tenía heridas que no cerraron, tenía cicatrices que dolían.
-Louis cálmate.- Harry había entrado al sótano cuando escuchó gritar al castaño.
-Ese... Ese tipo era uno de ellos.- las lágrimas en Louis bajaban por sus mejillas. Harry lo abrazo para tranquilizarlo.- Él era uno de los que me violó.-
