Deseame

Capítulo 1

Y aquí estoy de nuevo...

Mis años de experiencia me han llevado a saber cual es un buen candidato para tener relaciones sexuales, se han presentado en mi camino chicos guapos, pero para nada sensuales en la cama, chicos no tan guapos y un poco buenos en la cama, pero los mejores...aquellos que realmente lo hacen con amor.

Sólo una vez me he enamorado, y fue un fracaso, ahora sólo busco satisfacer mis necesidades sexuales, como Maslow lo dice, tener sexo es una necesidad primaria, todo es mejor cuando se tiene la experiencia y se satisface el deseo.

Estoy en un cuarto de hotel, muy lujoso, pero ya me he aburrido de esta vida, me gustaría conocer un buen partido.

Levantó medio cuerpo sentandome en la gran cama, cierro los ojos y trató de verme en un futuro con una familia. No, nada. Abro de nuevo los ojos y veo al sexy chico que esta a mi lado con su torso destapado, es tan deseable...

Quito las cobijas y me levantó, me pongo mis ropas y tomó mis cosas, voy al baño y me lavo la cara, me quedo viendo un momento el espejo, veo mi rostro tan desgastado por la madrugada, veo fijamente el reflejo de mis ojos...de repente veo que algo atrás de mi se mueve, al instante volteó y siento que algo cae en mi estómago, siento ganas de gritar, pero no sale nada de mi boca.

En frente de mi hay una sombra, una mujer para ser exacta, tiene un vestido desgastado y sucio, el cabello lo lleva suelto y revuelto. Apenas parpadeo y desaparece.

Salgo corriendo del baño y terminó de coger mis cosas, salgo corriendo del hotel, ni saludo a los de servicio que me saludan cortésmente, sólo quiero llegar a mi casa y descansar.

Un día muy cansado, ya hasta visiones veo.

He corrido como cinco cuadras, ya cansada decido mejor caminar un poco. Con paso firme sigo mi andar. Mirando a todos lados, ya es muy tarde...Y las calles están muy oscuras...

Escucho un estrépito a un lado de la calle, 《oh sólo un gato》 pienso.

Sigo mi paso y al caminar una cuadra más escucho pasos detrás de mí, el estómago empieza de nuevo a revolverse de un tipo temor. Empiezo a caminar más y más rápido, los pasos aumenta también la velocidad, con gran fuerza de voluntad, volteó a ver quien me sigue, para mi sorpresa, no hay nadie, eso me deja desconcertada. Doy vuelta y sigo mi camino, entonces...vuelvo a escuchar los pasos, alguien me persigue y no quiero saber de quien se trata.

Empiezo a correr, entonces una basura en la calle hace que me resbale y caiga. El golpe se oye seco, no hay nada de ruido cerca, sólo el sonido del aire en las ramas de los árboles.

Intento levantarme, sin embargo me doy cuenta que me he torcido el tobillo,

Trato de levantarme pero me es imposible, el dolor es muy fuerte, los pasos se sigue acercando, mi corazón va a más de mil por hora, y espero lo inevitable.

Siento como dos manos toman mis hombros y brinco de lo asustada que estoy, entonces una voz gruesa, áspera pero hermosa me habla al oído.

-¿Esta bien?

Del miedo que hace un momento sentía no puedo articular palabra alguna. Solamente asiento.

-Déjeme ayudarle,

Dejó que el desconocido me ayude, es algo raro, pero no siento temor alguno, su voz me ha tranquilizado, empiezo a normalizar mi respiración y entró un poco en confianza.

-¿Quiere que la acompañe? Hay mucha gente no muy buena por aquí, y con un tobillo torcido es una presa fácil. -Me habla con esa voz ronca que me empieza a gustar.

- si no es mucha molestia. -Digo un poco apenada. - me sentiría alagada.

Pone mi brazo sobre su cuello y empezamos a caminar, es muy difícil.

-No queda muy lejos mi casa. -Digo al desconocido.

Asiente y no articula ninguna palabra más.

Dos calles más adelante, se encuentra mi casa, la luz aún apagada...mis padres salieron de viaje de negocios, los dos trabajan en una empresa familiar, y aveces toman viajes para descansar un poco de mi.

Busco mis llaves en mi bolso y abro, lo invito a pasar. Con un gesto de cortesía rechaza mi invitación.

-No es bueno confiar en desconocidos, yo podría ser un asesino en serie.

Al terminar su frase, da vuelta y camina por el jardín hasta la calle, y cierro cuando ya no lo veo más... sus palabras me dejan muy desconcertada.

Pero gracias a la poca luz que hay en mi puerta, pude distinguir su rostro. Sin duda un hermoso rostro.

Voy a la cocina por una carne congelada para mi tobillo y voy a mi habitación, para mi mala suerte, está en el segundo piso, así que empiezo a subir poco a poco.

Al llegar, abro y cierro la puerta detrás de mí, me recuesto y pongo la carne en el tobillo. Cierro los ojos y me pongo a reflexionar sobre lo que dijo.

"-《No es bueno confiar en desconocidos...Yo podría ser un asesino en serie.》" Sin duda. Me gustaría conocerlo más...