8. Así que, ¿así se sentía?

46 4 3
                                    


Dos semanas han pasado desde que María me confesó que le gustaba. No han cambiado mucho las cosas, en realidad. Solo que ahora lo sé. De ahí en fuera, seguimos siendo las mismas amigas de siempre, de puta madre.

Hace ocho días, quizás, que no sé nada de Ángel. Salimos tres días seguidos y nos conocimos mucho más, pero me temo que le pasa algo.
Cuando digo que nos "conocimos" mucho más, me refiero a sus ideologías, etcétera. Como no sé cómo se comporta cuando está mal, no sé si lo esté ahora y para ser sincera, me da algo de pena preguntarle por mensaje. Así que esta noche iré a verla a su departamento.

Salgo del baño envuelta en una toalla blanca y elijo lo que me pondré para estar por casa hoy. Cuando ya voy por mis pantalones cortos me entra una llamada de Juanma.

—Melo, vente al bar de siempre.

—¿Quiénes están? —pregunto.

—Nadie, solo yo, ¿quién más quieres que esté? Si conmigo lo tienes todo —me río.

—Vale, vale. Ya voy para allá. Chau —cuelgo.

Ahora olvido el tema de andar cómoda por casa, guardo lo que ya había elegido y saco unos jeans de mezclilla normales, me los pongo y también una camiseta negra de Stranger Things. Cojo mis bambas Nike y una suéter por si hace fresco.

Cuando ya estoy lista, guardó la portátil para terminar de editar ya que he empezado a las 9 y ya son las 10:35 de la mañana. Guardo dinero, cargadores, una batería extra de la cámara y el disco duro externo.

Salgo de casa con todo el flow posible, me grabo durante el camino y también grabo algunas tomas de mis pies andando.

Llego al bar y saludo a Juanma, no está solo, ¿se conocían? No tenía ni puta idea.

—Juanma —lo saludo mirándolo con el ceño fruncido—, Ángel... —no sé si sonó como un saludo o una pregunta. Le doy dos besos. Ella está igual de extrañada que yo

—Melo, pasa —Juanma se hace a un lado para que me siente.

—¿Se conocen? —miro a Juanma y después a Ángel.

—¿Ustedes se conocen? —pregunta Juanma.

—Sí —decimos al unísono. Continúo—. ¿Cómo se conocen ustedes?

—También en la fiesta nos conocimos —responde Ángel—, volví a tu mesa para pedirte el móvil pero ya te habías ido. Juanma me habló para pedirme ayuda con una botella...

—Y la tía es muy maja, me agradó al instante —concluye Juanma.

No sé por qué, pero estoy sintiendo celos. Juanma es mío.

Después de que terminaran de explicarme todo, pedí un café. Por obvias razones, solo me grabé estando con Juanma. Terminé de editar el vlog y lo estaba exportando.

Aunque estuviera ocupada con los últimos detalles, observaba todo de Ángel. Sonreía y soltaba risitas con Juanma. Pero sus ojos se veían como dos gotas alargadas, estaban tristes. Tenía una sonrisa pero pareciera que sus ojos aún no se enteraban de que estaba contenta. Algo le estaba pasando.

La miré y se dio cuenta. Me miró. Nos quedamos así. Estábamos hablando con la mirada, ella me decía que en efecto, no estaba bien.

Juro que te quiero.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora