13 reasons why

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Pasaron dos días después de que casi Justin y yo nos besáramos, apenas cruzamos palabra, aunque estamos viviendo actualmente en el mismo techo, aunque supongo que Bryce le estará convenciendo en irse con él a vivir una temporada. Mi padre seguía muy metido en el caso de los Baker, el día anterior fueron al instituto y la señora Baker entro en un servicio de chicas de la escuela y vio pintadas con insultos a otras chicas, sin pensarlo dos veces saco una foto de esas pintadas, tenían pruebas de que hay alumnos que sufren bullying, mi padre dice que esta muy seguro que Hannah también lo recibía y que tienen muchos puntos para ganar este caso. Clay seguía escuchando las cintas, sé que lo esta pasando mal y estos días he ido varias veces a su casa, con la excusa de que me ayudara con algunas asignatura, aunque él piensa que aun no he superado a Jeff y que me siento sola, en eso no se equivocaba, Clay me hacia compañía y yo a él.

Me encontraba ahora en su casa, él estaba mirando en su armario alguna camisa que pegara con los pantalones grises que tiene puesto, yo estaba acostada en su cama leyendo un comic que él había comprado hace poco, voy vestida con unos pantalones al estilo boyfriend de tiro alto, combinados con un jersey negro sin mangas con un abrigo largo de color gris y unos zapatos negros con un poco de tacón. Vamos a salir de fiesta, ya que han abierto un pub nuevo y todos iban a ir, Clay le parecía buena idea ir a divertirnos juntos, beber un poco y bailar, yo acepte porque él lo estaba pasando mal con las cintas y pretendo que tenga la mente ocupada divirtiéndose, al igual que yo, no podemos vivir lamentándonos para siempre, nosotros seguimos vivos, no intento olvidar a Jeff o Hannah, los intento superar, seguir con mi vida. Clay finalmente se pone una camisa blanca y vamos directo al pub. Cuando por fin ya estamos dentro nos dirigimos a la barra a pedir dos cervezas, observo algunas caras conocidas del instituto, Clay esta muy animado contándome unas de sus típicas historietas absurdas de pequeño, nos estábamos divirtiéndonos y llevábamos varios chupitos, de repente aparece Tony con otro chico, intuyo que es su novio, los dejo hablando mientras yo me abro paso por los cuerpos de adolescentes que no paraban de bailar, siento que alguien me toca la mano, me giro y me encuentro con Justin, enseguida ruedo los ojos.

-Tenemos que hablar.-Grita Justin por la música alta yo le miro y niego con la cabeza.

-Lo que paso los otros días, tuvo que pasar.-Le digo acercándome a su oído para que solo me escuchara él.- No hace falta dar vueltas al asunto, tampoco hicimos nada, solo nos besamos no llegamos a más.

-íbamos a llegar a más Nora.-Dice bastante serio, él me mira a los ojos y me siento intimidada por su mirada. 

Examino a Justin de arriba a bajo, es normal que todas se sientan atraída por este chico de ojos azules, aunque yo nunca había pensado en él de esa manera, nunca me había sentido atraída por Justin, pero no entiendo porque ahora mismo quiero besarle, quiero que el me toque como me tocaba hace dos días, a veces pienso que el sabe todo lo que pasa por mi mente y más en este momento porque se esta acercando a mi rostro poco a poco y estoy deseando que se acabe esos centímetros de distancias, sus labios rozan los míos y yo me siento desesperada, pongo mis manos en su cara y no dudo en besarle, sin duda alguna él besa demasiado bien y sé que estoy cayendo, puede que mañana  me arrepienta, pero hoy, ahora mismo necesito tenerle, tal vez estaba demasiado ebria para entrar en razón.

-Estos dos días han sido un infierno.- Susurra en mis labios.- Solo quería estar contigo y sentía que tú me estabas evitando.

-En realidad si te estaba evitando.

-Lo sé.- Dice riéndose.-¿Te llevo a casa?.- Me pregunta y yo solo asiento.