Emily Potter. (Severus Snape).

Prólogo

El director de Hogwarts había terminado de entre a Harry a sus tíos muggles en compañía de la profesora McGonagall, quien no entendía aun porque los dejaba con aquellas personas, pero aun así no volvió a insistir con ello, ya que quedaba aun un asunto que debían tratar, el destino de una pequeña huérfana, que aquella trágica noche el 31 de octubre también perdió a poca familia que le quedaba.

— ¿Qué pasará con la niña? —preguntó la profesora de transformaciones en cuanto abandonaron aquellas calles muggles.

— No creo que la pequeña sea capaz de sobrevivir en un mundo sin magia dada su edad y conocimiento de esta, por lo que he confiado en un viejo amigo para su cuidado— respondió aquello que aún no les había dicho a muchas personas, para poder proteger a la pequeña.

— ¿Un viejo amigo?, yo misma la hubiera cuidado— comentó algo ofendida por la falta de atención a aquel tema.

— Alguien de la confianza de James, pero sobre todo alguien en quien la niña confía— le aclaró dándole a entender de quien se trataba, ya que solo había dos personas vivas que cabían en esa descripción, y una de ellas estaba en Azkaban—. Ha estado cuidando de ella desde que supimos de la profecía del joven Harry, no era seguro que estuvieran en el mismo lugar...

— ¿Ella está enterada de lo sucedido? —preguntó sin insistir con aquello, pues él había tomado una buena decisión sobre el cuidado de la niña, y eso ni ella podía negarlo.

— Ha comenzado a hacer preguntas, por eso le pedí a su nuevo tutor que tratara el tema con delicadeza...

— No hay delicadeza para decirle a una niña de cinco años que ha perdido a la poca familia que le quedaba— le contradijo al tan solo pensar en esa pequeña huérfana que la última vez que había visto, al fin le había sonreído luego de tanto tiempo. Aunque aún no hablaba mucho, dada su perdida...

— Deja de ver a la pequeña Emily con una niña indefensa, tengo fe en esa niña de que cuidará a Harry cuando llegue el momento— comentó a la deriva antes de negar sonriendo, ya que Minerva no había comprendido su comentario—. Es hora de separarnos— solo dijo poco antes de desaparecer para poder aparecer delante de la casa del nuevo tutor de Emily para informarle como había salido la entrega de Harry a sus tíos.

En cuanto apareció en el viejo apartamento de él, la primera en fijarse en su presencia fue Emily quien se encontraba sentada en silencio en una silla. Tranquilidad que fue destruida cuando lo miró sin mucho interés.

— Hola Emily— le intentó saludar Albus, pero ella ni siquiera le sonrió—. Emily— le intentó llamar de nuevo.

— Déjala Albus, apenas habla para pedir algo— le comentó su ex-estudiante al salir de la única puerta de aquel pequeño apartamento, que hasta ese momento había sido costeado James para el cuidado de Emily—. ¿Llevaste a Harry con sus tíos?

— Sí— solo respondió sin poder dejar de ver con curiosidad a la pequeña. Apenas tenía cinco años, se suponía que ya tendría que estar hablando con fluidez, y ser más comunicativa, pero no lo hacía. Entendía a la perfección cuando le dirigían la palabra, sin embargo, solo contestaba con gestos y no con palabras. Una condición que sabía que empeoraría en cuanto supiera de la muerte de James—. ¿Les has dicho algo? —preguntó siendo lo más prudente posible, llamando la atención de la pequeña.

— Aun no, se lo diré con el tiempo— se limitó a responderle.

— Recuerda que la cámara en Gringotts de Emily queda a tu responsabilidad, para que no les falte nada...—comentó sabiendo que él aun no aceptaba aquella ayuda.

— Todavía me queda un poco de mis ahorros hasta que encuentre un buen trabajo, por lo que gracias, pero no lo necesitamos— le dijo seriamente antes de ver a la niña y sonreírle. Aquella pequeña era lo único que le quedaba de James, aparte de Harry, pero este estaba fuera de su cuidado—. Estaba terminando de empacar...

— ¿Aún sigue en pie llevártela de Londres? —preguntó con suma curiosidad.

— No quiero que esté bajo la mira de la prensa— respondió con brevedad sin mencionar detalles delante de la pequeña quien escuchaba la conversación con atención intentando descifrar lo que le estaban ocultando—. Emily— le llamó haciendo que la niña le mirara—, ve busca tu mochila que casi nos vamos— le ordenó antes de ella asentir, levantarse de la silla y entrar por la puerta que llevaba a la habitación.

— Te escucha— observó con curiosidad la forma en que ella no rechistaba y le hacía caso—. Recuerda que aún debe ir a Hogwarts...

— Aún faltan seis años para ello, hablaremos entonces— respondió cortamente, al intentar ser fuerte luego de la muerte de sus amigos—. Emily podrá decidir entonces, por ahora mi preocupación es que pase por esto lo mejor posible...

— Háblale de Harry, la alegrará saber que aún tiene familia— solo mencionó antes de desaparecer para poco después Emily salir de la habitación con su mochila rosa sin emoción en su rostro.

— Es hora de irnos...—le informó con una fingida sonrisa.

— ¿Veremos a ver a James? —preguntó la primera frase de más de tres palabras que había pronunciado en su vida, llenándole los ojos de lágrimas al tan solo imaginar su rostro cuando se entere de que estaba muerto.

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Holaaaa a quien esté leyendo :3, espero les haya gustado el prólogo y a quienes me siguen y me conocen, sí ya sé, escribiendo fics nuevas con cientos por continuar, pero he tenido esta gran idea, que a pesar de querer de dejar al fin de escribir fics me hizo comenzar de nuevo... pero en fin les prometo otra gran fic llena de misterios y geniales capítulos :D. 

P.D: Probablemente suba capítulo una vez a la semana ya que al fin recuperé mi pc :3.