Capitulo 1: Una chica dificil

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Desde que tengo memoria, vivimos en este lugar, Transilvania. Reconozco que no es un lugar muy acogedor para muchos pero para mí sí, va muy bien con toda mi personalidad. Bueno, me presento, soy Luz Dark, ¿Contradictorio no? Luz y oscuridad, pero así es en realidad.

Hoy comienza un verdadero infierno, la secundaria. Es mi cuarto año en ella y sigo detestándola.

Es un asco, se mezclan todo tipo de personas respetando la estúpida jerarquía: los populares, las perras-porristas, los normales, los freaks, los nerds y el resto. Se preguntaran donde encajo acá yo, pero la verdad es que yo no entro en todo ese fastidioso grupo. Soy algo, diferente podría decirse, pero eso dejémoslo para después.

Recién llegada con mi Chevy del 59, atraje un par de miradas pero hace tiempo dejaron de importarme las personas, solo me concentro en mi mundo. Me dirigí a mi casillero, mientras sacaba unos libros un sonido desvió mi atención, todas las chicas miraban hacia un lado en especial, se escuchaban murmullos, por el pasillo se acercaba un chico pero no le di importancia.

Tome mis cosas para después seguir mi camino hacia el aula, la clase de Historia para ser más específicos. Busque con la mirada mi asiento, al fondo del salón contra la pared, nada de gente por suerte, aunque había un lugar vacío que esperaba que nadie lo ocupara. Asquerosa mala suerte pensé, el chico del pasillo se sentó ahí segundos después de haber pensado mi idea anterior, la verdad es que no tenía ánimos de lidiar con nadie, esta mañana la había comenzado bastante mal por lo tanto el que me hablara posiblemente iba a ser mandado al diablo.

La vida con mi madrastra era una complicación, nunca estaba en casa pero cuanto lo hacía era lo peor para mí ya que no podíamos estar ni un par de segundos sin gritarnos. Yo la odiaba y ella a mí.

Esa mañana, había tratado de cambiar mi forma de vestir, suelo andar con botines, camperas de cuero, camisas oscuras, pelo desalineado, todo entre una escala de grises y negro. Esa mañana Luisa, mi madrastra, se pasó de la raya. Me puso a apretones una camisa rosa, un asco realmente, por lo que me la saque enseguida echándola de mi pieza diciendo barbaridades pero como siempre contra ataco con el tema de mi padre, algo que siempre me hacía daño. Bladimir, mi padre, siempre fue el mejor de todos, compartía mi gustos, por la cacería, tiro con arco y flecha, pesca, todas mis mañas, el me demostraba su cariño todo el tiempo, pero eso seso desde que empezó a notarse su enfermedad, leucemia, tenía cáncer en la sangre. Desde que el murió yo ya no soy la misma, cambie muchísimo debido a eso, me afectó seriamente ya que él era quien hacia mi vida menos miserable haciéndome sentir normal. Luisa, nunca lo quiso, solo se casó con mi papá por la plata, asique cuando tenía la oportunidad de criticarlo lo hacía sin pelos en la lengua, cosa que me enfurecía porque ella no tiene el mínimo derecho. Hablo estupideces un buen tiempo hasta que abrí la puerta de mi habitación para cerrarle la boca, rápidamente la intimide, haciéndola retroceder, le recalque sus estupideces y volví a mi pieza dejándola ahí callada sin poder hablar.

Seguro se preguntan qué hago viviendo con ella, la verdad es que mi papá le hizo firmar unos papeles, en los cuales Luisa se comprometía a hacerse cargo de mi hasta que sea mayor, idea a la que no le encuentro coherencia ya que él sabía que yo la odio. Aun sabiendo que no teníamos nada de familia, porque por alguna extraña razón todos estaban muertos, yo no quería estar con ella pero el insistió.

Trate de dejar de pensar en lo de hoy en la mañana, me enfurece aún más volver a escuchar todas las cosas que dijo sobre mi papá. Mientras tanto, una voz me interrumpió.

-Señorita Darks, preste atención-

Le dirigí una mirada detestable a la profesora, mientras que ella solo se giró tratando de seguir la clase, no iba a discutir con migo, nadie se animaba desde el incidente del mes pasado. Apareció en el estacionamiento, el auto del profesor de Biología, todo rayado, pintado con aerosol, ¿Se preguntan la razón? Yo, me había puesto una mala calificación en algo que yo sabía que estaba bien pero como el no quiso reconocer su error no me quedo otra que vengarme. Así que nadie solía desafiarme, igual antes del incidente era lo mismo porque todo aquel que se atrevía a decirme algo se veía afectado seriamente.

Fije la vista en el pizarrón, que facilidad tenía para las boberías que daban en la escuela, con tan solo leer una vez me alcanza para aprenderme las cosas y para toda la vida, así que nunca tuve problemas con el estudio, es decir, no hago muchas cosas ni siquiera me esfuerzo en estudiar para las pruebas pero mantengo en la raya a mis calificaciones. De repente vuelven a sacarme de mis pensamientos, realmente me estaba empezando a fastidiar.

-¿Qué?- Dije molesta, con cara de pocos amigos.

-La respuesta Dark- Me dijo la profesora.

-Joda a otro con eso - Dije seria, por lo que ella se limitó a preguntarle al chico que estaba a mi lado.

-¿Usted que dice señor Fast?-

-En mi opinión la señorita Dark es una mal educada-

-¿Qué?- Le dije seria.

-Es la verdad- Me dijo al mismo tiempo que me miraba desafiante.- Tendrías que controlar mejor esos humos -

-Aja, claro estúpido, mañana ¿Si?- Dije con un poco de ironía.

A este que le pasaba, idiota pensé, lo único que me falta ahora es tener a un pesado que se me quiera hacer el malo, pero con migo no va a poder porque se la voy a hacer muy difícil.

-Malcriada- Me dijo divertido, al parecer le gustaba molestarme pero eso no iba a durar mucho.

Me pare, una advertencia para él, pero al parecer no le importo, por lo que avance y le partí el labio en una milésima de segundo para después alejarme del salón, pero ahí no termino todo ya que el chico ese parecía que estaba dispuesto a seguir molestando mi día. Venía atrás mío.

-¿Pensabas dejarme con la palabra en la boca?-

-Sí y ¿Qué?- Le dije volteándome.

-Eso no va a pasar-

-Claro que si- Dije caminando pero él me detuvo, trate de zafarme de su agarre pero era muy fuerte.

-No vas a poder con migo-

En cuanto termino de decir eso me di la vuelta, tomando su brazo, torciéndoselo para así dejarlo inmóvil, haciendo que sufriera al mismo tiempo, pero no tuvo la reacción esperada, me sorprendió al ver como se reía y al parecer era de mí.

-Débil intento por defenderte- Dijo.

-Estúpido- Le dije mientras me alejaba de él.

No entiendo que le pasa a este, debería saber que no tiene que meterse con migo, ya va a aprender mañana con quien estaba tratando.

Bueno, aca les dejo mi nueva novela... Espero que les guste! Ya hace tiempo queria publicarla, dejen sus comentarios para ver que les parecio :D

Dark ShadowsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora