Capitulo VI

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"Duras verdades"

El día que tanto temía y a la vez esperaba con ansias se acercaba tan rápido como una simple exhalación. Después de aquella vez es que durmió en su misma habitación resulto ser que siguió de largo toda la noche y cuando despertó por fin; ya había amanecido, muy apenada intento pedirle disculpas, pero el simplemente negó con la cabeza diciéndole que realmente había necesitado tal descanso.

Ya había pasado más de una semana de aquel entonces. Ninguno de los dos menciono aquel beso que aun mantenían a Bridgette flotando en una nube, pero ella se dijo algo entristecida que quizás fue el calor del momento, Felix bien pudo haber hecho eso por simple impulso y por enojo, ya no sabía que nombre ponerle a su comportamiento.

Él había sido el mismo, aunque seguía muy atento de ella lo cual con los nervios a punto de dispararse cada vez; tubo que empezar a usar las dichosas camisas mangas largas para ocultar los moretones y demás heridas superficiales, a veces se soltaba el cabello para tratar de esconder aquellas que estaban su cuello, y las de sus rostro solo usaba un poco de maquillaje que hasta ahora había ocultado muy bien las nuevas heridas.

Sí, porque HawkMoth no se había detenido con aquel Akuma luchador, estaba muy decidido a obtener su poder y Chat Noir aun nada que parecía, y su corazón comenzaba a temer de verdad, recordando cruelmente ese sueño que aun la perseguía algunas noches.

Tikki y ella estaban envueltas en un problema, ambas cansadas y la mayoría de veces estaban casi sin energías, aunque trataban de apoyarse una de la otra y dándose ánimos, pero Bridgette en su interior tenía mucho miedo de lo que le esperaba si seguía combatiendo sola a los Akumas, no había visto en días a sus padres y ni que decir de Allegra, por el simple hecho de que le daba pánico que por un descuido suyo se dieran cuenta de sus lesiones.

Por eso se sintió un poco aliviada cuando el doctor fue a visitar a Felix y con una sonrisa anuncio que ya estaba casi totalmente recuperado y podría hacer sus actividades diarias solo reduciendo algunas cosas por si acaso, pero que absolutamente aun no podría hacer nada de fuerza física porque su hígado aun le faltaba un poco más por sanar y algo demasiado extremo podría hacer que se desgarrara. Gabriel Agreste también había estado presente, el importante diseñador había vueltos unos pocos días antes.

Y cuando Gabriel y el doctor se retiraron para hablar sobre algunas precauciones que debía tener su hijo; ella y Felix se habían quedado a solas en la amplia habitación. El rubio de pie observándola con tanta intensidad que ella sintió sus rodillas flaquear.

Bridgette se sentía emocionada porqué por fin el rubio pudo salir adelante después de su delicada condición, pero a la vez; tenía su corazón encogido ya que llego el momento en que sus caminos volvían a separarse y esta vez quizás no volviera a cruzarse.

Pero ella agradeció haber pasado tiempo con él y ayudarlo en todo lo que estuvo a su alcance. De sentirse feliz por su compañía, de tener la oportunidad de ver otras facetas del rubio, de ese magnífico beso que ambos compartieron y que jamás se volvió hablar...

Sin embargo, quería llorar, por esos sentimientos que nunca se atrevería a confesar, de ese amor tan intenso y ardiente que quemaba en su pecho, pero se obligo a mantenerse fuerte como su alter ego haría en su lugar.

Con una sonrisa adornando sus labios; agarro el valor suficiente para separar las distancias en una pequeña carrera y prácticamente se lanzó a sus brazos dejando a Felix totalmente sorprendido y muy quieto.

Le rodeo la cintura con sus delgados brazos y apoyo su mejilla en su pecho con su corazón acelerado y las mejillas ruborizadas.

—Me alegra que ya estés bien...—murmuro ella haciendo retroceder ese nudo en su garganta.

Shift Nurse [Feligette]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora