Por fin se había resuelto todo el tema con Debrah, Nathaniel había sido brillante al ocultar ese micrófono para que todo el instituto supiera la verdad. Aunque lo que nadie sabía era que él tenia motivos más personales que lo motivaron a realizar éste acto.
Todos celebran en el pasillo debido a la "huida" de Debrah, bueno, casi todos, Castiel tenía con muchas cosas en la cabeza, muchos sentimientos juntos, ella solo ocasionaba problemas cada vez que ponía un pie en el instituto, pero Castiel se dio cuenta hasta ahora hasta ahora. Estaba ciegamente enamorado de ella, incapaz de verla haciendo algo como lo que hizo, terminando una gran amistad de varios años, sólo por no ver la realidad.
Lynn nota el comportamiento de Castiel y decide brindarle un abrazo. Nadie debe estar solo en un momento así, piensa ella. Se sapara del abrazo y le pregunta una duda combinada con esperanza que tiene.
—¿No piensas arreglar las cosas con Nathaniel? —dijo Lynn con sus ojos brillando con esperanza. Castiel en cambio solo mantiene su semblante de tristeza, aunque ahora frunce un poco el seño.
Tiene razón, debería disculparse, no era justo todo lo que le hizo a Nathaniel debido a un malentendido, debió haberlo escuchado y confiado en él, despues de todo eran mejores amigos. Castiel sabe que estuvo mal, pero su orgullo le impide disculparse y arreglar las cosas, después de tanto tiempo lo cree incapaz de perdonarlo. No dejará que éstos pensamientos se sepan, seguirá manteniendo ése "odio" entre ellos.
El orgullo puede destruir muchas cosas.
—El pasado es pasado, no vale la pena disculparse por algo que sucedió hace años —mintió, en realidad tenia la esperanza de que pudiera recuperar su amistad con Nathaniel, pero su orgullo era más grande e importante.
El rostro de Lynn se volvió enojado y sus ojos verdes se cristalizaron, ¿Cómo podía dejar que las cosas siguieran igual, después de todos los problemas que tuvimos para detenerla, ahora resulta que no hará nada? Pensó Lynn mientras apretaba sus manos formando un puño.
—¡Cómo puedes ser tan egoísta como para dejar las cosas así? ¿Acaso no eran buenos amigos? ¿En serio puedes ser tan insencible? —elevó la voz con rabia, los ojos de Lynn estaban cristalinos, se sentía enojada, triste e impotente al no poder ayudar a Castiel, sabe que su orgullo es muy grande como para hablarle a Nathaniel sobre recuperar su amistad, es un buen amigo y Lynn sabe su secreto, por eso queria ayudarlo, tenía que hacerlo.
—Entiende que no es fácil recuperar una amistad que se perdio desde hace tanto —dijo mientras pasaba su mano por detras de su cabeza, en un gesto de incomodidad y tristeza.
—No, no lo entiendo, no entiendo cómo dejas pasar una oportunidad como ésta.
—Yo hago las cosas a mi modo, entiende. No es tú problema
A Lynn le molestaba demasiado la actitud de Castiel. No pudo seguir hablando con él sin la necesidad de golpearle, así que se giró completamente, haciendo que sus largos cabellos rozaran a Castiel, y decidio irse rapidamente.
Castiel solo volvio a poner una expresión de tristeza, había estado actuando fuerte enfrente de Lynn, solo para no dañar su reputación de chico malo. Decidió irse hacia algún salón vacío.
Nathaniel había estado viendo la escena desde que comenzó la pelea con Lynn, le dolía, "Castiel es un idiota", pensaba el rubio mientras sus ojos se cristalizaban, tenía la esperanza de volver a ser amigo de Castiel, pero vio que a éste no le importaba en absoluto. Decidió salir corriendo de ahí rápidamente, quería estar solo y no ver a nadie. Fue directo hacia el hueco debajo de la escalera, ése era el mejor lugar que veía posible, ya que había visto a Castiel dirigirse al salón. Rapidamente llegó al lugar y se sentó, apretó sus rodillas hacia su pecho y recosto su cabeza allí. No, no lloraría, no estaba tan herido como para llorar, solamente quería estar ahí, solo, con sus pensamientos. Su tranquilidad no duró mucho, le dio un ataqué de rabia y con su mano derecha golpeó el piso, su mano quedó roja tras éste acto.
Castiel se encontraba en el salón, estaba cerca de la ventana, ésta se encontraba abierta, el pelirrojo aprovechó para fumar un cigarrillo, siempre llevaba uno con sigo, para casos de estrés como en los que se encontraba. Necesitaba decidir que hacer, las palabras de Lynn seguían retumbando en su cabeza, ¿podía dejar de ser tan orgulloso y enfrentar las cosas con Nathaniel? Para Castiel, el delegado de cabellos rubios era alguien especial, vivió muy buenos momentos con él, pero eso había sido algo del pasado, en el presente le seguía teniendo aprecio y algo más...
Sus sentimientos por él comenzaron seis meses despues de lo que ocurrió con Debrah. Un día solo comenzó a sentir un vacio en su pecho por ver a Nathaniel, le daba nostalgia e ira, pero sólo un poco de éste ultimo sentimiento. Comenzó a verlo, discretamente, sin que nadie lo notara, no sabía la razón, sólo le gustaba mirarlo, los gestos que hacía, la forma en que caminaba, en la que sus ojos brillaban al mirar cualquier cosa que le gustará, cuándo se enojaba porque Castiel no quería firmar el justificante, cuándo reía, cuándo estaba cansado debido al exceso de trabajo de delegado principal. Todo lo que hacía le parecía sumamente encantador. ¿Por que sentía esto hacía alguien que lo había "traicionado" hace casi un año? No lo sabía, solo sabía que no podía apartar la mirada de él. Una vez, sus miradas se encontraron, sólo fue un segundó pero Castiel sintió demasiadas sensaciones al mismo tiempo, cómo si su corazón fuera a salirse de su pecho, Nathaniel había apartado su vista rápidamente, con incomodidad, Castiel en cambio no había apartado su vista de él, notó como tosió para disimular su incomodidad, "adorable", pensó Castiel mientras esbozaba una pequeña sonrisa en sus labios. Empezó a molestarlo unos meses después, era una buena excusa para "hablar" con él, así podía verlo de cerca, le encantaba la manera en que su corbata estaba desacomodada y su cabello algo despeinado cuando masajeaba su cabeza debido al estrés y enojo que el pelirrojo le provocaba. Castiel muchas veces dudó sobre si era gay, y no, no lo era, sólo sentía eso con el rubio, no encontraba la razon del por que, "¿Se suponia que lo odiaba, no? Entonces ¿Por qué? ¿Por qué ahora se desarrollaron estos sentimientos?" La respuesta era facil, Castiel antes lo veía como un amigo, casi no lo observaba, no le prestaba atención por estar con Debrah, estaba ciego por ella, nunca supo lo importante que era Nathaniel para su vida hasta que lo perdió, creía que todo era culpa de Nathaniel, por meses en su corazón sólo sentía remordimiento y odio por él, lo observaba para encontrar cualquier defecto, por muy pequeño que fuera para burlarse de él y menospreciarlo, pero sin darse cuenta lo empezo a observar sólo porque le gustaba, no para criticarlo, en cambio de eso le empezó a fascinar.
Castiel no había logrado descifrar los sentimientos que sentía hacia el rubio, hasta el momento que supo la verdad de Debrah, fue cómo un balde de agua fría para él, como si le hubieran destapado los ojos y volviera a tener claridad del mundo, un mundo que nunca había visto de la manera en que la estaba viendo ahora.
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Si Pudiera Amarte (CASTIEL X NATHANIEL)
FanfictionNathaniel y Castiel, dos chicos que sienten muchas cosas entre ellos. Anteriormente mejores amigos, debido a malentendidos, enemigos, y ahora, tal vez algo más...