El plan en marcha

363 38 42
                                    

—Vaya Shun, en verdad parece que todas las maquinas te odian incluso aquí —comentó el castaño mientras avanzaba hacia la ya formada multitud.

Al salir del carruaje que habían usado para llegar la túnica de Shun se había atorado con la puerta, y al mostrar la entrada para el concierto, un fallo en el sistema de registro los detuvo por un rato. No estaba mal decir que habían pasado por varias complicaciones para llegar al concierto.

—No me culpes, aunque admito que quería viajar con algo más de clase —el Rey Demonio tenía la rosa preparada en manos. También había hecho al Cuervo cortarle las espinas para que su ídolo no se lastimara con ésta—. Tal vez el lomo de un elefante hubiera sido un buen medio de transporte.

—¿Tienes idea de dónde estamos? —Kai no podía evitar poner en duda si era una broma o no lo que el albino le decía, y la risa que el Rey Demonio dio como respuesta no le fue de gran ayuda.

Como la audiencia estaba conformada en su mayoría por chicas eufóricas que no dejaban a nadie avanzar por toda la bulla que tenían, tuvieron que ir hacia uno de los costados del auditorio, a un punto cercano al escenario. Al Cuervo seguía pareciéndole un plan exagerado, pero sabía que sus quejas sólo serían ignoradas.

—Bueno, al menos llegamos a tiempo para el concierte de Hajime —comentó al ver que éste aún no salía al escenario.

—Deberías mostrar un poco más de respeto hacia el Rey Oscuro —dijo con su usual tono de voz—. Aunque Hajime es una persona generosa no hay que olvidar la diferencia de niveles.

Kai arqueó una ceja ante el comentario contrario:

—Pero si tú también le llamas Hajime —repuso.

—Yo soy el Rey Demonio, además, soy su fan número uno. Tengo privilegios.

Sin más comentarios, Kai se limitó a asentir y mirar hacia el escenario al escuchar que el revuelo aumentaba. Al parecer el tan esperado Rey Negro por fin se hacía presente para lo que muchas chicas de distintos lugares, algunos muy lejanos, habían ido a aquel lugar. El castaño estaba un tanto sorprendido al ver las múltiples expresiones de placer y alegría que el príncipe del reino podía causar en él.

El tiempo pasó, canción tras canción, hasta que por fin llegaron a la que sería la última de la noche. El Rey Demonio arrojó la rosa blanca con una sorprendente puntería cuando el azabache estaba en la última línea.

Kore zo, shin no koi.

No se sorprendió al ver que ésta era atrapada en el aire por la mano del Rey Negro mientras pronunciaba la última palabra haciendo una pequeña reverencia. La primer parte de su plan estaba hecha. Ahora sólo tenía que esperar a la segunda face; dejar que el aroma de la rosa hiciera su efecto.


——

–––––––

-----------

Mis actualizaciones son tan seguidas como las veces que mis otps se hacen canon jajajaja (fruta life :''v) En serio, disculpen la tardanza, pero había anotado en una hoja este y otros caps, y como no la encontraba, me había negado a pensar en otra cosa (así o más terca xd) y al fin me resigné y escribí esto :3 (se me hizo mucho tiempo de hiatus(?) espero les haya gustado.

Pd: ''Kore zo, shin no koi'' se puede traducir como ''aquí está, el nuevo/verdadero amor''

El Rey Negro durmiente (Tsukiuta) (HajimexShun) (Yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora