Academia Gol D. Roger

capítulo 10

Zoro intentaba despertar a su compañero de puesto, pues necesitaba hablar con él, pero Luffy no daba ninguna señal de vida

- Luffy...despierta - susurró mientras lo movía.

- Carne...-habló entre sueños el pelinegro.

- Oye glotón, reacciona- volvió a susurrar el peliverde, esta vez agitándolo con mas fuerza, pero el resultado fue el mismo, Zoro gruñó - Ya despierta inútil- agregó mientras le tiraba un cachete como si fuera de goma.

-¿Eh? ¿Qué pasa Zoro?- preguntó el pelinegro aún soñoliento y pasándose la mano por el ojo de forma perezosa.

- Oye... ¿Qué le sucede a Yuki?- no pasó desapercibido el momento en que Luffy se tensó, él nunca había sido muy bueno mintiendo, algo que a veces resultaba beneficioso.

- No te oculta nada si es eso lo que crees- respondió el pelinegro mientras desviaba la vista y con un tono sarcástico.

-¿Qué me esta ocultando?- cuestionó extrañado el peliverde.

- Nada que pueda afectar su relación, eso es seguro- Luffy volvió a hacer lo mismo de antes- Ahora, si me disculpas, voy a seguir durmiendo, las matemáticas me dan mucho sueño.

Y con esta oración, volvió a recostar su cabeza sobre el libro de matemáticas y se dejó llevar por la monótona voz del profesor, quien explicaba una formula casi imposible de entender.

Zoro devolvió su mirada al frente, se quedo viendo cómo el profesor movía su boca y apuntaba a lo que estaba escrito en el pizarrón, pero no escuchaba las palabras que salían de su boca. Solo estaba pendiente de esa pequeña vocecilla en su cabeza.

"  ¡Maldición! ¿será por lo de Perona? " pensó el joven chico. Miró de reojo a la pelirosa que estaba unos puestos más allá, esta mordía su lápiz y anotaba algo de vez en cuando, desde su puesto podía percibir el fuerte perfume de la joven.

Zoro se revolvió el cabello con frustración e intentó concentrase en sus problemas "Agh, soy un idiota...debo hablar con ella" y con esta idea en la cabeza el peliverde se quedó pensando toda la hora en alguna forma de abordar a la pelicastaña, pues si esta lo estaba evitando, no seria muy fácil tomarla desprevenida.

- ¡Deberías ir a la enfermería! - exclamó Nami mientras le impedía dar un paso más.

- Pero no me molesta...tanto - habló mientras susurraba lo último.

- Yuki-chan, Nami-chan tiene razón - replicó la peliazul mientras la miraba en forma de suplica- Si el hombro te molesta seria mejor ir a examinarlo.

- ¡De seguro ya hiciste fuerza! - habló fuerte la pelinaranja, a Yuki se le vino a la mente la imagen de cuando estaba colgada en el árbol bajo la lluvia. Sabia que debería ir a ver a la enfermera, pero no le agradaba la idea de tener que tomar una pastilla o que la fueran a pinchar, no tenia buenos recuerdos de los médicos ni esas cosas.

- Pero...si ya no me molesta... -dijo la chica con un puchero, desvió por un segundo la mirada hacia atrás de sus amigas, y caminando por el pasillo, a paso veloz, pudo divisar a un peliverde ¿Su objetivo? ella - Pensándolo bien, talvez si deba ir a ver a la enfermara.

Yuki se dio vuelta y comenzó a correr en dirección a la enfermería, Nami y Vivi se quedaron viendo extrañadas como la pelicastaña se alejaba. De un momento a otro pasó corriendo por su lado Zoro, quien apuraba el paso para alcanzar a la joven.

Zoro giró en el pasillo a paso veloz, mientras que Yuki sólo se apresuraba lo más posible, la pelicastaña dio una rápida mirada sobre su hombro y se aterro cuando vio cómo el peliverde estaba por alcanzarla. Devolvió su vista hacia el frente y diviso la puerta café con el letrero "enfermería".