Lost (Calum Hood)

8.

Skylar O’Sullivan

 

-Pensaba que cuando me dijiste “asadero familiar” significaba con la familia, no nosotras dos en tu mansión de cuatro plantas con piscina en la terraza al lado del laberinto de Alicia en el País de las Maravillas-murmuré, un poco extrañada, juraría que Diane me había mencionado que estaría su familia.

-Vendrán dentro de un rato, ¿quieres ver Peter Pan? Se te olvidó en mi casa la última vez que viniste-me explicó, pero yo sacudí la cabeza-Sky, tienes que animarte, nunca habías rechazado a Peter…

-Voy al baño a arreglarme un poco-contesté, abriendo mi bolso para encontrar mi neceser con todo mi maquillaje; lo necesitaba.

-Estás bien así, Sky-me tranquilizó Diane-No sé ni por qué usas maquillaje, tampoco es que lo necesites.

-Déjalo estar-susurré irritada; ella no tenía ni idea pero ¿acaso era su culpa? No, pero los seres humanos somos así, siempre buscando a alguien para echarle la culpa en situaciones difíciles.

Tras cerrar la puerta del baño con un portazo, mi cuerpo se apoyó en la puerta y, al dejar mi guardia baja, toda la fuerza que me mantenía de pie se desvaneció, haciéndome deslizar hasta tocar el suelo.

<<Esto es de locos, ¿por qué me siento así? Si apenas le conozco, ni me sé cuál es su color favorito, aunque eso es lo de menos pero, el caso es que, no le conozco. Entonces, ¿por qué me siento tan frágil y fácil de romper? ¿Por qué siento como si toda esa fuerza que me mantenía estable, ya no quiere obedecer mis demandas? ¿Por qué me siento tan débil pero cuando estaba con él me sentía tan fuerte?>>

Decidí ser débil por un par de minutos, decidí llorar sin sentirme avergonzada, decidí gritar sin sentir remordimientos. Al observar mi brazo izquierdo, decidí quitarme todas aquellas pulseras que cubrían mis cortes; arañazos me cubrían los cortes rojizos que no parecían querer desaparecer de mi tez pálida pero, ¿quería yo que desaparecieran? Esos cortes me hacían sentir algo, me despertaban de mi dolor para añadir más.

Sacudí mi cabeza y, tras ponerme de nuevo todas aquellas pulseras cuidadosamente, me levanté y comencé a aplicarme corrector y base; lo demás no hacía falta.

El timbre de la casa de Diane retumbó en mis oídos, haciéndome entender que era hora de salir del baño y socializarme; debía recordarle a Diane cambiar ese dichoso timbre.

Bajé las escaleras con rapidez hasta la puerta principal y al ver una cara familiar, aquella cara que tanto ansiaba ver de nuevo, me maldecí por haber salido del baño.

Nuestros ojos de encontraron y noté cómo las palmas de mis manos empezaban a sudar, al igual que mi frente, y al observa el color rojizo de sus mejillas y el hinchazón de sus ojos pude ver las numerosas noches en vela que él había sufrido; cuando me di cuenta, mis manos estaban temblando debido a la ansiedad, los nervios y a la acumulación de emociones.

-Skylar-mi nombre sonaba melódico en su boca pero, al ver un cambió de expresión en su rostro, me preocupé-estás…bien.

“Bien.

(Del lat. bene, bien).

m. Aquello que en sí mismo tiene el complemento de la perfección en su propio género, o lo que es objeto de la voluntad, la cual ni se mueve ni puede moverse sino por el bien, sea verdadero o aprehendido falsamente como tal.”

Me quedé estupefacta: ¿bien? ¿Yo? ¿Describe la situación de una chica que no ha podido dormir porque sólo puede pensar en él, una chica que es incapaz de comer porque su estómago se niega a aceptar la comida debido a la tristeza que siente, una chica que se cubre el rostro de maquillaje para que no se sepa lo mucho que está sufriendo, describe la situación de esa chica como bien?