Capítulo 1:

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-¡Que puto calor!- dije mientras notaba como el calor se apoderaba de mi cuerpo.
Hurrington beach, verano, 30 grados. Estaba ya del verano bastante harta y más aun de no poder salir, al menos tenía mi propia piscina.
Vivía con mi hermana Cherry, nuestros padres vivían en Nueva York así que nos dejaban a nuestras anchas.
-¿Sigues durmiendo, perezosa?-dijo mi hermana Cherry lanzándose en bomba encima mío.
-Nop, ya estaba despierta.
-Sabes que hay nuevos vecinos ¿Verdad? Y están bastante comestibles.
-No me importa, los vi ayer y parecen gays.
-Tú misma, reina de las bordes, iré a presentarme- dijo mi hermana con una sonrisa.
Tenía un humor de perros pero eso fue desde que mi novio, Gerard, rompió conmigo cuando terminó su beca erasmus, hacía un mes. Desde entonces estaba que lo odiaba todo menos mi canal de youtube.
Era como tantas otras youtubers de belleza que subía dos o tres videos una vez a la semana y en ellos hacía lo típico, hauls de cosas que me iban llegando, tutoriales de maquillaje, tips... Como tenía muchos seguidores me daban dinero solo por subir material.
Me levanté y me hice mi rutina mañanera, me puse distintos tipos de cremas y me preparé para grabar aprobechando que era fin de semana y que estaba sola, ya que cuando estábamos las dos en casa todo era un show.
Conecté la camara y me puse a grabar como siempre, esta vez con cosas de una marca que no conocía aunque me documentara antes, Anastasia Beverly Hills. Probé varios productos en mis brazos y me quedé alucinada con la cantidad de pigmento que contenía dando mi opinión sincera al asunto, ya que no me importaba el maquillaje gratis y por supuesto no era ninguna falsa.
Poco después escuché mucho ruido y me puse lo primero que vi en el armario, unos shorts vaqueros y una camiseta de tirantes básica de color rosa palo.

Bajé y la imagen que vi me transtocó, mi hermana estaba sacando a un tío de la piscina. Era uno de los tíos de ayer, alto, guapo y con un pearcing en medio del labio pero... ¿ Qué diablos hacía en nuestra piscina?
¿Qué está pasando?- dije bastante cabreada, ya sea porque me interrumpieron la grabación como porque ese gorrón estaba en mi piscina. Si mi hermana lo estaba sacando era por algo.
-Estoy conociendo al nuevo vecino-dijo con esa chulería tan típica de ella.
Adoraba a mi hermana pero siempre hacía de las suyas, claro que siempre me vengaba y a lo grande.
-¿Por qué está sangrando?-dije mientras miraba la pequeña brecha en medio de su frente.
-Estaba durmiendo en tu colchoneta y le lancé una piedra para despertarlo, pero cayó al agua y comenzó a ahogarse así que...
Tan propio de mi hermana, ese chico podría demandarnos por esa misma cosa y ella ni se preocupaba, claro que por otra parte estaba en mi piscina.
-¿Que le has tirado qué?- Nunca piensas las cosas- dios, en el lío en el que nos había metido esta mujer.
-Y tú piensas demasiado-bufó mirándome.
Iba a contestarle cuando el chico me interrumpió.
-Siento interrumpir, pero me desangro-dijo tocándose la frente.
Era un poco exagerado pero la herida aunque pequeña sangraba profusamente. Yo estaba estudiando enfermería por tanto pude mirar como era la herida y ya había hecho otras suturaciones, claro que no a personas reales.
-Ve a por aguja e hilo, habrá que coserle la herida-le dije, era culpa suya, por tanto tenía que apechugar con las consecuencias.
Cuando ella se fue para la casa farfullando cosas entre dientes yo me encaré con él.
-¿Cuánto por no demandarnos?-dije mientras le miraba.
-Una cita conmigo, nena-dijo con una sonrisa de oreja a oreja-por cierto, soy Jimmy.
-Yo soy Kelly- dije mirándole. Ahora que me fijaba estaba tatuado y bastante, no era para nada mi tipo ya que a mi no me gustaban tan punks.
-Esta noche a las 9- dijo mirándome- solo una noche y todo estará zanjado.
-Está bien-gemí con un poco de disgusto mientras esperaba a mi hermana, la cual no tenía ni idea de si había ido a la casa de mis padres a por el maldito hilo y la jodida aguja.
Poco después por fin apareció, éramos iguales pero cambiábamos en el color del pelo, ella era pelirroja y yo tenía el pelo marrón chocolate, en los ojos, yo los tenía marrones y ella de color verde y la piel, yo estaba bastante más bronceada que ella ya que me encantaba leer un poco mientras tomaba el sol y ella era como un vampiro.
-¿ Por qué has tardado tanto?- dije recriminándole un poco mientras ella me daba el material quirúrgico.
-No encontraba un color bonito de hilo- contestó sonriendo a lo que Jimmy se rió, ya me empezaba a caer mal. Le pinché con una aguja por primera vez para suturar la herida e hizo un ruido estrangulado.
-¡Ay!- se quejó y le miré a esos preciosos ojos azules,vale si, los ojos si que eran bonitos.
-Estate quieto, Jimmy-dije con voz pausada mientras le miraba.
-Es que duele- dijo con una especie de puchero.
-¿Jimmy?- preguntó mi hermana sentándose a nuestro lado apoyando la mejilla en sus nudillos.
-Es mi nombre-dijo él con una sonrisa triunfal-¿Cómo te llamas tú, bonita?-seguí suturándole y escuché otro quejido suyo.
¡Ups! Perdón-me disculpé  mientras mi hermana me miraba enarcando una ceja.
Llámame como quieras- susurró mientras se acercaba a él y yo, lo más profesional que podía, corté el hilo.
-¡Ahí estás!- dijo otra voz asomándose por encima de la valla que separaba nuestras casas- Te dejo solo unas horas, ¿y ya te montas un trío?
Yo me ruboricé por las palabras del otro chico, por eso del trío, era bastante mojigata.
-Brian- gritó riendo Jimmy- estas son Kelly y... ¿Kelly 2?
-No nos parecemos en nada- dijimos las dos a la vez.
-¡Si sois iguales!-dijo Jimmy mientras miraba a mi hermana y le decía:
-Bueno tú eres pelirroja y... ¿Te encuentras bien? ¡Qué pálida!- murmuró dándole golpecitos con el dedo en la mejilla.
-Eh Kelly 2, ahora que te miro bien- dijo Brian mientras la miraba de arriba a abajo- sí me tomaría esas cervezas contigo-dijo seductor.
-¿Esa estúpida sonrisa te funciona con alguna?- dijo mi hermana descarádamente mientras Jimmy y yo contemplábamos la escena.
-Con unas cuantas-dijo mientras sonreía de manera egocéntrica.
-Seré la excepción-dijo mi hermana con una sonrisa arrogante mientras cogía su ropa que se había quitado para salvar a Jimmy y las cervezas- ¿habéis visto el canal de mi hermana?
Houston tenemos un problema, y bastante gordo, me había acordado que me había dejado la cámara grabando y a saber lo que me había hecho la loca del coño de mi hermana.
-¡Oh no!- gemí mientras miraba a todos los presentes-¿Qué has hecho esta vez?-grité alterada mientras entro en nuestra casa persiguiendola.

MezmerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora