FREAKSHOW || Bangtan.

V

Fué una larga noche, cada uno tenía un cuarto donde descansar pero no pudieron cerrar los ojos en toda la noche, el miedo los consumía y era obvio después de todo, no estaban seguros de si podrían dormir sin caer en una trampa o que alguien los atacase. Era una pesadilla en vida, realmente los atemorizaba.

El día finalmente llegó y los rayos del sol se filtraron por las ventanas de las siete víctimas, no tardaron mucho en escuchar nuevamente el altavoz.

—Buenos días, concursantes, espero que hayan pasado una bonita noche. Será un largo día. El primero que llegue a la sala principal tendrá una ventaja, mejor corran.

Cada uno de los chicos se levantaron de las camas a la velocidad de la luz y corrieron hacia la sala dicha, apenas se vieron pero se encontraron todos en el lugar. El primero en llegar fué Kookie, miró a todos como si estuviera disculpándose, Jimin lo miró con decepción pero como habían dicho antes, harían todo lo posible por sobrevivir. Jin y Namjoon no parecían nada felices, sus expresiones parecían de odio hacia el pequeño, Hoseok seguía asustado, Yoongi estaba serio y Taehyung le sonrió de una manera que lo incomodó demasiado, incluso lo asustó más de lo que estaba.

—Bien hecho, Jeon Jungkook, tienes la ventaja de elegir tu arma, elígela con cuidado, podría hacer que ganes el juego. Los demás diríjanse a la puerta roja a su izquierda a medida que los llamé. El primero es Park Jimin.

Jimin estaba nervioso, demasiado, pero decidió que seguir las órdenes del tipo sería mejor que revelarse y terminar el retorcido juego antes de empezarlo. A paso firme se dirigió a la puerta roja y entró, los demás no volvieron a verlo una vez cruzado el umbral.

El interior del lugar era parecido a una oficina pero más siniestro. Sobre la mesa había una vidriera y dentro de ella habían varias armas de distinto tipo, no sabía qué hacer, estaba temblando, ¿que se supone que tenía que hacer ahora? Entonces una nota cayó desde el techo.

Park Jimin. Pistola.

Jimin miró con miedo hacia la vidriera, allí había entre otras armas una pistola pequeña pero al parecer efectiva, abrió la puerta de cristal y la tomó, la observó en su mano y se sobresaltó cuando la voz, está vez más baja pero saliendo de algún altavoz lo sorprendió.

—Esa será tu arma, Park. Úsala con cuidado, si te quedas sin balas no podrás recargar. Te deseo suerte. Sal por la puerta que dice "salida" y corre a esconderte.

Jimin asintió aún sabiendo que la voz no lo veía... O quizás si, se acercó a la puerta, con una lágrima saliendo de su ojo izquierdo la empujó y salió corriendo, al parecer la última prueba sería en las afueras de la mansión pero dentro del gigantesco predio, tenían varios lugares para esconderse, incluyendo casas, árboles, y alguna que otra cosa, esa mansión se asemejaba a una mini ciudad.

—El siguiente es Kim Seokjin.

Jin suspiró temblando pero se mantuvo fuerte, apretó sus puños, dijo adiós a Namjoon y entró en la puerta. Vió una mesa con vidrieras, como si fuera una tienda llena de armas, iba a tocar los vidrios pero una nota cayó sobre estos.

Kim Seokjin. Cuerda.

Jin frunció el ceño y miró hacia las vidrieras, allí había enrollada una cuerda fuerte con espinas de hierro. Tragó en seco y abrió el vidrio sacando por fin la que sería su arma.

—Buena suerte, Seokjin. Tú sabrás como usarla. Sal por la puerta que dice "salida" corre lo más lejos que puedas y escóndete.

El chico respiró hondo y siguió las instrucciones.

—Kim Taehyung.

Taehyung no dejó ver ninguna expresión, ni siquiera parecía asustado. Caminó la distancia que lo separaba de la puerta y cuando la cerró lo primero que vió fué una mesa exhibidora con varias armas las cuales ya estaba planeando como usar. Una nota cayó desde el techo, Tae la tomó y miró hacia arriba, no sabía de donde podría haber caído pero ya que importaba.

Kim Taehyung. Cuchilla.

Tae sonrió y miró hacia la cuchilla de carnicero que se encontraba en el medio. Eso le serviría.

—Buena suerte, Taehyung. Un arma blanca es mala en ataques lejanos pero precisa cuando tú objetivo está cerca. Sal por la puerta que dice "salida" corre lejos y escóndete hasta que empiece el juego.

Taehyung hizo lo que el altavoz dictó y corrió lejos.

—Kim Namjoon.

Namjoon no se sentía muy seguro pero de todos modos entró en la puerta, esta vez la nota cayó antes de que él pudiera ver lo que había en la mesa.

Kim Namjoon. Veneno.

Frunció el ceño en confusión pero finalmente se dió cuenta a qué se refería, habían varios frascos oscuros detrás de una de las puertas de vidrio.

—Ten cuidado, Namjoon, debes pensar muy bien como usarlos, pon a prueba tu inteligencia. Buena suerte. Sal por la puerta que dice "salida" corre y escóndete hasta que empiece el juego.

Namjoon tomó los frasquitos, los guardó en sus bolsillos e hizo lo que el altavoz indicaba.

—Jung Hoseok.

Finalmente llegaba el turno del más asustadizo. Kookie y Yoongi le desearon suerte mientras el chico daba pasos temblorosos hacia la puerta. Entró y en ese preciso momento una nota cayó frente a él.

Jung Hoseok. Arco.

Hoseok miró en la mesa y pudo ver en una de las cabinas de vidrio más grandes un arco con varias flechas. Suspiró y abrió la puerta de cristal, retiró su arma y la colgó en su hombro junto con la pequeña mochila donde se encontraban las flechas.

—Buena suerte, Jung. Es una de las mejores armas, úsala con inteligencia, no habrán más flechas una vez que se te acaben, intenta recuperarlas. Sal por la puerta que dice "salida" corre lejos y escóndete hasta que él juego comience.

Hoseok suspiró liberando parte del miedo que sentía y se encaminó hacia la salida, corrió lo más lejos que pudo y se escondió detrás de un árbol.

—Min Yoongi.

El pálido chico asintió y miró al suelo, sus manos se encontraban en sus bolsillos. Entró a paso lento en la habitación, hechó un vistazo a la mesa con armas y luego tomó la nota que había caído frente a él.

Min Yoongi. Bombas.

Yoongi se sorprendió por lo que leyó, miró hacia la mesa y buscó las bombas. Eran pequeñas y al parecer se controlaban con control remoto, al lado de ellas había uno. Eran diez en total.

—Buena suerte, Yoongi. Tendrás que usar tu intelecto y una buena estrategia, solo hay diez, no las malgastes. Sal por la puerta que dice "Salida" corre y escóndete.

Yoongi hizo una mueca, guardó las bombas en sus bolsillo y metió el pequeño control en la cintura de su pantalón cubriéndolo con la camisa grande que llevaba puesta. Se encaminó hacia la puerta pero antes de salir miró hacia una de las cámaras que había en el lugar y le mostró su dedo medio.

—Ahora puedes pasar, Jeon Jungkook.— Kookie respiró profundo y entró en la habitación, miró a la mesa exhibidora dónde habían muchas armas, tocó uno de los vidrios y una puerta atrás de él se abrió dejando ver más armas detrás de sus respectivos cristales. Habían demasiadas. —Ya que llegaste primero eres el ganador de la ventaja. Escoge tu arma, pero hazlo con cuidado, de eso dependerá tu vida.

Jungkook no sabía qué hacer, se sentía indefenso, inútil. Recorrió con la mirada todas las armas disponibles y finalmente se decidió por una ametralladora con cartuchos de repuesto. La tomó y pretendió apuntar.

—¿Esa arma es tu decisión?— dijo la voz, Kookie asintió tragando el nudo que se había formado en su garganta. —Buena suerte, Jeon. Úsala con cuidado e inteligencia y puede que llegues a ganar el juego. Sal por la puerta que dice "salida" corre lo más lejos que puedas y cuando suene la alarma comenzará el juego.