❣ Parte Dos ❣

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Ocho meses transcurrieron y, como era de ya saber, KyungSoo se quedó con JongIn.

Nada malo ha sucedido en ese lapso de tiempo; de hecho, para asombro de ambos, se llevan demasiado bien. JongIn y KyungSoo debía admitir que fue una decisión muy apresurada pero esa estúpida idea se desvaneció completamente al tercer mes.

Ambos se complementaban, eran el uno para el otro, el dúo tétrico perfecto, la mano y guadaña de Saturno. JongIn amaba a KyungSoo, realmente lo hacía; le encantaba dejar marcar por su cuerpo para que cualquier otro individuo sepa de antemano que KyungSoo ya le pertenecía.

KyungSoo amaba la forma salvaje, posesiva y celosa que JongIn tomaba cuando el más bajo se veía rodeado de algunos tipos en el mismo antro, Luxxxury.

Pero lo que ambos más amaban de sus seres era la acaudalada sensación erótica que se provocaban al menor contacto. Los góticos no suelen encenderse tanto en un solo día, mas sin embargo, JongIn y KyungSoo eran capaces de tener sexo cinco veces al día y eran al mismo tiempo capaces de seguir por una ronda más.

Debemos saber que ninguno de los dos ha dejado de ser igual, dos seres brutales.


-Mi primo JongDae nos ha invitado a su fiesta de cumpleaños — JongIn tomó a KyungSoo por la cintura.

-Define "fiesta" — KyungSoo siguió leyendo la correspondencia.

-Gente bebiendo, bailando, Goth-Rock, quizás algo de cigarrillos y demás mierda.

-Mierda como la correspondencia que recibes — KyungSoo arrojó las cuentas de JongIn al suelo.

-¿Por qué tienes ese maldito humor que nada me gusta? — JongIn hundió su cabeza en el cuello de su peliazul.


El acercamiento erizó los vellos de KyungSoo ganándose también una leve erección; JongIn sí que era ardiente.


-No tengo nada — respondió firme — ¿A qué hora empieza?

-Nueve de la noche ¿quieres ir?

-¿Me preguntas si quiero? — KyungSoo burló — Creí que eras de la clase de tipos que simplemente ordena.

-Nena, nena, no te portes mal ahora ¿sí? porque... — su mano bajó hasta las firmes nalgas del peliazul — Tendré que cerrar tu boca con mi pene ahí dentro.


Los dedos de JongIn rozaban suavemente a través de los pantalones la entrada de KyungSoo; el afectado mordió sus labios, dos de los dedos del moreno viajaban osados por esa zona para luego ser su trasero palmeado suavemente con aquella gran mano.


-Jódete JongIn — KyungSoo dijo girándose.


Analizó el rostro de JongIn, lucía como uno de esos vampiros que aparecían en las ilustraciones de cómics que solía leer de adolescente. Aquellos crueles seres que destruían a su paso pero poseedores de una belleza sobrenatural.

 Su moreno era hermoso, todo un semental.


-Te llevaré a comprar ropa — JongIn masticó el cuello de KyungSoo tan rápido como pudo terminar la frase — Sé que haz estado con ese humor debido a ello, nena.

Luxxxury » [KAISOO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora