No se cuántos días he estado encerrada aquí pero me muero de hambre, de sed, y estoy cansada.
Cada día que pasa golpeó la puerta mientras grito a ver si alguien se comparece de mi pero aquí a todos no les importa yo, les importa una mierda lo que me pase.
A quien engaño nunca le he importado a nadie desde que murió mi madre, excepto por el señor Víctor, cuanto lo extraño, cuanto extraño mi departamento, mi cama, una ducha calientita, un baño, extraño todo eso, era feliz en ese corto tiempo.
Sin darme cuenta, nuevamente he comenzado a llorar aunque ya no salen como antes cada vez mis ojos se van quedando sin lágrimas.
Cuanto quisiera nunca haberte conocido, cuanto desearía no a ver sabido de su existencia.
Minutos después nuevamente escucho pasos pero ya no me tomó la molestia de pedir que me saquen, ya que no me hacen caso y nada más gasto mis fuerzas.
Los pasos cada vez los escucho más cerca asta que finalmente se detienen.
Escucho el sonido que emite la cerradura al colocar la llave lo que hace que me levanté rápidamente de mi lugar.
Veo como la puerta es abierta y me obligó a cerrar los ojos debido a la luz que entra desde afuera.
-Aquí tienes tu comida-. Me destapó los ojos y en el marco de la puerta se encuentra el mismo señor que vi en el local, el mismo que me trajo aquí.
-T..tu..tu eres el mismo que me trajo a este lugar-. Afirmó con rencor.
-Veo que no me has olvidado-. Responde con una sonrisa cínica en sus labios.
-Como iba a olvidar a la persona que me trajo a este maldito infierno-. Espetó alzando la voz.
-shhhh, tu te callas estúpida aquí nadie me levanta la voz-.
-Y tu quien eres para decirme que hacer, acaso eres mi dueño, no lo creo-.
Valla Emma, de donde sacaste el valor.
Veo como su mano se alza y no me da tiempo a retroceder cuando estampa su puño con demasiada fuerza en mi rostro.
-¡¡NADIE ME ALZA LA VOS MALDITA PERRA!!-. Grita mientras me toma del pelo. -ESCUCHAS TE-. Grita al no tener respuesta de mi parte.
-S..sii-. Mi voz sale en un jadeos al momento que me soltó.
-Ahora ya no eres tan valiente ¡verdad!-. Indica estrella do su puño nuevamente en mi rostro.
-v..vasta..p.por favor-. Sumplicaba ante el inmenso dolor que sentía en mi rostro.
-Así me gusta que me ruegen-.
Y dicho esto salió de la habitación dejándome nuevamente sola, cosa en este momento deseaba.Con un inmenso dolor tanto por dentro como por fuera me acerco al balde de agua y tomó un poco y limpio mi rostro, al ya sentirlo limpio por completo me paro y mi vista tomó con la chabola que esta puesta en la pequeña mesita, rápidamente me dirijo hacia ella y al ver la comida un sonido extraño se escapa de mi estómago, provocando que forme una pequeña sonrisa.
Al momento de tomar el plato con el emparedado un papel cae al suelo, con sorpresa lo tomó y lo miro con curiosidad y lo abro.
Emma mi niña..
No sabes como me duele saber que te tiene encerrada en ese horrible lugar, No te lo mereces, no entiendo que razones tubo para encerrarse en ese lugar pero la verdad no se me hace justo mi niña.
Intente hablar con el, convencerlo de que te sacará de ahí que ese no era lugar para tenerte, pero por más que insistía no hacepto, No entiende de razones, sólo me permito prepararte algo para que comas mi niña espero y sea de tu agrado y creme que seguiré insistiendo asta que te saque de ese horrible lugar.
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Una humana para el alpha. (Fanfic Derek Hale)
Science FictionNunca llegues a odiar algo con todo tu alma el karma nunca jugará a tu favor y te dará una bofetada con guante blanco y eso que alguna vez juraste odiar podrías amar con más fuerza de lo que algunas vez llegaste a odiar.