Capitulo 4.

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Podia sentir su respiración chocando sobre mis labios pero todo era tan lento, deseaba besarlo, queria besarlo ya, sus labios rozaron los mios listos para besarme... pero paso.

La puerta de entrada se abrio, dandonos un susto enorme que lo alejo hasta la otra punta del sillón, agitado totalmente y yo con unas severas ganas de asesinar a Abby que venia con su novio, por mi rostro ella vio lo que había interrumpido.

—¡Hola! —Dijo con cara de disculpa y se escondieron en la cocina dejándonos solos una vez mas.

—Entonces... —Lo mire con una mueca y el sonrio antes de acercarse a besar mi frente.

—Creo que simplemente hoy no era el día.

—Sabes tan bien como yo que deseabas ese beso—Le reproche sin miedo cuando sus ojos se abrieron de golpe para luego mirarme coquetamente.

— ¿Eso es lo que pienso?

—Exacto.

—Estamos en la misma pagina entonces preciosa —Dijo Aaron antes de acercar mi mentón a su rostro besándome.

No pude evitar no sonreir cuando sus labios me besaban lenta y suavemente como si supiera como debia hacerlo, coloco su mano detras de mi cabeza sujetandome y a la vez profundizando aquel beso erizando mi piel al rozar las yemas de sus dedos libres por mi cuello.

Al alejarse esos oscuros ojos me miraban fijamente demostrando a traves de ellos nada mas que ternura y una promesa oculta que no sabia revelar todavia, se acerco una vez mas para dejar un beso en mi frente haciendome sentir segura. Los nervios que sentia en mi estomago se habian disparado a niveles que jamas pense que Aaron me haria sentir algun dia o alguna vez en realidad, tenerlo aqui, asi como asi por una coincidencia, luego de todo lo que e pasado... el esta aqui sentado frente a mi tras besarnos y espero que compartiendo el mismo sentimiento de que esto no sera un simple y ordinario beso, sino que lo que acabamos de hacer fue abrirnos una nueva puerta en nuestras vidas, el acaba de abrir una nueva puerta luego de que cerrara la ultima con el nombre de "Zack" en el con miles de cerrojos y seguros por aquel daño que me hizo sufrir por el amor que le tenia, temia que un amor nuevo para mi jamas renaceria pero este hombre sin decir mas con esa mirada sabia que me pedia que cruzara aquella puerta con su nombre en el, que diera un paso, arriesgandome, arriesgando lo que era yo, mi mente y corazon por el, y no dude en ese segundo cuando volvi a inclinarme para besarlo una segunda vez dando aquel paso que sentia correcto y necesario en mi vida, una nueva oportunidad que esperaba no arrepentirme de haberla tomado aquel momento.

Ese beso fue un inicio para lo que seria nuestra historia, yo aun sentia aquel miedo sobre el amor ¿El haria lo mismo? ¿Me engañaria como el lo hizo? Estaba poniendo todo de mi otra vez.

—¿Que sucede? —Pregunto al ver mejor mi rostro.

—Nada yo... nada.

—¿No te gusto? —Hizo una mueca cuando bese su mejilla de sorpresa.

—Si no me hubiese gustado, no te habria besado una vez mas ¿No tengo razón?

—Bastante diria yo, creo que no te dije lo hermosa que estas hoy Bianca —Me sonroje ante su comentario tan directo– Gracias por no dejarme empapado.

—Ibas a agarrar un resfrio si no lo hacia.

—Y de paso tu tambien.

Seguimos hablando por un largo tiempo y de ves en cuando usaba sus labios para darme uno que otro beso erizando cada vez mas mi piel y bloqueando mis pensamientos sobre aquel hombre que ya ni podia recordar su nombre mientras sus labios acariciaban los mios.

Siempre fuimos uno. [SERIE: Zack]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora