Todo el camino a casa fue silencioso y un poco incomodo a la vez. Ni Kagami ni Kuroko sabían que decir, querían hablar pero sentían que solo lo arruinarían ya que los dos estaban muy impacientes, uno por contar todo y el otro por saber todo.
Cuando al fin llegaron a la casa de Kagami, el pelirojo se apresuró a salir del auto para ayudar al menor. Kuroko al ver a Kagami retrocedió un poco en el asiento, esto hizo que el mayor pusiera una cara que reflejaba tristeza, Kuroko al ver esto se dio cuenta de su acción y rápidamente se acercó a el.-Lo siento -dijo Kuroko apenado y sintiéndose mal-.
-No te preocupes, esta bien -decía Kagami mientras delicadamente acariciaba la cabeza del peliazul- Anda, ven -Kuroko no tuvo tiempo ni de reaccionar ya que el pelirojo lo agarró de la cintura y lo cargó como a un costal de papas-.Kagami pagó y empezó a caminar hacia el departamento con un Kuroko tan sonrojado que su cabeza hubiera podido explotar.
-Kagami kun, no es necesario que me cargues -esto lo dijo en un tono de voz casi inaudible- Por favor bájame -Kagami al escuchar esto ni se inmutó-.
-Estas loco, no te voy a bajar ¿Qué no ves como estás? -Kuroko vio como Kagami al decir esto frunció un poco las cejas así que ya no insistió con el tema, ni trato de bajarse-.Al abrir la puerta de su departamento tuvo un poco de problemas ya que no fue fácil sacar las llaves y al mismo mantener a Kuroko cargado. Cuando lo logró, llevó a Kuroko al sofá roja que estaba justo enfrente de la tele y por un mini instante todo se sintió natural. Desafortunadamente los dos sabían que todo acto tiene una consecuencia, y ellos dos habían perdido por completo toda la razón la otra noche al haber tenido sexo salvaje y después ocasionar un ataque de ansiedad en Kuroko.
-¿Quieres un vaso con agua? -preguntó tímidamente Kagami, Kuroko solo asintió-. Fue rápidamente por el y se lo entregó al menor con delicadeza por miedo a que esté fuera a reaccionar mal, otra vez, mientras se sentaba a su lado.
-Te traje en un vaso de plástico, no vaya a ser que lo rompas también -El pelirojo había tratado de alivianar el ambiente pero no había resultado, en realidad la había hecho aún más pesada. Kuroko al escuchar esto se encogió un poco, como si quisiera que se lo tragara la tierra-.
-Eh... Uhm... Aahm -Kuroko no sabía ni que decir. En el camino se había dado valor para contarle todo y explicarle pero unas simples palabras esfumaron toda su determinación-.
-Lo siento -al final fue Kagami quien habló- No debía haber hecho esa broma, fue de mal gusto-.Kuroko al escuchar esto se dio un poco de valor, un valor definitivo, así que empezó a hablar.
-Kagami kun -dijo temerosamente- Tu... Tu te mereces una explicación- al decir esto Kuroko volteó a ver fijamente al mayor con determinación, el mayor entendió y sonrío para darle a entender que fuera lo que fuera el siempre iba a estar con el-.~Flashback~
Todo empezó con la muerte de sus padres pero... Eso ustedes ya lo sabían. Kuroko se fue a vivir con su abuela pero eso es la parte feliz ya que antes de eso el peliazul estuvo de en familia en familia. Nadie lo quería ya que con las muertes de sus padre se había vuelto rebelde y sombrío, no obedecía en nada, se metía en problemas y solo estaba con gente problemática. Todo esto fue por tristeza y por un intento de no sentirla pero nadie se daba cuenta y solo lo catalogaban como un niño problema, sin querer ayudarlo o por lo menos escucharlo. No fue hasta que su abuela decidió adoptarlo, ella fue la primera que lo escucho y, por primera vez en mucho tiempo,lo abrazó con amor. Aquí fue cuando todo empezó a mejorar pero el pasado ahí estaba y nada lo podía deshacer.
En sus años rebeldes como ya hemos dicho, se juntaba con gente mala, en especial con un chico llamando Shogo Haizaki. El era el ser más despreciable que pudieras llegar a conocer. Kuroko lo conoció en el club de baloncesto, si como lo oyen, Haizaki podía ser todo lo malo y mucho más pero amaba el baloncesto, al igual que Kuroko. Al principio Kuroko solo le hablaba por cortesía y Haizaki lo ignoraba pero después de la muerte de sus padres empezó a tener cierto fanatismo por el, esto después se convirtió en cercanía.
Haizaki era muy agresivo en general así que tuvo problemas con todo el equipo y al final lo sacaron, esto lo enfureció pero aún así, sorprendentemente, lo aceptó.
Después de esto cada día empezaba una pelea por mero gusto, se decía que abusaba de las chicas, que era adicto a la cocaina y eso lo llevó al hospital por sobredosis. Con eso se volvió aún más peligroso, sentía que era un dios por el hecho de haber escapado de la muerte, se sentía invencible y con todo el poder del mundo para hacer lo que se le viniera en gana.Para cuando echaron a Haizaki del equipo Kuroko ya estaba mal, no soportaba estar ahí, sentía que nadie lo entendía aun cuando no fuera así ya que todos los de la generación de los milagros estaban preocupados por el pero el nunca los tomaba en cuenta, se sentía solo. Al final sucedió lo peor que pudo haber pasado, la generación de los milagros se deshizo y no porque el club se hubiera acabado, sino porque cada uno se sentía el mejor, tanto que dejaban de ir a los entrenamientos o ya no trabajaban en equipo y solo ellos querían tener el balón.
Este era el único soporte de Kuroko ya que lo usaba para olvidar y distraerse del dolor y la tristeza que le ocasionaba vivir sin sus padres. Se dio cuenta de que ya no tenía nada a lo cual aferrarse y empezó a caer.
Continuará...「¡Chicas!
He regresado (≧∇≦)
Después de tanto tiempo ;-; ¡Al fin!
De verdad que extrañaba escribir :v fue super genial
No pensé que algún día retomaría mis fics
¿Como andamos? ¿Qué tan muerto está este fandom?
Espero que no mucho, aún así aquí estoy JAJAJA
DENLE AMOR A ESTA HISTORIA
(Espero que alguien la lea)
Quien la lea, inmediatamente se gana... Uuuuuun aaaaauuutoooo :v
JAJAJAJA NO YA pero si amenla
Me despido y hasta la próxima 7u7r
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Lo que Kagami desea
FanfictionKuroko Tetsuya tiene un pasado que no lo deja seguir adelante y ser feliz con la persona que ama secretamente. En este pasado no hay cosas tristes solamente, también hay esperanza y alegría pero la felicidad que tiene es equivalente al sufrimiento p...