Cry Wolf [ChanLu]

Parte IV: Adios

Un alto hombre se paseaba por el bosque, la estación era fría cuál invierno, recordándo días pasados, caminó hasta la tumba de su difunta pareja, sus pies hundiéndose lentamente en la nieve el invierno había vuelto a llegar, su hijo cumpliría pronto un año más, mientras los ojos lloraban siendo el inicio de una despedida.  Llevaba un ramo de rosas rojas cual sangre, sangre de un adiós que el lloraba al recordarlo.

Nadie entendía el dolor de su pérdida, pero el tampoco había hablado para decirlo, después de todo era el alfa, el hombre fuerte de la casa y la manada. Chanyeol se sentó en la fría nieve importándole poco su salud cuando su temperatura siempre cálida se fue muy lejos congelando todo su ser, su nariz se puso roja y tuvo que cerrar los ojos para no llorar al recordar cómo Baekhyun mordía la punta de está entre juegos antes de besarlo. Joder, como hacía falta aquello en sus mañanas al despertar. Su corazón punzo de solo pensarlo.

— Hola mi amor —Las palabras dulces sonaron amargas con el dolor raspando su garganta cuando dejo las flores, pensando en todo lo que le tenía que contar como cada semana que lo visitaba — deberías ver a Chanbyul

Tan pronto como dijo aquellas palabras, el fuerte, el alfa, el temido Park Chanyeol se esfumaba dejándolo sensible y vulnerable como nadie lo veía, las lágrimas le bañaban el rostro mientras acariciaba las facciones impresas del rostro de la madre de su hijo plasmadas en una foto.Nunca se imagino perderlo y aún después del tiempo la herida seguía ahí.

—Cada día se parece más a ti, sus sonrisas. Tus mismos ojos, Baekhyunee...—mordió sus labios recordando la época de su infancia cuando le llamaba de esa forma melosa— Baekhyunee, me haces falta. Nos haces falta. Luhan ha hecho bien su trabajo, me dará pronto otro cachorro, pero Baekhyunee, tú risa no se escucha cada mañana en nuestro hogar, sé que darías todo por una tarde conocer a nuestro hijo y yo daría el resto de mis atardeceres solo por verlos jugar al llegar de arreglar la manada al menos una sola vez  ¡Baekhyunee! -Su voz se desgarro gritando su nombre al buscarlo. — Baekkie, No tenías que irte tan pronto ¿Cómo seré capaz de afrontar esto? Dime que todo estará bien aunque me mientas como la última vez que pudiste abrir tus labios al abandonarme, dime que no soy una basura por querer a Luhan un poco.

Los minutos pasaron llenando a Chanyeol de copos de nieve por todo el cuerpo mientras acariciaba los pocos recuerdos de su pareja. Nadie lo entendía. Solo el silencio sepulcral abrazo sus palabras que el viento quien amenazaba en llevarse los malos ratos cuando tenía problemas.

Nadie había entendido lo difícil que había sido quedar con un cachorro perdiendo al amor de tu vida, su lobo se había retorcido en dolor las primeras semanas, Byun Sama había tenido que cuidar de Chanbyul porque el tenía depresión y no era capaz de despegarse de la tumba de su pareja durante semanas. Siempre lo oculto frente a la manada, pero nadie sabía de las noches largas con pesadillas sobre su pareja desangrandose en la cama, nadie sabía de las largas veces que no dormía por llorar, por acariciar el lado ya vacío de su cama y la ropa que no volvería a ser usada por su dueño, se aferró a esas prendas hasta que el aroma huyó de la última, fue entonces que no quedaron más que fotos y recuerdos tratando de mantener a flote la vida de Chanyeol.

Que decir de Chanbyul que cada día se parecía más a Baekhyun, verlo era entre triste y alegre. Era lo único que Baekhyun le había dejado, un hijo de los dos que habían esperado con tanta felicidad y por otro lado el constante recuerdo de su pareja golpeando su mente sin descanso. Aún así había logrado crear de Chanbyul un niño feliz y amado que Baekhyun hubiera deseado fuera.

Sin embargo había llegado el...

Luhan.

Su mente al inicio se había confundido. Tenía el mismo aroma que Baekhyun, sin mencionar la estatura que apenas variaba unos pocos  centímetros y la complexión. Aún recuerda la primera vez que tuvieron relaciones sexuales, el cuerpo de Baekhyun se había dibujado en su mente a cada momento, su mismo aroma, incluso cambiaron los cabellos rubios de Luhan a los hermosos Castaños de Baekhyun.