✘My Teacher✘--Kookmin✘

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Los ojos de Jimin se abrieron de par en par ante la repentina gran sorpresa y no supo cómo corresponder porque de un momento a otro, entró en estado de shock. Sentía los suaves labios de Jungkook sobre los suyos, sentía a la perfección como los labios de su profesor se movían lentamente sobre los suyos y como el mayor lo sujetaba de la mejilla con delicadeza. Y todo parecía tan irreal que la idea plantándose en su cabeza de que eso solo podía ser obra de un sueño no era descartada. El mayor se separó de él y lo observó con una ceja levantada esperando por una respuesta pero el menor no podía con la repentina sorpresa.

— ¡Continua así Pequeño! —le dijo en forma de ánimo para después revolverle el cabello con una de sus manos.

Jimin se llevó las manos a sus labios y los acaricio con la punta de sus dedos, estaban hormigueando mientras su corazón latía descontrolado como loco y era tanto que podía hasta jurara que Jungkook lograba escucharlo. La corriente eléctrica que le recorría el cuerpo no ponía mejor el asunto, y los temblores en sus piernas solo lo hacían saber que no podía levantarse de la silla pues si lo hacía, caería al piso. Observó a Jeon intentando entender el asunto pero su profesor solo se limitaba a estar sentado a un lado de él y observarlo.

¿Qué acaba de suceder?

El chico no encontraba ninguna respuesta a esa pregunta. Todo había sucedido en cuestión de segundos, que él a penas y podía sentir los pies sobre la tierra. Eso debía ser obra de un sueño porque no solo Su amor platónico lo había besado, sino que también lo había alagado y había sonreído para él ¡¿Se estaba volviendo loco?! No entendía nada de lo que sucedía.

Parpadeó un par de veces y se pellizcó el hombro fuertemente, hizo un gesto de dolor y se quejó. No, no era un sueño, escuchó la suave risa de Jungkook después y sus sentidos se pusieron alerta para buscar aquel sonido, no entendía nada. ¡No entendía lo que sucedía!

—No es un sueño Jimin y no estas imaginando nada si es lo que piensas —El menor abrió sus ojos de par en par una vez más. ¿Acaso el podía leer su mente? —Tampoco puedo leer mentes —Jimin entre abrió su boca sorprendido y el mayor sonrió —Es fácil descifrarte Park —suspiró y estiró sus manos —pero si aún dudas de lo que sucedió —El profesor lo tomó de la nuca con una sonrisa torcida -Volveré a hacerlo hasta que lo creas.

Sin más palabras, volvió a juntar sus labios con los del menor una suave caricia. El menor no sentía los pies sobre la tierra de nuevo, sentía flotar entre las nubes y tocar el cielo con la punta de sus dedos y con temor llevó sus manos a la cintura de Jungkook temiendo que al tocarlo este se desvaneciera pero cuando lo tocó y supo que era real, cerró los ojos mientras sus torpes labios trataban de corresponder el beso para disfrutarlo.

El mayor hundió sus dedos en los cabellos de la nuca de Jimin y movió sus labios de una manera lenta, capturando los labios del anterior nombrado para saborearlos. Era más que obvio que el menor no sabía besar pero eso no le desagradó, al contrario, le gustaba y mucho, ser él quien le enseñara a besar. Pero de pronto gruñó cuando un pensamiento cruzo por su cabeza; quería mostrarle como besar, pero solo para que lo besara a él, la idea de Jimin con alguien más le hacía brotar la vena posesiva y lo único que provocaba eso en esos instantes era incrementar la intensidad del beso que torpemente el menor intentaba llevar.

Cuando el oxígeno le hizo falta al chico se alejó de Jungkook casi jadeante, con la respiración agitada, los ojos cerrados y una sonrisa amplia en el rostro. No entendía para nada al bipolar de su profesor de Historia pero sin duda lo que había sucedido hace unos instantes le había encantado. Mordió su labio inferior inconscientemente y de nuevo sintió el pulgar de Jeon acariciando su labio. Abrió los ojos y lo observó, esta vez el profesor tenía una expresión sería en su rostro.