¿Cómo Pasó?

Capítulo 3:Pensando En El

*NARRADOR: REBECCA*

Después de salir de la cafetería pensé que vería el rostro de aquel chico, pero al salir no logre reconocerlo, ahora que lo pienso no puedo recordar como es y ni siquiera se su nombre, grupo, no se absolutamente nada de el.

-¡Rebecca!, ¿Dónde has estado?, te hemos estado buscando desde hace rato.- Dijo Elizabeth llamando la atención de unos pocos.

-He tenido algo así como un problema de tráfico en la cafetería.

-Está bien, andando.- Dijo Lizzy (Elizabeth), mientras nos dirigimos al lado norte de la preparatoria.

Lizzy caminaba muy feliz moviendo sus manos de un lado al otro, me contó sobre lo divertida que es la clase de música.
Su emoción es tanta que creo que puede notarse a kilómetros de distancia.

-Creo que estoy exagerado.- Comentó desanimada luego de ver mi rostro.
-Claro que no, solo estas pensando en grande.- Respondí con una sonrisa en el rostro para animarla un poco.
-¿Cómo ha estado tu día?.- Preguntó cambiando de tema como era su costumbre.
-Aburrido.- Respondí con un suspiro.
-Me han contado que te vieron con un chico y que sus cuerpos estaban muy cerca el uno del otro.- Sonrió picaramente.

Sentí como la sangre subía hasta mis mejillas y se tornaban carmesí. -¿Quién te ha dicho eso?.- Pregunte nerviosa mientras sentía su mirada, esa mirada de sospecha que suele tener cada ves que creas que le oculto algo.
-¡Así que es cierto!.- Llamo la atención de pocas personas a nuestro alrededor.
-¿Qué es cierto?.- De la nada Anna apareció a mis espaldas.
-Han visto a Rebe con un chico.- Lo dijo sin siquiera pensarlo.
-Yo solo estaba ahí cuando el se acercó por detrás y. . .- Fui interrumpida por Anna.
-Espera, ¿por detrás?, entonces eso no fue solo una conversación, ¿cierto?.- Pregunto con una sonrisa picara.
-No se de que estas hablando, pero no seguiré con esta conversación.- Contesté apenada tratando de dejar el tema.

En ese momento la campana sonó y cada una nos despedimos para ir a clases.

Parece que el destino está de mi lado.

Al terminar el día, después de haber pasado la mañana en la preparatoria, por fin es la hora de marcharse a casa.
Me levante de mi asiento y comencé a guardar mis cosas para por fin retirarme.
Una vez fuera del aula, comencé a buscar a Anna y Elizabeth. Ninguna quedamos en la misma clase, así que debía encontrarlas para no volver sola a casa.
Busque durante cinco minutos que se hicieron diez, que a su vez se convirtieron en veinte, ya no es tiempo de seguir esperando así que me marcharé. -quizá salieron antes.- Pensé en silencio.
Tomé el autobús que me llevaría cerca de casa y a lo largo de unos minutos estaba en la parada de camiones cerca de casa.

Pase la tarde viendo televisión y escuchando música, también comencé a leer un libro que encontré en línea "Infernum". Al comenzar a leer me di cuenta de que es un libro en emisión y además en cada capítulo el autor deja una parte de su alma en cada una de las palabras que escribe; es verdaderamente apasionante leer su obra.

Después de leer un poco me di cuenta de que ya era tarde, al parecer pase toda la tarde en el ordenador y ni siquiera he empezado las tareas, después de pensármelo un poco comencé las tareas que al parecer no fueron nada complicadas.
Mire el reloj que llevo en la muñeca izquierda y al parecer ya son las 23:42.
Así que ya me iré a la cama, una ves estando en la cama recordé a ese chico, aquel que por así decirlo me ayudo a salir de la cafetería, comencé a imaginar que podría ser un chico amable, tal ves y podría ser un chico divertido.
También pensé un poco en la pobre de Anna, sus padres no llevan mucho de haberse separado, no se como se siente en estos momentos, pero seguramente debe sentirse terrible.