Hoy le dije a la tristeza que se fuera de mi casa
Ella me miro asustada y saltó por la ventana
Quiso volver pero se quedó con las ganas
Cambie las cerraduras de todas las puertas y ventanas de mi casa
Debía asegurarme que no volviera a entrar en aquel lugar, ese que un día pintó de gris sólo para hacerme molestar
Al despertarme mire por la ventana y la vi en el jardín escabuyendose entre las ramas
Pobre tristeza me dije para mis adentros, pero esto tiene que ser así ya que estuvimos juntas por mucho tiempo
Es hora de despedirnos y dejar entrar a un nuevo habitante, uno que no le guste tanto el gris y le guste más el amarillo radiante
Que me obligue a salir de la cama todas las mañanas, que no me haga sentir pesada todo el día y que no me haga bañar de lágrimas la almohada
Bienvenida sea la alegría en esta hermosa mañana, bienvenida en mi vida y en cada rincón de mi casa ...
