El idiota de mi NIÑERO

Cap. 3 Adiós Padres, hola Blake.

Dos horas antes

El día de hoy era Lunes, si, hoy se iban mis padres, y hoy llegaba Blake Steven.

Me levante a las 6:00am porque quería ayudarles a mis padres a que estuvieran listos. Ya saben, les ayudaba a ver si llevaban lo necesario, y a tranquilizarles los nervios del viaje.

También les hice el desayuno -nada muy elaborado, ya que comerían durante el vuelo- así que tuvimos tiempo de hablar un poco antes de su partida, me dieron algunas reglas:

-Me llamarían cada noche, y debo contestar todas sus llamadas.
-No faltaría a clases.
-Nada de fiestas en la casa.
-Tampoco invitaría a chicos a dormir. -Sí, incomodo-
-Causar los menores problemas posibles.

Veinte minutos antes

Faltaban solo veinte minutos para conocer a Blake -he decidido llamarlo por su nombre, ya que, llamarlo "niñero" es muy vergonzoso-
Ahí nos hallábamos mis padres y yo, me estaban contando de lo que se trataba el viaje, lo que harían y lo que esperan con ello.

La llegada de Blake Steven

Eran las ocho en punto de la mañana, y seguíamos en la sala.

En eso, tocan el timbre. Sabía lo que significaba. Había llegado Blake.

Mi madre se levanto rápidamente del sofá para ir a abrir la puerta. Cuando la abre, ahí estaba Blake, llevaba un par de maletas con el. Era alto, vestía jeans negros con una camisa del mismo color, su piel no era ni tan Morena, pero tampoco era pálido, tenía el cabello negro, un poco despeinado, y tenía puestos unos lentes, pero aun así podía ver sus ojos azules. Estaba aún mejor en persona.

-Hola Blake, pasa por favor.-Le dijo mi madre al verlo.

-Hola señora Smith.- Dijo obedeciendo a mamá y dejando las maletas a un lado de la puerta. Papá se acercó a él y lo saludo de mano.

-Blake, quiero presentarte a nuestra hija, Summer él es Blake.- Nos presentó mamá. Él se acercó a una distancia considerable y me saludo de mano.

-Hola Summer, yo soy Blake.- Me dijo regalándome una sonrisa de oreja a oreja, dejando a la vista su perfecta dentadura. Estrechamos la mano y yo seguía sin decir nada.

Mis padres le entregaron sus llaves, y hablaron a solas con el. Después volvieron a la sala.

-Es hora de que nos vayamos al aeropuerto.- Dijo mi padre.-Adiós hija, pórtate bien.-Me dijo con un abrazo y un beso en la frente.

-Nos vemos en seis meses, cariño.- Dijo mamá con un abrazo.- Te quiero, cuídate mucho.

-Nos la cuidas, Blake.- Le dijo mi padre a Blake, mientras cargaba las maletas.

-Lo haré, que tengan buen viaje.- Dice el con una sonrisa.

Y mis padres cruzaron la puerta, era un echo, no los vería hasta dentro de seis meses.

Nos quedamos en silencio por un par de segundos, hasta que Blake decidió hablar.

-Ya... ¿almorzaste? - pregunta. Asentí.

-Ok, ¿qué quieres hacer, ahora?

-Tengo que ir a la escuela, de echo.-Digo

-Puedo llevarte, si quieres.

-No es necesario, pero gracias.- respondí

El solo asintió.

Tome la mochila y salí de la casa. Iba en el auto, me estacioné en la escuela. Y empecé la jornada de clases.

Solo podía pensar en lo incómodo que me será tenerlo en la casa, cuando lo veo me quedo sin habla, y me pongo nerviosa. Y es solo el primer día.

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Aquí el tercer capítulo, espero les guste.