Casualidades del destino #X-MEN AWARDS

Capitulo catorce

 Transcurrieron un par de días para que Lord Lehnsherr se enterara del caballo extra en sus establos, y tenía razones suficientes. Aunque Lord Pietro continuaba mostrando una rápida mejoría y sus hermanas se mantenían ocupadas con los preparativos de la boda, la prometida del primero habia decidido marcharse sin dar tiempo a reparos, desmoronando el plan que el conde tenía para que su hijo sentara cabeza, lo que estaba claro, ni una prometida habia podido lograr. La muchacha le apartó aquel día en medio de la velada para informarle lo mucho que anhelaba ver a su hermana y madre tras la poca atención que Lord Pietro fijaba en ella sin importar los esfuerzos que volcara en hacerse notar. Consideró el conde que los mencionados esfuerzos no fueron los suficientes y con decirlo solo acrecentó las ganas de partir en Lady Crystal, acto en el que finalmente no se involucró. Estaba también la presión de la boda, la que Lady Lorna habia decidido mudar al Lehnsherr Hall faltando menos de mes y medio, a expensas de la aprobación de los marqueses de Summers y del mismo Lord Alex Summers, dejando importantes responsabilidades en sus poco confiables habilidades sociales, como preparar recibimiento y entretención para la completa cámara de lores. Y luego, sin dejar de ser preocupación importante, el hecho de que McCoy no hubiese encontrado registro alguno bajo el nombre de Sir Charles, dejándolo sin armas de defensa contra tan atrevido personaje. Siendo estos motivos que requerían de gran atención, no fue insultante para el coronel que tan solo una semana después y gracias a un brandy compartido en el despacho del conde, este presentara inquietud sobre el ser vivo que pensaba obsequiar a Lord Pietro.

-No dudo un instante de su buena intención coronel, pero no creo que otro caballo sea el presente adecuado para que mi hijo modere su cabalgar o sus comportamientos- exhalando el hedor de la pipa, miró el conde al coronel, sentados ambos frente a frente abusando del vicios de caballeros- apenas ha logrado dar algunos pasos, algo sin precedentes según comenta el médico, ¿Cómo cree usted que reaccionara al enterarse que ya tiene otro corcel?

-Siendo del todo honesto Lord Lehnsherr, creo que podría apaciguar medianamente el dolor que dejo en él la perdida de mercurio- intercaló Howlett un sorbo de licor con otro acercamiento a su pipa.

-Me gustaría que el dolor de mi hijo fuese por la pérdida de su prometida y no por la muerte de un reemplazable animal, el escándalo ya fue publicado en los periódicos locales y de nuevo Lehnsherr Hall parece ser el tema en boga de cada hogar en el condado... si tan solo no hubiese sido tan blanco con él. Todo el tiempo presioné a Lady Wanda para que fuese ejemplo de señorita y aunque su compromiso no se ha anunciado ya pronto se enteraran los inescrupulosos, con la menor no me preocupé y valla como me sorprendió la vida, pero con Pietro, jamás fui lo suficientemente duro con Pietro- balanceando el brandy en su copa mantenía el hablar a niveles bajos, habiendo bajado la mirada desde el coronel hasta los patrones del alfombrado- Le di la mejor educación, contraté para él a los mejores profesores, pero aun así...fallé.

El coronel dudo, con Lord Lehnsherr abriendo sus inseguridades a su escucha como solía hacer en juventud creía necesario dar consejo, pero desde el otro extremo de la situación y si no lograba elegir sus palabras con cuidado, podría pavimentarse el camino a la horca. No creía posible que el mundo viese a Lord Pietro de manera tan errada, y si bien rebelde, al final del día consideraba eso una virtud y no un defecto, no como la falta de afecto que desde la prematura adolescencia habia notado en los tres hijos de su amigo.

-No falló en absoluto, mi estimado, pues es su hijo ejemplo de quien dice lo que piensa, cualidad difícil de encontrar en la actualidad.

-Y ciertamente no bien vista en el círculo diplomático- rio con desgana el conde- mire coronel que no malinterpreto sus dichos puesto que le conozco lo suficiente, pero es Pietro heredero de todo mi patrimonio, no el honorable hijo de un Barón sin título. Siendo uno padre espera que sus hijos sepan tomar mejores decisiones, especialmente si hablamos de mi caso... y me temó que él no llegara lejos si continua actuando como la sombra de su progenitor- respiró, al notar que la bebida le estaba causando efecto sincerador y dejó en la mesa de centro la copa- no espero que lo entienda hasta que tenga hijos propios a quienes acomodar en la vida, y según veo al reabrir ese antiguo vejestorio al que llama casa, poco falta para eso. Ya le mencioné que puedo conseguirle un mejor lugar, aunque claro, primero necesita a la esposa.