Esto es ridículo, pero contagioso. Es fácil infectarse. Basta con mirar al cielo, oler la morfina, dulce heroína en mis venas. Eres mi heroína. Basta con ponerte los audífonos y tratar de atrapar esas notas que se escapan en voces desgarradoras y desanimadas guitarras, con sus majestuosas melodías, me hacen delirar. Basta con recordar, recordar el pasado, todas las promesas, todos los que se han ido, todas las decepciones, toda esa mierda. Basta con mirar a tu alrededor, y ver a las personas que amas a kilómetros de ti. Basta con eso. Ya fue suficiente. Sin embargo, sigo aquí.
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Sempiterno
PoetryCuando parece no haber escapatoria, cuando todo lo que ves es la tormenta, cuando tus pulmones se llenan de espesos fluidos; cuando tu razón se nubla y todo parece perdido, es cuando te percatas de que nunca pudiste escapar de ti mismo. Y estás, de...