Capitulo: 9

18 0 0
                                    

La musica en el antro retumbaba en mis timpanos, las luces neon, flouresentes y destellos calaban a mis ojos. Nunca antes había asistido a una fiesta así.
En cambio a todos los demás estaban ya bailando y bebiendo. Parecia una reunión de todos sus compañeros, puesto que en cuanto llegamos nos recibieron con gritos de alegria, alegria porque se unian unas cinco personas más a la borrachera y al desorden.

Me sentí algo mareada y me dirigí a la barra de bebidas, aferraba a mi pecho mi mochila, ya habia perdido de vista a los chicos...comencé a sentir algo de panico, todas las personas a mi alrededor estaban locas, bailaban todos juntando sus cuerpos, haciendo movimientos heroticos...queria salir de aqui y ya. Di un pasó en falso para dirigirme a la salida, pero una mano me sostuvo por la cintura, me exalte y volté rapidamente safandomé de quien fuera. Era el amigo de Raller.

-¿Te iras tan pronto?- dijo acercandosé más a mi. Tan pronto y ya estaba ebrio, lo detuve colocandó mi mano en su pecho, fue invitable sentir su musculos, no eran muy grandes pero podian sentirse.
Sacudí mi mano con gesto de verguenza, pero a el parecio no importarle.
Genial, ¿como pude dejarme mandar asi? Julie no debia tener ninguna autoridad sobre mi.
Podria ser verdad, el hecho de que fuera a decirle a Carl el que se hubieran fugado al antro...pero creo que fue mejor venir aqui, asi cuidaria de que no se pasaran de la raya, aun que hace momentos pensaba huir me hubiera sentido culpable, especialmente si llegaba a ocurrirles algo. Una cosa...¿ya eramos amigos?
-¡¿En verdad te llamas Lisa?!- alzó la voz el chico ara hacerse escuchar. Pero su voz se arrastraba.
-¡No, claro no, los demás me llaman asi por cariño, agarran demasiada confianza tan rapido! ¡Son iguales a ti!-.
-¡¿Y tu como te llamas?!- le pregunté.
-Yo soy...Will...William-se sacudió el cabello coqueteandome.
-¡¿Te sientes bien?!- parecia hido, coloqué mi mano en su frente para sentir su temperatura. Cuando él se inclino hacia mí, y me besó...

Me quedé helada, al ver en la posición en la que estabamos. Me besó la barbilla, puesto que dejo caer su cabeza en mi hombro.

Estuvo tan cerca pero menos mal que lo hizo así. Deje caer mi mochila para recargarlo en mi. Estaba ardiendo en temperatura y estaba risueño.
No tenia experiencia con los ebrios a mi cargo. Esto era una locura.
Nos dirigimis hacia la azotea con pasos titubeantes. El volumen de la musica bajo un poco más.

-¿Estaras bien aqui?- lo senté con dificultad en una banca. Podía yo tambien relajarme y respirar hondo.
Me dejé caer a su lado cansada, este chico si que pesaba demasiado. Apoyé mis manos sobre mis rodillas y pensé en llamar a los demás.
Fue poco tiempo el que estuvimos adentro, pero eso era un alivio para mi.
Me levanté  y caminé con pasó fuerte hacia las puertas y las cerré     bruscamente. Cansada de esa musica que no era nada de mi agrado, la musica casí dejo de escucharse, bufé de alivio pero ya estaba algo sudada.
Regresé hacia William quien estaba recobrando el sentido, agradecí al viento por ser en ese momento fresco y que lo regresara a su estado "casi" normal.
-Si me dices que has bebido, podre hacerte el favor de apartarte de esa bebida dolor de cabeza para ti y para mi- reí, nuevamente tomé asiento a su lado. Respiré hondo.
-En verdad yo si quiera se lo que me dieron a beber...pero bueno creo que el efecto pasó rapido- se incorporó apoyando sus codos sobre sus piernas, se sacudio el cabello y miró al cielo- aún veo algo borroso-Afirmo.
-Bueno...este lugar no esta mal, para la proxima entonces ya se a dondé traerte exactamente- me crucé de brazos.
-¿Y los demás?-preguntó dirigiendome una mirada de sugestión.
-Bueno...los perdí de vista, tu fuiste quien vino hacia mi y después...y después...-.
-¿Y después que?- preguntó arqueando la ceja.
-¡Mi bolso!- me levante de un brinco de la banca y corrí a toda velocidad hacia dentro-¡ahorita regreso!-.
Cuando entre esquive a las perdonas en zig-zag, casi tropezandome con su pies en movimientos cordinados.

Llegué a la barra de bebidas y busque dejado de ella, me arrastre por el suelo un par de centimetros para poder verla...pero en ese momento unos disparos sobresalieron de todo escandalo y todos gritaron.

Me levanté azarada y ví a tientas como unas personas vestidas completamente de negro se apoderaban de las personas de las mesas, de la pista de baile...de todos.

 

Killer HeartDonde viven las historias. Descúbrelo ahora