Te atreviste a enamorarme [Editando]

Nuestra noche

(intentó de Lemmon jaja)

Katsuki cerro con llave la puerta de su cuarto, no le gusta ser interrumpido.
Para cuándo se da cuenta Ochako se encontraba dando vueltas en el aire, mientras se tapa el rostro con las manos, su vergüenza era evidente. Bakugou la tomo del brazo y la bajo de sus fantasías delicadamente, Ochako aún no lo veía, así que él le quito las manos de la cara y para su sorpresa ella estaba más roja de lo creía, seguro que si la soltaba salía flotando del cuarto, intentó calmarla con besos cortos y dulces, su control sobre sí mismo desaparecía poco a poco, Ochako se suelta un poco, y rodea a su novio con sus brazos por el cuello poniéndose de puntitas nuevamente, sin cortar el beso Katsuki la levanta rápidamente y por acto reflejo Uraraka se aferra con las piernas a la cintura de Katsuki, (se sonrojo aún más por aquel acto) los besos dejan de ser inocentes mientras las lenguas de ambos bailan, Ochako es puesta con delicadeza en la mesa de estudio de Katsuki.
Cortando de forma lenta el beso Katsuki se separa un poco de Ochako y se la queda mirando embobado, Ochako al sentirse nerviosa por aquella atenta mirada toma a su pareja de las mejillas y exclama...

—te amo Katsuki -. en un susurro cerca del oído del más alto (a la mierda el ir lento y tranquilo).

Katsuki quita con mucha agilidad la poca ropa que Ochako trae, dejándola solo con la falda y su ropa interior, Ochako infla los cachetes y con vergüenza le quita la musculosa a Katsuki, sus manos no dejan de temblar, el tocar esa piel le da escalofríos, esos abdominales, el sudor que tiene en el cuerpo, y el saber que todo eso es suyo, la incitan a marcarlo, mientras él no se daba cuenta Ochako mordió fuertemente el hombro de Katsuki, dejando una marca bastante llamativa, como respuesta se escucho un pequeño quejido, está pensando que lo había lastimado abraza a Katsuki mientras besa su "herida" -lo siento, lo siento- repite entre besos.
Tenía que admitirlo, eso le había prendido más si eso era posible, amaba cuando era ella la que mandaba, (parece ser que es masoquista) tenía que tranquilizarse, estaba sudando mucho, y podía terminar lastimandola. Katsuki acariciaba su cintura mientras lamía su cuello, su lengua le quemaba a Ochako, y eso era raro pero exitante, ella solo podía suspirar cerca del oído de Katsuki mientras que con sus pequeñas manos rodeaba el cuello del rubio. Poco a poco sintió como su sosten era quitado y tirado al suelo, ella se tapó automáticamente los pechos, y dijo

—n-no son muy grandes - Su vos era dulce y melancólica, hasta sonaba triste por lo que Katsuki la tomo del rostro y beso su frente con dulzura

—eres perfecta ¿no sé porqué dices eso? - Demasiado tierno, Ochako se soltó y pidió

—podemos ir a tu cama ¿por favor? - Katsuki la levanto y la acostó en la cama colocándose sobre ella.
Los besos volvieron, fuertes y candentes, las manos de Katsuki recorrían todo el cuerpo de Ochako, apretando y palpando como quería, Ochako se había dejado dominar, solo podía gemir ante el toque de su pareja, Katsuki bajo lentamente, dejando marcas por donde pasaba, chupones y mordidas frescas que lo dejaban muy extasiado y orgulloso de si mismo, llego hasta sus pechos (seguía sin entender por qué dijo que eran pequeños) los mordió y succionó tanto como quiso, escuchar los gemidos sin pudor de su pareja le estaban diciendo que lo hacía de puta madre, bajo hasta su abdomen dejando un rastro de saliva en lo que él creía que era un lienzo, la falda de Ochako estaba de adorno pues no cubría nada, solo se sentó sobre sus piernas para quitarles las pantys a Uraraka, ella no se quejó, solo se tapaba el rostro con ambas manos, Katsuki la tomo de la cintura y la pocisiono pegada a su pelvis con las piernas ligeramente levantadas, mientras se acercaba a besarla nuevamente, Ochako ya completamente desnuda, pues la falda seguía sin cubrir nada le rogó a Katsuki que si lo iba a hacer que sea rápido (estaba muy exitada y exigente, nuestra Ochako) bajandose los pantalones, Katsuki se sentó de nuevo, llevándose a Uraraka con él, la puso sobre él, y antes de penetrarla, sabía que tenía que lubricarla, no dijo nada (en otros encuentros las palabras pervertidas de Katsuki, y las preguntas inecesarias, cortaban con el humor de Ochako, y todo se terminaba ahí, dejándolo con las ganas)  así que solo se calló, y metió un dedo lentamente dentro de Ochako, él sabía que dolía así que para distraerla la besaba de forma brusca y necesitada, metió un segundo dedo y no movió un músculo, Ochako dió un pequeño salto en sus piernas al sentir aquello, y eso lo susto un poco pero siguió con lo suyo, su interior estaba caliente, y apretado, (dios que ganas) su amigo palpitaba e incluso dolía, su novia era demaciado para él. Ochako comenzó a mover su cintura intentando hacer que los dedos lleguen más profundo.

—tranquila conejita. (mierda) se le había escapado, cuando pensó que ella se enojaría y se iría se desespero y la abrazo con algo de pánico en la mirada, no quería, no de nuevo.

—entonces haz algo, ya casi no los siento - ( oh Dios mío estoy en el cielo) saco los dedos de Ochako, sus fluidos lo conectaban con ella, y ante su mirada, Katsuki se lamió los dedos, ella avergonzada por tal acto, comenzó a despegarse de las piernas de Katsuki.

—¿a dónde crees que vas? Esto recién comienza - Acostó a Ochako nuevamente, ella parecía buscar  algo con la mirada, así que cuando la vio levantarse un poco, con ayuda de sus codos, para buscar dentro su mesita de luz él también lo recordó, la vio tomar un condón, mientras esperaba que lo abriera acaricio sus muslos y abdomen sin despegar su vista de los temblores que causaba en el cuerpo ajeno, una vez hecha la labor de abrir el paquete Uraraka se levanto nuevamente y decidió colocar ella el condón, dejando a un muy entusiasmado Bakugou mirarla sin descaro. Orgullosa de ella misma volvió a su posición anterior y le regalo una mirada cargada de deseo a su pareja que por la desesperación y la excitación la penetró de una estocada, ella sintió un dolor punzante, y le clavó las uñas a Katsuki en un intento de calmarse, Katsuki escucho el no muy sonoro quejido de su novia, ella estaba llorando, Katsuki la sostiene de la cintura con una mano, y la otra la apoya en la cabeza de Ochako, ella reprime grititos de dolor mordiéndose los labios, Katsuki al ver la escena tan exitante, (pues no todos los días tienes a tu novia abajo tuyo con los ojos llorosos sudada y completamente desnuda con unas marcas de chupones y mordidas, además de la elegancia de morderse los labios de manera sexy) Katsuki por instinto se comienza a mover lentamente, mirando fijamente a la persona a la que le está haciendo el amor, ella se aferra a la esculpida espalda de Katsuki, la mezcla de dolor y placer sube por todo su cuerpo, y se ve necesitada de besar a su pareja, él no se niega y un beso fogoso se hace presente, los movimientos de Katsuki eran rápidos, luego de un rato descubrió el punto dulce de Ochako, y eso hacía que las paredes de ella se cierren en su miembro, (eso era simplemente genial) luego de alrededor de una hora, donde no solo hubo penetración sino también algún que otro juego picante, ambos decidieron irse a dormir, pues en cierto momento se dieron cuenta de que no había mas condones, por lo que tuvieron que seguir con otras cosas igual de divertidas (para la próxima habría cajas de ellos) Ochako se corrió incontables veces, y ahora Katsuki dormía como un niño en los brazos y pechos de Uraraka, mientras ella recién podía concebir el sueño, estaba increíblemente cansada. En lo único que podía pensar era en esos intrigantes ojos fuego que no dejaron de mirarla en ningún momento, apagados en deseo, vivos por el hambre de tenerse.

¿Qué noche no?