38

427 32 30
                                    

Era el último día de grabación. Solo un poco más y podría volver a casa, a Nueva York, a estar con mi perro y mi gente. 

Al llegar al set el ambiente era muy diferente al que había habitualmente. Vi a Andrew al fondo hablando con John y en cuanto me vio vino a hablar conmigo.

—Hola preciosa, ¿estás bien?

—Hey. Si, estoy bien, es solo que no he dormido demasiado bien. Pero en cuanto vuelva a casa pienso dormir una semana entera. 

—¿Has... hablado con Norman?

—No tengo nada que hablar con él. Ya lo dejó todo claro ayer. Me mandó un mensaje anoche. Ya le dije que no podría hablar con él, que hay muchas cosas que hacer hoy como para perder en tiempo. Y quiero irme a casa. 

—¿No fue a verte?

—No. 

—Me dijo que se iba a Senoia. Pensé que iría a verte. 

—Pues no. Solo me llamó un par de veces y un par de mensajes. ¿No está aquí?

—No. 

En ese momento escuchamos su moto. En cuanto apareció se me encogió el corazón. Llevaba a Mery sentada detrás de él con mi casco. Cuando la vi bajar de la moto me quería morir. 

Me fui al trailer de maquillaje y me senté intentando controlar la respiración. La historia de mi vida se volvía a repetir al igual que con Colin. Otra vez prefería a otra en vez de a mi. La presión en mi pecho se hacía cada vez más presente. Me quería ir de allí cuanto antes. 

—¿Tess?

—¿Que coño haces aquí Reedus? 

—Oye, no es lo que parece ¿vale?

—No, claro, nunca es lo que parece. Me mandas mensajes diciéndome lo mucho que me quieres y hoy apareces con ella montada en tu moto. 

—Anoche fui a Senoia. 

—Lo sé, me lo ha dicho Andy.

—Después de mandarte los mensajes pensé que sería mejor ir a buscarte y arreglar esto. Cuando llegué te llamé un par de veces, pero no me cogiste el teléfono. 

—Me estaba dando una ducha. ¿Sabes lo que es eso, no? Pues la verdad que me hacía falta. Siento no haberte podido coger el teléfono. Además, yo no quería hablar contigo. No sé que coño hago aquí escuchándote. 

—Espera —me cogió del brazo cuando me disponía a salir por la puerta—. Me encontré a Mery por casualidad. Pero no he estado con ella como tú piensas. No podría estar con ella. Solo pienso en ti. 

—¿Y entonces que haces viniendo hoy con ella? 

—Me vio mal. Me ofreció dormir en su casa.

—Y quieres que me crea que no ha pasado nada entre vosotros, ¿no? Venga, no juegues más conmigo.

—No te voy a decir que no acepté su invitación. Pero he dormido en su sofá. Bueno, si se puede llamar dormir a pasarme toda la noche leyendo el mensaje que me mandaste. ¿Porque tanto odio?

—¿Y tienes la cara de preguntarme eso? Es igual Norman, en serio. Ves a que te maquillen. Yo haré lo propio por aquí, y acabemos pronto con todo esto. Quiero irme a casa. 

Salí de allí. De pronto me atacaba un hambre terrible y fui a donde montaban el catering cada mañana con el desayuno. Tuve la jodida suerte de coincidir con Mery y su amiga la panocha.

—Hola Tess. 

—¿Tú también vas a contarme una historia? Porque se os da muy bien todo esto. 

IN THE BACKSTAGE (Norman Reedus)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora