UN POCO JUNTOS

OLORES MEZCLADOS

CAPITULO CUARTO: OLORES MEZCLADOS

-¿Qué tal va tu día?- Kakashi de nuevo estaba en el consultorio de Sakura, había entrado por la ventana aprovechando que estaba sola.

-Ayer casi nos descubren, deberías ser mas precavido- la ninja terminaba de arreglar unos papeles.

-Ayer solo te estaba abrazando- y como ayer la abrazó por la espalda –Soy un sensei que le tiene cariño a su alumna- ella comenzó a reír.

-No tienes remedio- pero no parecía molesta con él. Echó la cabeza para atrás y se relajó.

-¿Sakura?- debía hablar con ella.

-¿Si?-

-¿Aun piensas en Sasuke?- ahí estaba, había dicho la pregunta que podría acabar con todo.

-Si- Kakashi tuvo que mantener la calma, apretó los puños fuertemente. Qué demonios estaba haciendo Sakura con él entonces, buscando un sustituto –Pero no ahora, no cuando estoy contigo o Naruto, hay días en que me olvido de él- esa respuesta no era tan mala, incluso era bueno, mas que buena.

-¿Sabes por que estoy contigo?- quería saber que pensaba ella sobre su cercanía.

-Te sientes solo- Sakura ni siquiera dudó –La Aldea es un desastre, tienes una gran presión, todos esperan que seas el Hokage, no hay muchas personas tan cercanas a ti. Soy una bocanada de aire para ti. Si Tsunade sama despierta y vuelve a tomar el control tu volverás a respirar sin mi ayuda-

-¿Quieres decir que solo te necesito por que Tsunade aun no despierta?- incluso para él esas palabras eran crueles. Pero algo dentro de él se preguntó si era verdad. ¿Se habría acercado a Sakura si Tsunade no hubiera caído en coma, si pain no hubiera atacado la Aldea, si no tuviera tanta presión sobre él? No le gustaba el rumbo de sus pensamientos y por suerte para él la puerta quería abrirse.

-Esta vez me he asegurado de poner seguro- Sakura parecía orgullosa de su precaución, no parecía afectada por lo que había pasado segundos antes. –Sera mejor que te vayas- él aun permanecía estático en el mismo sitio pero cuando logró reaccionar desapareció.

Caminaba sin rumbo fijo, Sakura tenia razón y le dolía admitirlo, si los últimos acontecimientos no hubieran sucedido ni siquiera se habría fijado en ella, pero de repente estaba aterrado de alejarse de su lado.

-Kakashi- Shikaku le llamaba y su corazón se oprimió, estaba muy confundido ahora y su destino le llamaba. Esperaba que le preguntara si estaba listo para ser Hokage. –Tsunade-sama ha despertado- No esperaba esa noticia, toda la carga que parecía estar cargando desapareció, suspiró de alivio pero sintió un gran vacio. Sakura.

-Parece que todo estará en orden pronto- no sabía como reaccionar. Estaba amargamente feliz.

-Shizune dice que podrá volver a su puesto Hokage en un par de días- La cabeza de Kakashi daba vueltas, se sentía aliviado y decepcionado, quería ser visto ante los ojos de Sakura como un héroe y ahora no pasaría eso, tampoco estarían juntos.

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Era ya de noche y aun en contra de sus instintos se presentó en el muro Hokage; estaba vacio, se sentía estúpido y furioso. En qué estaba pensando, Sakura había sido muy clara y él no se había opuesto, la había dejado hablar mientras guardaba silencio. Pero que esperaba qué pasara, que estuvieran juntos y que vivieran felices por siempre, absurdo, ridículo, si en la primera noche ella ya lo había abandonado. Todo volvería a la normalidad después unos días, la atracción que sentía desparecería junto a su necesidad por ella; volverían a ser sensei y alumna hablando de misiones y nada mas, Sakura le entregaría de nuevo todos sus pensamientos a Sasuke, nada había sucedido.