It's you [Hiro Hamada x OC] [Terminada]

"~Capítulo uno~"

- Entonces... -y dejé de prestar atención en ese momento. Mi vista se dirigió al pasillo fuera de la habitación. Un chico de cabello negro y grandes ojos marrones estaba pasando, limpió su frente con el dorso de su mano.

Qué lindo.

¡No, no, no! Tengo novio no puedo pensar en eso.

- ¡Oh, gracias Hiro! –gritó uno de los hombres, el pelinegro levantó su dedo pulgar y le sonreí, sus ojos se abrieron cómo platos y parpadeó varias veces, me extrañó ver cómo se alejaba corriendo.

- ¿Quién es? –pregunté, girándome hacia los dos hombres delante de mi madre, mi amiga y yo.

- Hiro Hamada. Nos ha ayudado a reparar una de las máquinas que echan confeti para tu concierto. –sonrió. – Deberías de agradecerle, tal vez aún no se ha ido.

Me levanté de un salto de mi asiento y corrí detrás de aquel lindo chico. Lo encontré de espaldas y a punto de abrir la puerta de principal para retirarse.

- ¡OYE! –grité, el chico se volteó alzando una ceja, al verme, sus ojos se volvieron a abrir pero pude ver un rastro de sonrisa en sus labios. ¿Por qué estoy mirando sus labios? – Soy... soy Isabella LeBlanc. –extendí mi mano. Él la tomó, su mano es cálida. – Quería darte las gracias, me han dicho que has arreglado una de las máquinas de confeti en mi concierto. –le sonreí.

- No fue nada, señorita. Y... mi nombre es Hiro Hamada. –me sonrió y yo solté su mano por mucho que no quisiera hacerlo.

- Esto... ¡nos vemos luego! –me despedí con una sonrisa, y comencé a correr de nuevo hacia la oficina.

- Gemma, ¡tú lo viste! Es lindo. –dije, quedándome boca abajo sobre la cama.

- Pero tienes a Tyson, no puedes. –bufé, si quería a mi novio pero Hiro me ha afectado de otra manera.

- ¡Gemma, Isabella! –gritó mi madre, entrando a la habitación. – Mañana comenzaran en la nueva escuela! –nos lanzó los uniformes que deberíamos usar. – Ahora váyanse a dormir niñatas.

Mi mejor amiga corrió hacia su habitación mientras yo me quitaba el sujetador para acostarme a dormir.

El despertador sonó y me desperté. Arrastrando los pies, me dirigí a mi baño y cepillé mis dientes, mi cabello y luego hice pipí.

Me coloqué el uniforme. Una falda a cuadros azules, corbata del mismo color. Medias azules al igual que la chaqueta encima de la corbata, lindo.

Bajé las escaleras al mismo tiempo que veía cómo Gemma trataba de hacerse una coleta mientras caminaba por el pasillo cómo un zombie. Reí.

- ¡Buenos días! –grité, mi madre se llevó una mano al pecho mientras me sonreía. Un tazón lleno de trozos de fresas, duraznos, melón y arándanos. Disfruté muchísimo el comer aquello, hasta comí dos tazones.

Steve, el chofer de mamá nos llevó hasta la nueva escuela a Gemma, Tyson y a mí. EL edificio parecía un Hogwarts en miniatura.

- Buena suerte, jóvenes. –habló Steve, todos nos despedimos de él antes de adentrarnos a la escuela.

Claramente mi novio y mi mejor amiga llamaron muchísimo la atención. Muchísimo, mientras caminábamos hasta la oficina del director para recoger nuestro horario y el número de nuestro casillero.

- Isabella, están mirándote mucho. –susurró Gemma en mi oído.

- Claro que no, tonta. –dije. – Te miran a ti.

Mi mejor amiga rodó los ojos mientras caminábamos a la primera clase, matemáticas. Nosotros tomamos asiento en los últimos pupitres, cómo siempre lo hacíamos.

- Buenos días, mi nombre es Claire Woolwoo. –habló una chica, su cabello era negro y sus ojos del mismo color. – La delegada de ésta clase, por lo tanto tengo el deber de darles la bienvenida y hacer que se sientan cómodos.

Los tres le agradecimos con una sonrisa. Ella se alejó a su puesto, el primero.

La puerta se abrió, y quién pasó por ella... fue Hiro. El shock en mi rostro era fácil de notar. Las risas de Gemma confirmaron mi teoría.

- Buenos días alumnos. –todos le contestaron un sonoro "Buenos días" y puedo jurar que había chicas suspirando. Claire estaba incluída. Y yo, también. – Hoy tenemos tres nuevos alumnos, háganme el favor de presentarse. – Cómo saben, yo soy un profesor suplente, estaré sólo por un tiempo pero es mi deber presentarlos.

Gemma, Tyson y yo nos levantamos de nuestros pupitres. Mi novio entrelazó su mano con la mía y sonrió ampliamente. Los tres nos colocamos delante de la pizarra. Los ojos de Hiro casi se salen de sus cuencas al verme. Sólo le sonreí.

- Pueden retirarse, alumnos. –habló Hiro, comencé a juntar mis cosas.

- Te esperaré en tu casillero. –habló Tyson, y luego mordió el lóbulo de mi oreja. Le pegué.

Antes de que pudiese salir del salón, Hiro me tomó de la muñeca.

- Amm... yo quería darte la bienvenida. –me sonrió, rascando su nuca.

- Pues... gracias. –yo también le sonreí, antes de correr hasta mi casillero.

- ¿Por qué te tardaste tanto? –habló Tyson, rodé los ojos.

- Si fueron diez segundos fue mucho, Ty. –dije, acomodando el libro de matemáticas dentro de mi nuevo casillero.

- Ese profesor me da mucha mala espina. –refunfuñó.

- Me cae bien. –dije, sonriendo.

Gemma me golpeó el brazo, y disimuladamente alzó y bajó sus cejas. Mi novio es un celoso y probablemente mataría a Hiro aunque fuese un profesor. Por cierto, no se ve de más de mi edad, ¿por qué es profesor a tan corta edad?

- ¡Ey! –gritaron varias chicas, acercándose a nosotras.

- Soy Allison. –dijo una rubia.

- Jenna. –se señaló la pelirroja.

- Stephanie. –otra rubia, pero ella era más natural que Allison.

- Somos del escuadrón de animadoras. –habló de nuevo la primera. – Sabemos que eres Isabella LeBlanc, la cantante y me encanta cómo haces tu trabajo. –me sonrió. – Soy tu fan número uno y me parece que eres sumamente sexy. –se mordió el labio.

A mi lado, Gemma ahogó una risa.

- Gracias. –le sonreí ampliamente. No era la primera vez que una chica me decía aquello.

- ¿Nos puedes dar un autógrafo? –hablaron las tres al mismo tiempo, extendiendo una hoja de papel y un sharpie negro. Al mismo tiempo. Asentí, antes de firmar cada una de las hojas. - ¡Muchas gracias, Isabella! –y se fueron corriendo.

- Ya le has caído bien a toda la escuela. –habló Gemma, mirando sus uñas perfectamente pintadas.

Típico de Isabella. –reí, caminando hasta laotra clase.