El Diario Escarlata

Capítulo 1

Érase una vez, una chica normal que festejaba su cumpleaños número 16. Ella era la mayor de la clase y solía usar faldas y suéteres de colores claros y clásicos. Le gustaba escuchar música pop, leer libros fantásticos y de ciencia ficción y era adicta a la series y películas.

Se queda corta esta descripción, pero esta chica, en apariencia normal y amorosa, desapareció en su propia sweet 16 y nadie la volvió a ver. Los padres estaban devastados, su reacción era comprensible ya que perdieron a su única hija, a su diamante, a su rayo de sol. Eric también lo estaba, era su amor verdadero aunque él no lo sabía en ese momento, eran muy jóvenes para entender el amor. Y yo en ese momento cambie, no era más rebelde y maduré por el bien de todos y para apoyar a Eric, sobre todo a Emma y a David, los padres de Mary, que eran lo único que me quedaba de mi mitad del alma.

Después de 5 años, los padres de Mary recibieron un correo que contenía un diario rojo particular, donde también había una nota que decía que lo lean porque ahí contaba todo lo que le pasó a su hermosa hija desde que desapareció. Entraron en shock y ni siquiera quisieron leerlo por temor a lo que pudiera decir. Decidieron dárselo a la mejor amiga de Mary, o sea, yo. Me lo entregaron y dijeron:

-Por favor Rosie averigua que le paso a nuestra querida niña, a nuestra Mary - y se fueron llorando.

Ellos saben que no soy más una niña de 15 años que escuchaba metal y leía cuentos macabros. Saben que he madurado, tengo 20 años y trabajo en mi propia biblioteca. De hecho, me entregaron el diario en mi trabajo.

Al instante fui a una mesa de lectura y empecé mi investigación. El diario comienza en su sweet 16. ¡Cómo recuerdo esa fiesta!, no solo por la desaparición de mi amiga sino también porque fue la mejor fiesta que asistí en toda mi vida hasta hoy en dia. Mary era de una familia adinerada y su propia fiesta fue en un dia de invierno en Maine, EE.UU. Me acomodé y abrí el diario y empecé a leer.

¨Al fin llego mi dia tan deseado. Llevo un vestido escarlata, con brillo en la parte del escote en forma de corazón, que lo compré porque me queda muy bien con mi piel oliva y con mi pelo negro, como carbón, recogido en un rodete trenzado. Me queda perfecto con mi silueta escuálida y aunque me digan que estoy demasiado flaca sé que es por celos.

Bajé al salón y todos me saludaron con cariño y me entregaban regalos, les agradecía y seguía caminando hasta que llegue con mi mejor amiga, Rosie. Ella es mi inspiracion. Con su rebeldía y ropas oscuras, no le preocupa lo que piensen de ella. Yo nunca podría ser así, libre y confiada pero lo voy a intentar.

Empezó a sonar la música clásica y de repente se puso musica metal. Me saqué mi vestido lujoso y deje al descubierto un vestido corto de cuero negro, el cual tenía debajo de mi vestimenta anterior, me solte el cabello y empecé a bailar con mi amiga de una forma que nunca lo haría, sacudiendo el pelo y la cintura. Al terminar, todos se quedaron estupefactos, incluso mi novio Eric.

Estamos juntos desde el comienzo de la secundaria. El es guapo, chistoso y divertido justo lo opuesto a mi. Me dirigí a él con una sonrisa.

-Hola ¿te gustó?

-¡Guau! Sí, eso fue de otro mundo ¿Estas segura que sos vos?- expresó Eric, sonriendo seductoramente. Me reí.

-Obviamente, ven acá- y lo bese con pasión.

Nuestra relación es una de las mejores cosas que me pasó en la vida, desde que entré a la escuela ¨Maine High School¨. Mi vida cambió para siempre. En el primer día conocí a mi Rosie, la mejor amiga que alguna vez podría desear.

Era un día soleado y yo estaba nerviosa por ser mi primer día, pero ella me apoyó y lo superé. A partir de ese momento nos volvimos amigas y hermanas del alma.

Después de tres semanas se me acercó Eric a mi locker y me dijo:

-Hola ¿sos la chica nueva no? ¿Mary?

-No tan nueva, pero si, soy Mary.

-¿Y como va? ¿te estás adaptando?

-Sí, todo gracias a Rosie.

-Ah sí, Rosie, tenés que admitir que es única.

-Sí, lo es ¿Y cómo te llamas?

-Eric.

-Hola Eric.

Después de esta conversación, me invitó a salir y nos pusimos de novios despues de 2 semanas. Peleamos, obviamente, pero las discusiones no superan el cariño que tenemos el uno por el otro.

Volviendo a mi fiesta, saqué una sonrisa y Eric me pregunto:

-¿En qué pensás?

-En el momento que te conocí a vos y a Rosie, ustedes son todo para mí ¿lo saben, no?

-Ustedes lo son para mí también.

Ella estuvo presente en nuestra relación desde el comienzo, en las malas y en las buenas y siempre nos aconsejaba.

-Bueno, ¿querés bailar?

-Si, vamos - agarré su mano y nos fuimos a la pista de baile.

De fondo sonaba la música lenta de un vals, lo bailamos juntos y fue hermoso. Al finalizar, le dije que me iba a retocar el maquillaje y me fui.¨

Paré de leer, todavía no estaba lista para saber lo que pasó. Guardé el diario y cerré la biblioteca. Me dirigí a mi casa y me fui a dormir directo, estaba agotada.

Al día siguiente, abrí la biblioteca, a las 9 AM, como siempre. Tengo una vida normal y corriente, como tuvo mi querida Mary. Pero a ella se le sentenció pasar de lo normal a lo trágico.

Me senté devuelta en la mesa de lectura, saqué el diario y me puse a leer por donde había quedado. Quité el señalador que use para marcar por donde iba, respire hondo y comencé a leer.