Química [Shawn Mendes]

Capítulo XI (Maratón 2/2)

El cumpleaños de la escuela era en octubre. Para festejarlo, todos los años, hacían una feria de ciencias. Como era el último año de secundaria, mi curso estaba encargado de la mayoría de las cosas. Decidimos hacer una Kermes vintage para recaudar dinero que cubriría los gastos de la promo.
-Ali acomoda los alfajores
-Voy Marcel
Todo el día con preparativos y cosas así.
La escuela tenía tres plantas, pero para la feria sólo habilitaron dos. La profesora de psicología nos asignó un aula en la tercera planta sólo a los que estaban encargados del los puestos 8, 13, 15 y 18; ya que eran los que más preparativos necesitaban. Teníamos acceso al aula Celia, Luana, Juana y yo. Nadie más. Solo nosotras.

Mi puesto era el número 18. El juego trataba de pegarle con dardos a globos.

Parece fácil la preparación, pero se necesitan muchos premios y globos inflados.

Exactamente
La feria comenzaba a las 11hs y terminaba a las 22hs. Nos dividimos los turnos para estar en el puesto, estar en el Candy Bar y descansar. Mi turno en el puesto eran 50 minutos, 10 minutos de descanso y 30 minutos en el Candy Bar.

Tengo que admitir que mi puesto era muy bonito. Los globos eran color pasteles, las maderas de mi puesto estaba delicadamente pintada de blanco y estaba muy en armonía con la temática vintage. Estaba orgullosa del trabajo que había hecho este año.

¿Y Shawn?

Es verdad, Shawn
Él estaba pasando por los puestos supervisando todo. Después de mi segundo trabajo en el Candy Bar, volví a mi puesto. Me agaché para buscar más cintas de color celeste para entregarles a los participantes y escucho una voz muy hermosa.
-Aska
-Peter Raúl
-¿Cómo estás?
-Bien, gracias por preguntar. ¿Y tú?
-Muy bien. ¿Dónde has estado?
-Aquí, ¿por?
-No te he visto mucho
-Trabajo, es solo el trabajo el que me quita el tiempo
Reí un poco y luego le pregunté a Shawn:
-¿Vas a jugar Profesor?
-Que graciosa que es mi alumna
Reímos. Le di los dardos para que pueda comenzar el juego.

Quiere jugar con vos no con los dardos

Déjate de joder
Le explique como jugar a Shawn y jugó correctamente. No ganó un premio pero jugó bastante bien. Luego lo llamaron de otro puesto para que los ayude con el toldo.
A las 17hs era mi descanso.
Fui a comer un Muffin de fresas al Candy Bar donde me encontré con mi profesor de matemáticas.
-Flynn
-Hola profe
-Está saliendo todo muy bonito, la felicito señorita
-Gracias profesor- Dije y mordí mi muffin.
-¿Ya sabe que va a estudiar Flynn?
-Sinceramente no profesor
-¿Y que pasó con su vida tan planeada?
-Sólo se desplaneo
Reímos por unos segundos.
-Profesor ¿quiere comer algo?, yo invito
-No Flynn, muchas gracias
-Por nada profesor
-Su amabilidad nunca se fue
-Al parecer no- Dije y di mi segundo mordisco a mi Muffin.

QUIEN SOS

Alaska Flynn

¿Dónde te vio lo d amable?

Donde a vos no

Graciosa

Besitos
-Profe, debo volver al puesto
-Un gusto verte Alaska
Saludé a mi profesor y volví al puesto.
Mi descanso coincidía con el de Juana, así que ella no se encontraba en su puesto. En mi descanso me cubría Adela, una compañera de mi curso.
-Ali
-Ade
-Faltan más globos y cintas amarillas, ¿Podes ir a buscar?
-Por supuesto
-Gracias
-Ade
-¿Si?
-¿Viste al profesor Mendes?
-No lo he visto por aquí
-Bueno, ahora vuelvo
-¿Paso algo?
-No, era una estupidez
-Okey
Mientras me dirigía al aula me encontré con la profesora de Física.
-Hola profe
-Ali, ¿Todo bien?
-Si, ¿y usted?
-Perfecto. Te felicito por tu trabajo
-Gracias. Por esas casualidades, ¿viste al profesor Mendes?
-Lo vi subir las escaleras hace unos cinco minutos
-Gracias profe
Salí literalmente corriendo a subir las escaleras. Antes de subir a la última planta, recordé que la profesora se psicología me dijo que suba con discreción para que nadie se de cuenta que alumnos subían a la tercera planta. Eso hice. Subí casi como si tuviera pies de algodón. Aproveché para tomar mi celular y ver mis notificaciones. Nada nuevo. Cuando llegué a la tercera planta, abrí el cerrojo de la puerta de la escalera con mucha delicadeza. Entre la escalera y las aulas había un pasillo. Seguí caminando muy suavemente. Cuando cruzo la puerta del aula me encontré con mi peor pesadilla. Parecía que era mentira pero no lo era. Nunca había pensado en que iba a ocurrir eso. Estaba Shawn, mi profesor de química, y Juana, mi mejor amiga, intercambiando saliva como cerdos.

Lloracion

Los vi y me quedé inmóvil. Shawn se dio cuenta de mi presencia y se separó de Juana.
-Alaska- Dijo e intentó detenerme, pero yo ya estaba bajando por las escaleras llorando sin gritos por fuera, pero desgarrandome por dentro.