Cambios en mi ánimo

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CAPÍTULO 6


MARATÓN 2/ 3.

Bien otro año pasó mi padre de nuevo excluido de casa y yo con mi rebelión interna en cuanto a lo que sentia todo era un desastre con veintiún años recién cumplidos, ya era verano y un día sucedió lo inesperado aquella chica Natalia se acerco a mi como asumí antes con la excusa que la ayudé en aprobar unas materias y para mi sorpresa era mi vecina de una calle y media de mi casa. Además la conocía cuando me vine a vivir a mi actual barrio dónde me mudé de niño/ niña hasta ese momento no tenia la mas minina idea de lo que iba a pasar después. Maldita sea mi suerte, mi vida y todo en ese momento no podía hablar con nadie de ello y eso comenzaba a destriurme internamente hasta que la señorita tuvo la gran idea de hacer mi vida mas miserable de ya era... En fin, acepte ayudarle, le enseñe las materias que supuestamente no sabía y para que para que no rinda, luego de unos meses me entere de que todo fue una mentira para acercarse y saber si sus supociones acerca de mi condición eran reales y mi madre se lo dijo con lujo de detalle no podía sentirme más como expresarlo... Acabado si eso es exactamente la palabra sin decir que mi mundo también se cayo cuándo mi hermano le develo el secreto a mi madre de quién me gustaba y mi sexualidad.

Ambas cosas comezaron a sumergirme en la oscuridad y en cierto tiempo antes de que mi madre le dijera a Natalia de mis sentimientos. Tuvimos un pequeño acercamiento de amistad, nos volvimos amig@s de cierta manera parecia que en ese momento todo estaba encausado en ella. Todo mi camino llegaba al suyo, no sé la razón y todavía no entiendo el porque.

Parece como si fuera un cuento de hadas, cuando te sientes hechizado y pierdes el control de todo y poco a poco comienzas a perderte a ti mismo y todo porque estas centrado ciegamente en una persona. Estaba ciego no veía lo que me decian, no me importaba su pasado ni lo que hubiese hecho solo me importaba ese presente que compartía con ella. Grave error, ya no comía solo dormía y se comenzaba a notar en mi apariencia estaba desgastado física como mentalmente. Había perdido demasiado peso y mi madre lo notaba pero le decia que era por el ejercicio y que no comía porque no tenia tiempo por el trabajo y también la disuadia por lo que pasaba en la casa.

Mi vida en palabrasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora