Los problemas aumentan

5 1 0
                                    

CAPÍTULO TRES


Seguimos en lo mismo en que me quede nuestras vidas se habían quedado estancadas. No así que unos meses después mi padre tuvo la fantástica idea de que nos mudaramos. No le bastaba lastimar, insultar y rebajar a mi madre y para el colmo de los colmos nos enteramos que teníamos otra hermana de la misma edad que Gabriel.


Les diré ahora porque odio a mi padre es un maldito, jamás fue responsable, nunca nos quiso solo queria vengarse de la primera pareja que tuvo mi madre y según él a los ocho años se enamoró de mi mamá ( ya ven porque amaba a mi maestra de jardín es de herencia )


Y fue así que se tomo el tiempo para hacerla que se interese en el y bueno ya saben lo que paso, se juntaron y nací yo algo menos que normal.


Tiempo después estábamos lejos de la ciudad, cambio de escuela y nueva casa ya con nueve años mis horizontes iban más allá estaba planeando mi vida cuándo estaba en cuarto grado de primaria, y aquí otra vez me gusto alguien y ese alguien era mi amiga la única que había conseguido luego del traslado lastima que dos años después dejo el mismo sitio dónde vivíamos Juárez Celman, buen nombre para un barrio no ?...


Ocho años después...


Cómo verán llegue a la adolescencia y fue un momento muy duro para mí sin darme cuenta hacía cosas inconscientemente.

Las peleas, discusiones e insultos aún continuaban y cada vez se hacian más enanervadas, mi hermano y yo no asistimos a la secundaria como todos los chicos normales. Y había un porque viviamos constantemente bajo amenazas cuando mi padre peleaba con mí madre, mas de una vez me interpuse entre ellos y estuve cinco años sin hablarlo. Podrán imaginarse cargar con todo ese peso de ser el mayor y querer tomar las riendas de mi família y sacarlos del infierno que se había convertido nuestra vida. Lo único que hacía con determinación para tratar se olvidarme de todo era el ejercicio, había establecido una rutina diaria desde los doce años muy rigurosa que mantenía al pie de la letra, no había un dia en que no lo hiciera, al menos me mantenía fuera de mi vida por unas horas, en esos cuatro años de ejercicio me fortaleci tanto física como emocionalmente. Debía darle mi apoyo a mi orgullo mi madre era todo lo que tenía y mi hermano que años mas tarde se convirtio en mi peor enemigo. Ese tema es para mas adelante.

En esas circunstancias cada vez que había discusiones me desquitaba golpeando el suelo la pared o me exigía tanto en el ejercicio hasta que mis músculos se desgarraban. Así era cada día de rutina, nunca me gusto que me vieran hacerlo y mucho menos cuando disfrutaba del canto. Sorpresa eso es algo que hasta ahora no había comentado, pues bien, me gustaba cantar y lo hacia bien desde que tenía ocho años era mi sueño poder cantar ser reconocido por lo que haría, pero era demasiado tímido como para enfrentarme y cantar en público, eso es algo que guardo para mí o mas bien guardaba.

Con dieciséis años mi vida era algo trágica, aunque por momentos tranquila, solo por momentos.


Y a pesar de todo que no iba a un establecimiento a estudiar lo hacía en casa, tenía buenas calificaciones en primaria, buena memoria más de lo podria pedir y a los catorce me hize de un curso de Dirección de empresas, a todos les llamaba la atención que estudiase eso y con mi edad. Era sorprendente para muchos, no es que alardee pero todo lo aquí escrito es la verdad, es lo que era, lo que soy y lo que seré si es que hay un futuro para mí.


Todo lo que me hacía felíz, el estudio que era los más preciado se evaporo de un dia para otro. La música, mis sueños todo se vio frustrado.


Se han puesto a pensar que cuándo tienen algo que los hace sentir importantes se va, desaparece, se sienten como vacíos, perdidos, no ?... Porque sino les ha pasado a mi sí, y con ese miedo se fue mi memoria, mi entusiasmo, mis ganas de seguir y todo por cumplir diecinueve años, el peor momento de mi vida.

---------------------------------------------------

Habrá maratón xd

Mi vida en palabrasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora