●diecinueve

780 142 31
                                    

-Te traje cuatro pantalones, cinco camisetas, ropa interior, una chaqueta; el invierno se acerca -advirtió el mayor-  también comida y cosas para el baño.










TaeYong dejaba las bolsas sobre la mesa, sacando más prendas y otros, para luego ordenarlas respectivamente.










-No era necesario, hyung.

-Ni iri nicisirii, hiing -remedo al pelinegro mientras reía- Si no lo haces tú, ¿quién?

-Entiendo.










Mark saco un paquete de papitas de una de las bolsas, la abrió y comenzó a comer las frituras.










-¿Cómo has estado?

-He estado peor.

-Mark -hablo en tono grave el de cabello nevado.

-Estoy bien, estoy bien.

-Eso es bueno.











TaeYong se sentó a su lado algo nervioso, Mark lo observaba entrecerrando los ojos.










-Habla, Tae -presionó a su mayor apuntándolo con una papita.









El contrario rodó los ojos.










-Tu amigo el otro día me llamó, preguntó por ti.

-¿Jaehyun?

-Sí, le dije que estabas bien y... -El mayor relamio su labio inferior, apretándolo suave entre sus dientes.

-¿Y?

-Me invito a salir.

-Fingió preocupación por mi para invitarte a salir, será idiota.

-No digas eso, él de verdad te quiere.

-Lo sé, pero pudo sólo invitarte y ya, es más que obvio que aceptarías.










El de ojos grandes asintió rendido.










-Me pone nervioso.

-Le gustas Tae, todo saldrá bien.










TaeYong sonrió resplandeciente, dejando salir un gran suspiro.










-¿Y tú has conocido a alguien? Ah, olvidalo, si nunca sales de casa que vas a conocer.

-De hecho, sí, conocí a alguien y es lo más bonito que tengo.












*Oh, aquí vamos, he dicho demasiado.

~sube al árbol. [marksung]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora