✧ ¹ ✧

1K 152 101
                                    

a sus 13 años de edad, soonyoung era un niño de mejillas grandes, con lentes grandes que resaltaban sus pequeños ojos, granos y puntos negros en su cara, pelo un tanto grasoso, y flacucho y débil. y por eso, era un punto de bullying fácil para muchos matones.

pero, soonyoung era el preferido de mingyu, un niño de la otra división un año más grande, que era el típico chico perfecto. era alto, atlético y simplemente era lindo, muy guapo. cautivaba a cualquiera. pero, era un matón, y vivía metiendose en problemas por armar peleas. 

mingyu odiaba al de ojos pequeños, por el simple hecho de que se sentía un inútil cuando lo veía. mingyu jamás aceptaría que le gustaba aquel niño del cual todos se burlaban, entonces simplemente se empezó a tirar hacia el lado de molestarlo, solo para ocultar que soonyoung era lo más tierno que sus ojos habían visto.

y el fue su primera víctima, con el, empezó a bullear, cosa que antes no hacía. en frente de todos, molestaba a soonyoung, humillandolo de las peores maneras posibles. y cuando lo encontraba solo, aprovechaba para golpearlo. y soon, al no saber defenderse, no podía hacer nada. volvía lleno de moretones y lastimaduras a su casa, recibiendo a su cariñosa mamá, a la cual debía mentirle sobre los golpes, diciendo que se caía mucho por su torpeza.

a mingyu le dolía tanto golpear el adorable rostro de soon, pero era golpearlo, o era ser un perdedor. y por eso odiaba a soonyoung, por complicarle la vida.

así soonyoung aguantó su primer año de secundaria, cuando llegó la noticia de que se mudaria al pueblo de su abuela, la mejor noticia del año.

y mingyu también se alegró, podría olvidarse de soon, y no tendría que ver más su rostro. así, soonyoung pasó 3 años de su vida allí, y mingyu pasó 3 siendo popular, tratándose de olvidar del recuerdo de soonyoung.

hasta que un día, su madre decidió volver.

la abuela de soonyoung falleció, cosa que le afectó demasiado a los dos. decidieron volver a seúl, y tratar de pasar una mejor vida.

volvieron unos meses antes de que el ciclo lectivo comenzará, y soonyoung temía que su madre lo mandara a la misma escuela que antes y siga sufriendo bullying. aunque había cambiado muchísimo.

soon ya no era el chico de espinillas y lentas grandes de antes, ahora la piel del chico parecía de porcelana, con un cuerpo lo suficientemente perfecto, que no estaba ni en lo gordo, ni en lo flaco, con unos labios de color rojizo, y unas mejillas abultadas que casi siempre estaban coloradas de un carmesí suave, haciéndolo ver adorable a los ojos de cualquiera. sus pelos, de aquel color azul marino, se mantenían ligeramente desordenados, dándole un toque despreocupado. y sus ojos pequeños, eran la cereza del pastel. sus ojos siempre llevaban ese brillo, que transmitía por alguna razón seguridad y confianza a quien los mirara, eran simplemente bellos. y soonyoung, a simple vista es una dulzura, al igual que su personalidad, que va perfecta con su apariencia.

cualquiera que lo mirara, caería a sus pies con tal imagen.

pero soonyoung seguía siendo inseguro, jamás se podrá olvidar de todos los golpes y humillaciones que recibió, estaban marcados de por vida, tanto física como psicológicamente.

y por eso, intento de convencer a su mamá cómo pudo con tontas excusas, ocultando lo que realmente le sucedía. cosa que falló, la mamá inscribió a soon en la misma escuela.

¿y si los golpes volvían? ¿y si seguía sufriendo? ahora sólo quedaba esperar, a que un mes pase, y que las clases comiencen.

see u (+) moshi ✧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora