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Mi primera reacción cuando vi a Courtis fue de temor, en el tiempo que teníamos de relación nunca había ni siquiera mirado de cerca a otro chico que no fuese él o mis hermanos, no era por miedo ni prohibiciones, sino porqué él era todo lo que quería y luego de la traición el más cercano a mi era Shase. Luego fue de sorpresa, no tenía ni idea de por qué había llegado a mi casa justo en éste momento.
«Concentrate» Me dije a mi misma, ya que acababa de ser besada por un chico que me espiaba y además me ocultó muchas cosas importantes.

—Yo, lo siento pero esto no debió suceder—Dije a Dominik y salí del auto antes de que respondiera.

—Courtis—Dije a él

—April, lamento mucho interrumpirte pero ya sé todo lo sucedido—Dijo desesperado

—Yo también se algunas cosas— Crucé los brazos ya que estabamos afuera y hacía frío.

— No pareces enojada como siempre que hablamos, yo sé que he hecho muchas estupideces desde que no estamos juntos, pero entiende que sólo quería llamar tu atención.—Se acercó a mi e intentó abrazarme pero di un paso hacia atrás y me aleje. En ese momento Dominik salió del auto.

—April, ¿estás bien?

Me gustaba la forma en la que me protegía, pero no era justo que después de haberme ocultado tantas cosas quiera protegerme de aquella persona que nunca me mintió.

—No te necesito aquí y sí, estoy bien. Ahora puedes irte.

Su rostro decayó en tristeza, y dudando se encaminó a su auto.

—Sólo Llámame, por favor.

Subió a su auto y se marchó.

—Mira, se qué Grace nos engañó a ambos y que estabas inconsciente y todo lo demás. Te debo una disculpa por no haberte creído o tan siquiera escuchado.

—No cariño, no tienes que disculparte todo pasó por culpa de ella y respecto a eso vine pero no sé si yo sea la persona indicada para decírtelo.

Entre tantas cosas que analizar, estaba el comportamiento de Grace, yo no dejaba de preguntarme que la llevó a hacer tantas cosas y porque ha pasado tanto tiempo.

—¿A qué te refieres?—Pregunté

—Entremos a tu casa por favor, tenemos muchas cosas que conversar, me he perdido sin ti, pero por fin para mí salió el sol y todo volverá a ser como antes.—Me extendió la mano pero él estaba equivocado negué con la cabeza y su rostro se llenó de preocupación.

—Ha pasado mucho tiempo Courtis, no puedes sólo pretender que todo volverá a ser como antes, lo siento pero no es así. Todavía no sabemos porque Grace hizo lo que hizo, y hasta que lo sepa no puedo estar tranquila, ella está mal.

—Tienes razón, soy un idiota, ni siquiera debería preguntarte quién es el chico que se acaba de ir y porque se estaban besando.

Todo estaba malditamente confuso en mi mente, y lo que menos quería hacer era dar explicaciones.

—Si, estás en lo cierto, no debes preguntar. La verdad es que estoy muy cansada si no te importa entraré a casa ya.

No pareció gustarle la idea pero no le quedó otra opción que despedirse.

—Entonces.. ¿Nos vemos mañana?

—Sí, podría ser.

—Vale, gracias y hasta mañana.

Caminó lentamente hasta su auto y yo me apresure a caminar hasta la casa, Dominik se había estacionado cerca pero aun así eran varios pasos.

Llegué y estaban todos, menos papá. Me sorprendí de no haberme dado cuenta de cuando llegó mamá y Ryan pero sospecho que ellos si notaron que yo estaba afuera en un auto con un chico, sentí vergüenza.

La hora grisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora