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-Hola Ma, ¿Te puedo hacer una pregunta? -Pregunto mientras que mi madre asiente- ¿Rugge puede quedarse por un tiempo en el cuarto de huéspedes?

-¿Qué sucedió?

-Es que tuvo una discusión con sus padres.

-Si ellos están de acuerdo por supuesto, se puede quedar -Mi madre acepta-.

-Si, si. ¡Gracias! -Respondo feliz-.

Le indicó el cuarto a Ruggero, y bajo a hablar con mi padre, que acepta después de rogarle.

Salgo del comedor con mi mama para ir al jardín, pero llego a escuchar la conversación de Ruggero con mi padre.

-Si le haces algo a Ro, la lastimas o cualquier cosa, eres hombre muerto ¿Entiendes? -Reclama mi padre-.

-No le haré nada, lo prometo.

-Eso espero.

Luego de eso Rugge viene al jardín con nosotras y nos ayudó con la jardinería.

-¿Mi padre te molesto? -Pregunto-.

-No, no. Solo estábamos hablando.

-¿Seguro?

-Si, si.

En la cena
-¿Y qué quieres estudiar Ruggero? -Pregunta mi madre-.

-Mis padres quieren que estudie arquitectura o abogacía, pero yo quiero seguir las bellas artes -Dice Ruggero-.

-¿Y tus notas son buenas? -Pregunta mi padre-.

-La verdad es que bajaron este último trimestre, tuve muchas discusiones con mis padres y me distraje mucho -Confiesa Ruggero con miedo-.

-¿Y te haz metido en problemas este último tiempo? -Retoma mi padre-.

-En uno que otro, pero no graves -Ruggero me mira al quererme reír-.

-Mi padre rueda los ojos- ¿Y qué haces en tu tiempo libre?

-Voy a clases de teatro.

-Y toca la guitarra, muy bien por cierto -Agrego para romper la tensión-.

Los últimos dos días mi padre ha estado preguntándole distintas cosas a Ruggero, únicamente para incomodarlo.
Estábamos almorzando cuando mi padre le murmura a mi madre que no cree que Ruggero sea el chico para mi.

-Creo que no es el chico adecuado para Ro -Le murmura mi padre a mi madre- No sabe ni que va a estudiar.

-Lo siento, pero creo que eso no es cierto -Contesta Rugge- Yo quiero seguir lo que me apasiona, quiero seguir creciendo con mi música y con la actuación.

-Si, pero lo que pienso es que no eres el chico para mi hija -Se enfada mi padre- Tienes malas notas, te metes en problemas, y seguro eres el 'Chico Malo' del salón para hacerte el canchero. La llevaras por mal camino y perjudicaras a mi hija.

-¡Papá!

-No, deja. No discutas con el por mi. -Agrega Ruggero- Yo no soy así. Soy bueno. Y no dejaré que ni yo ni nadie le haga daño a Rocío. Si es por mis notas, las subiré todas este trimestre y no, no soy un chico problemático, lo prometo.

-La casa de los Hamilton, va todas las semanas a ayudarlos en lo que pueda, el es el chico del que nos contaron la vez pasada -Agregó yo-.

-No hacía falta decirlo -Murmura Rugge-.

-Si, si hacía falta.

Desde ese momento las cosas con mi padre y Ruggero han estado mejor.
Ruggero volvió a su casa a la semana de haberse ido, logré que haga las paces con sus padres, espero que todo haya ido bien.

Quiero estar a tu lado (Ruggero) [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora