Cero Terroristas (Libro #3 SAGA Desastrosos)

Capitulo Dieciséis

Me quedo mirando a Liz mientras duerme y me parece una chica muy linda, es inteligente y tiene su propio hogar.
Pero debo admitir que ya me da algo de miedo comenzar una relación.

Extraño a Ana pero ella debe estar en un lugar mejor y quizás al igual que yo ya encontró a alguien que llene ese espacio.
Espero sea así.

— ¿Que miras tanto?— pregunta ella algo adormilada

— Eres muy guapa, me gusta mirarte

— A mi me gustas tu — se acomoda

Camino hasta la cama y me acuesto a su lado. Su mano acaricia mi rostro.

Con delicadeza coloco algunos mechones de cabello detrás de su oreja.
Dios me encanta.

— Tengo una idea — le susurró

— ¿Cual sería?

— Quedarnos toda la tarde en cama, sólo tu y yo— beso castamente sus labios

— Me parece una muy buena idea

Ella se sube encima mío y comenzamos a besarnos.

Creo que estoy decidido a arriesgarme y comenzar algo nuevo con Liz, ella es una buena chica y congeniamos bastante bien y no solo hablo del sexo.
En todo ámbito.

Un mes después...

Hago una fila que encuentro absurda y es absurda por que Josh me a mandado a hacerla.

Espero a que llegue con lo que le pedí y al avanzar empujó ligeramente a alguien, una chica.

— Demonios lo siento — me agachó y la levanto

Es una chica rubia de ojos verdes preciosos. Mierda creo que me enamoré.

— No importa — sonrie — fui algo torpe

— ¿Enserio no te a dolido?

— Tranquilo — me vuelve a sonreír

Mis manos sudan y mi pulso es acelerado.
La chica desconocida de aleja dejándome acá estático como una estatua.

Ella será mía.

22 de febrero 2018

Alec...

Entramos a mi departamento y llegamos algo mojados por la lluvia.

Dejó los pertenencias en la pequeña mesa que hay al entrar a mi departamento.

Emma pasa al baño ya que su ropa quedo mojada entera.
Camino hasta el calefactor y lo enciendo para que por lo menos no corra frío.

Enciendo la radio para escuchar que dicen y es lo mismo de antes y que estemos atentos que podría venir una tormenta.

Debo llamar a papa y mamá.

Busco mi celular y lo encuentro. Busco entre los contactos a mamá y la llamo.

— Alec, hijo

— Hola mamá, ¿Como están las cosas por ahí?

— Estamos bien, tu papa encendió la chimenea y tus primos están acá, deberías venir pero por tu propio bien no salgas de tu casa amor