Internado Cambiado /// Tom Holland

Parte 31: Un chico insistente.

-¿Quién es esta?-preguntó la acompañante que Sam había dejado caer hace alguno instantes.

-Ella es la chica más hermosa de este planeta-respondió Sam sin dejar de mirarme.

Yo me ruboricé por el cumplido. Al parecer Sam seguía igual.

-Dijiste que yo era la más hermosa-replicó enojada la chica.

-Corrección, dije "Eres muy linda". Charlie es la que me deja sin aliento.

La chica me miró furiosa y se fue dejándonos solos.

-Hola Anne-saludó Sam.

-Hola Sam-le dijo mi amiga- Hace tiempo que no te veía.

Sam la miró por un segundo y luego volvió a posar su mirada en mí.

-Bien, algo me dice que tengo que dejarlos solos-dicho y hecho. Anne me dejó sola con Sam. La muy hija de.... En realidad, la mamá de Anne era un encanto. Anne me las pagaría más tarde.

-Eee.....-empecé a decir- y, ¿Cómo estás?

Él sonrió y me dijo:

-Estoy bien Charlie, sé que no quieres que hablemos de ellos, pero... De verdad lo siento mucho.

-Ay, no. No de nuevo. De verdad Sam, ya te perdoné. Eso fue hace casi ya un año.

-Y aún sigo lamentando lo estúpido que fui.

Nos quedamos en silencio, hasta que el muchacho habló:

-Sigues igual de hermosa. No has cambiado en absoluto.

-Es porque la pubertad me odia y me pasó por alto.

El rio –También tu humor no ha cambiado.

-¿Cómo van las cosas en el colegio?-le pregunté tratando de cambiar de tema.

-Me expulsaron.

-¡¿Qué?! ¿Por qué?

-Había un chico que estaba golpeando a otro un año menor. ¿Te acuerdas de Nick?

Negué con la cabeza.

-Oh, no importa. Lo que pasó es Nick estaba golpeando a un chico más pequeño. Me metí en la pelea y mandé al idiota de Nick al hospital.

-¡Pero fue en defensa del otro chico!

-Eso dije yo, pero ya sabes, el director no me tiene mucho aprecio.

-Aunque podrías haber sido menos agresivo. ¿Qué vas a hacer ahora?-le pregunté.

-Mi madre me inscribió en otro colegio. La verdad es que era sorpresa.

-¿Qué cosa?

-Después de las fiestas iré a St. Britain College.

Me quedé en silencio, tratando de procesar lo que Sam había dicho.

-Eeeh, ¿Charlie? - dijo temeroso el chico- ¿Estás bien?

Miré a Sam y dije:

-Si, si. Solo es que la noticia me agarró por sorpresa.

Sam se rio. Justo en ese momento abrieron la puerta haciéndonos saltar del susto.

Era Anne, y traía una cara de mil metros.

-¡Sam!-exclamó. Podíamos sentir la desesperación en su voz- ¡Tu hermano se está peleando con no sé quien! ¡La pelea está muy violenta!

El chico se levantó de inmediato y salió pitando escaleras abajo. Me levanté rápidamente y tomé a Anne de la mano, tratando de calmarla.