Tengo algunas rosas ya coleccionadas, unas rojas otras blancas...
coloreadas al sin fin del cielo, y son para ti.
Mi vacío no se llena con la simplicidad de un pétalo, pero tengo un pedazo de ti, algo nuestro.
Nuestro como el agua, tan versátil como el fuego, y tan simple como el viento.
Tengo un corpiño mojado de lluvia.
mi alma hoy llora tu adiós.
tu sonrisa esta en mí y vive al recordar tus brazos.
Tus sábanas color fucsia.
Hoy mi más grande anhelo es poder emprender vuelo, para poder llegar hasta ti y susurrate una vez más, que todo en esta vida no es lo mismo sin ti.
Mi alma llora al verse desnuda, mi piel se seca por la falta de tu cura, mi cielo se nubló y hoy ya mi corazón murió.