Mi infierno. Tu cielo.

Capítulo 34.

DANIEL

Durante el viaje íbamos Gloria, Jesús y yo hablando, cantando, jugando a lo que se nos ocurría mientras Mary estaba dormida como un tronco, y la verdad es que se la ve tan linda...

-Ya hemos llegado chicos-Dijo mi padre aparcando.

Acaricio el hombro de Mary la susurré en el oído:

-Cosa fea, ya hemos llegado-La beso la mejilla y poco a poco va abriendo los ojos.

-Cosa fea serás tú eh-Esboza una sonrisa pícara

-¡Qué tonta!-La hago cosquillas y ella se empieza a reír y pega patadas al aire.

-¡Venga, dejar de hacer el tonto y coger vuestras maletas!-Grita mi madre desde la puerta.

Bajamos de la furgoneta y cogemos las maletas, entramos dentro de la casa mientras mi padre lleva la furgoneta a otro sitio para que las fans no se den mucha cuenta de que estamos aquí, porque si no tendríamos visita cada segundo.

-A ver, Gloria y Mary, vuestra habitación en la de arriba a la derecha, la que está alado de la de los gemelos, ahora os lo dirán ellos-Las dice mi Padre a las dos, pero al parecer estaban en su mundo, porque no se enteraron de nada.

-¿El qué?-Dice Gloria con cara de cuando te preguntan en clase y no sabes que decir.

-Que ahora os enseñamos donde está vuestra habitación-Dice Jesús riendo.

-¿Esta es la verdadera casa de los Oviedo Morilla?-Dice Mary mirando a todas partes.

-Claro, si no fuera nuestra casa no estaríamos aquí ahora mismo-Me río por la pregunta.

-Venga, llevar el equipaje a las habitaciones, nosotros vamos a enseñar a Eva y a Araceli la habitación suya-Nos dice mi madre.

Cogemos las maletas y subimos delante de las chicas, cuando llegamos a su habitación paramos frente a las puerta.

-Esta es chicas, si necesitáis algo estamos en la puerta de alado.-Digo yo guiñando un ojo a Mary.

-Que tonto eres tío-Se ríe mientras abre la puerta.

Entran y nosotros nos vamos a nuestra habitación, dejo la maleta en el suelo y me tiro en la cama.

-Hola cariño-Me abrazo a la almohada-Te he echado mucho de menos pequeña mía-Me río.

-Illo, ¿qué haces?-Me mira raro Jesús.

-Pues que  hacía muchísimo tiempo que no estaba en casa y menos en mi cama...-Suspiro-Todos los momentos aquí vividos-Me río.

-¿Vividos? Serán ¡Dormidos!-Se ríe también mi hermano.

Estábamos hablando y riendo hasta que escuchamos la puerta, alguien había llamado.

-Adelante-Contesta mi hermano.

Se abre poco a poco la puerta y aparece Mary, entra y cierra.

-¿Y Gloria?-Pregunto extrañado.

-En la habitación, colocando nose que... no me he enterado bien-Se ríe y nosotros sonreímos.

-¿Te ha gustado la habitación?-La miro.

-Sí, es bastante bonita y acogedora-Esboza una sonrisa de medio lado.

-Oye bro, ¿y si quedamos hoy con las demás?-Dice Jesús emocionado.

-Sí, no estaría mal, pero hace muchísimo que no quedamos con ellos, ni los vemos y de hablar ya ni te cuento-Suspiro un poco triste.

-¿Qué os pasó?-Miro a Dani.

-Pues desde que nos fuimos a vivir a Madrid... ya nada es igual, la verdad es que han cambiado mucho todos-Hace una pausa de varios segundos.-Hemos cambiado todo mucho.

-Además, hemos perdido la confianza en bastantes del grupo.-Nos miramos entre nosotros.

-¿Cómo en Marina Romero, Teresa Vega, Toño Guerrero, Ángela Buzón...?-Nos mira.

-Sí, y más gente con la qué estábamos antes de ser famosos-Responde Jesús serio.

-Lo siento mucho... Nose que decir, porque nunca he tenido amigos de verdad hasta ahora-Suspira.

-No te preocupes, la gente cambia-La cojo de la mano y tiro de ella hacia mí haciendo que se siente en mis piernas.

-Bueno yo me voy, os dejo solos un rato-Dice mi hermano saliendo de la habitación.