Un novio para mi mejor amiga

Un insecto en el paraíso

Llevo horas intentado que Holly se calme pero no resulta, admito que fue mi error por haberle regalado chocolate pero nada funciona en esta niña, definitivamente es el anti cristo y todavía me quedan dos días más con ella.
Saliendo del trabajo recibí una llamada urgente de Elliot, debía asistir a un viaje de negocios de tres días y no tenía quién cuidara a Holly así que Maggie al rescate. Tuve que pedirle a Terry días libres para cuidar a la pequeña, cosa que odié pero mi jefe aceptó amablemente. Así que en la mañana me traje a Holly a casa; estábamos viendo su película favorita El libro de la selva, antes veía únicamente la versión animada pero cuando la cinta pasó a ser actuada por personas la cambió de inmediato además le encanta la canción I wan'na be like you por lo que se encargó de aprendérsela al pie de la letra, también creamos una coreografía así que cuando la canción se escuchaba empezábamos nuestros movimientos; estábamos bailando cuando conejo llegó con las compras no le extrañó que estuviéramos de esta manera puesto que era la sexta vez que veíamos el film, mientras Holly seguía en lo suyo me acerqué a Paul y me dio un rápido beso.
- Si me dieran un dólar por cada vez que llego al living y esa película está puesta, sería millonario
- Y te advierto que todavía faltan más
- entonces billonario - mientras charlamos no notamos que Holly se escabulló de la sala y subió a un banco para inspeccionar las bolsas
- ¿Qué son codones? - en ese momento Paul y yo recreamos el color rojo.
Una semana atrás
- debemos de tomar precauciones - Conejo acariciaba mi cabello mientras yo estaba frente al él, ambos acostados en la cama - sé que tú tomas pastillas pero yo también tengo que poner de mi parte
- Sí, no quiero un incidente, suficiente con que tenga que cuidar a Holly
- compraré preservativos - en ese momento me senté en la cama, analizando las cosas
- No quiero que creas que pasará todos los días apenas si puedo asimilar todo esto
- Claro que no mi ángel, sólo quiero prevenir

- Y ya deja de llamarme ángel

- Algún día lo entenderás

...
La niña no dejaba de preguntar así que tuve que chantajearla dándole un chocolate con tal de que no le hiciera preguntas a mi hermano, decisión de la cual me arrepiento
- Holly te lo suplico ¡deja de moverte!
- Pero tía Gaggie esto es divertido - se mantuvo así hasta que se agotó y tomó su siesta, Paul se dedicó a pintar cuadros para su exposición que los estirados han estado posponiendo, yo me dediqué ha a colocar las fotos que recién había revelado del día con Holly.

Para la noche preparé macarrones con queso para todos, Holly se quedó dormida de nuevo

- ¿Quieres dormir conmigo?
- Paul tú mismo dijiste que en frente de Holly...
- No de esa manera
- No creo que sea buena idea, extrañita ha tenido pesadillas y va a querer dormir conmigo - Esa noche ambos tuvimos insomnio por lo que nos quedamos en el living viendo breaking bad, no niego que hubieron besos subidos de tono, mientras la no muy sana Margaret intentaba quitarle el pantalón a conejo Holly se asomó y nos separamos de inmediato
- Tía Gaggie no puedo domir - me dirigí al cuarto de la niña para que descansara.
A la mañana siguiente me levanté temprano para correr junto a Travis, al llegar preparé café, Holly comía de su cereal favorito mientras movía su cabecita de un lado a otro
-Buenos días monstruito... Margaret - después de lo que ha pasado con los preservativos y la escena de ayer, sí que tendremos que ser precavidos
- ¿dormiste bien cielo?
- sí tía Gaggie - Paul y yo hablamos de cosas más serias como el aseo de hoy de la casa, por suerte no tengo que limpiar los retretes
- Holly ¿recuerdas la cajita que encontraste ayer?
- No te asustes, no le diré a papi - por suerte la pequeña accedió a ser mi cómplice, bendito seas chocolate
- Tampoco le diré acerca de ti y conejito - Casi me ahogo con mi café y Conejo dejó caer su tostada
- Ho... Holly, l-lo que viste ayer fue...
- No pasa nada conejito, me gusta que hagas a tía mofita reír - ambos nos miramos y nos dimos cuenta que teníamos a una verdadera cómplice de nuestro lado - sólo díganme con el meñique que tía mofita tendrá un primito para que yo juege
- No sé acerca de eso monstruito, pero lo que sé es que ya no es mofita, ahora es un ángel.
Después del aseo tenía planeado seguir practicando mi español pero una llamada frenética de Sarah hizo que cambiara de planes
-¡AYUDA! - Mañana será su cita con come galletas y realmente estaba nerviosa, me pidió que le ayudara con la vestimenta, como si yo fuera de gran ayuda para escoger un atuendo, aunque lo fui más que Angélica ya que habíamos decidido hacer una selección entre una escala del uno al diez, Angélica estaba harta que decía diez a todo con tal de que mi amiga no se probara más prendas. Luego acudió sólo a mí pero yo estaba cansada de tantas mudadas seguí el mismo acto de mi amiga coreana
- Las dos son de gran ayuda
- Lo siento Sarah, sabes que la mayoría de las veces visto casual, incluso para el trabajo
- Eso es porque ni siquiera el mismo Terry tiene código de vestimenta
- ¡Oigan! Todavía necesito ayuda - me reí porque Sarah siempre ha sido una mujer segura se sí misma pero ahora se le ve muy nerviosa, no entiendo, sólo va a salir con Joey, gran cosa
- Si nos dijeras a donde vas, Mags y yo podríamos ser de más ayuda
- dijo que me llevaría a Mulholland drive
- espera ¿¡Y planeabas llevar vestido!? - puede que sea londinense pero definitivamente conozco mejor los Ángeles de lo que pensaba
- Sarah... ¡Son senderos! - Por fin escogió algo de su agrado, me quedé a cenar con ellas, Sarah cocina un buen guisado y no pude negarme, mientras preparaba la mesa llamé a casa para asegurarme de que aquellos dos no incendiaran la casa
- Tranquila Margaret, Holly y yo estamos en la sala de partos divirtiéndonos con la pintura- a lo lejos escuché la voz de mi sobrina saludándome
- Asegúrate de que coma algo sano antes de dormir, Elliot le tiene una dieta estricta y me mataría si se entera que le di chocolate y macarrones con queso
- Relájate mi ángel, cena con las chicas
- adiós conejo - Las chicas me observaron extrañadas, pero que yo recuerde no dije nada que acerca de nosotros
- ¿Qué fue ese tono?
- ¿Cuál tono?
- Ese, con el que le hablaste a Paul
- Es mi tono de siempre - ahí está de nuevo esa cara de duda, de acuerdo, ahora si sucede algo pero todavía no estoy lista para decirles, además... No nos vamos a casar apenas si llevamos algunas semanas y todavía no me acostumbro. Para la buena fortuna en la cena no se tocó el tema de la boda ficticia, pero lo que pasó no fue mejor
- Mags me debes una explicación
- ¿debería?
- Muy graciosa, como sea, ayer mientras hacía el turno de la noche en emergencias, un enfermero llegó con esta revista Cosmopolitan ¡saliste en ella! - de su bolso tomó la revista y se la arrebate de las manos, efectivamente allí estaba yo, tomándole fotos a la chica que simulaba el río, más al frente se veía Terry capturando a Morgan Freeman y atrás lograron mostrar a Leto quién me había fotografiado con su teléfono
- Lee la nota - decía mas o menos así: En un festival de agentes de cambio para la conservación del medio ambiente, la población de Los Ángeles se mostró solidaria he interesada, famosos como Morgan freeman, Clint Eastwood entre otros (esperen ¿Clint Eastwood estaba y no lo fotografié?) apoyaron la causa, sin embargo eso no es todo, el excéntrico y reconocido fotógrafo Terry Richardson captó imágenes controversiales acerca de lo afectada que se muestra la ciudad debido al cambio climático y cómo debemos actuar para mejorarlo, en la imagen se le observa fotografiando al actor Morgan Freeman con una mujer pintada de árbol con sangre para mostrar un fuerte mensaje hacia los ciudadanos y aquellos que desmienten al calentamiento global. La nota me pareció interesante, incluso me sorprendió tratándose de Cosmopolitan
- Genial pero no entiendo que...
- Ve la otra página - la volteé y el título decía ¿Leto con nuevos amores?
El cantante y ganador del óscar Jared Leto asistió al evento de conservación ambiental para mostrar su apoyo he interés, sin embargo nuestros fotógrafos captaron otro tipo de interés en el actor. Varias fuentes afirman que le vieron muy animado platicando con una mujer rubia que rondaba los veinte, se les veía reír he incluso Leto fotografió a la chica en cuestión. Nuestros corresponsales confirmaron que la mujer trabaja con Terry Richardson; sin duda el señor Leto está interesado en bomboncitos nuevo modelo.
Esto todo, estoy inmortalizada y para mi mala suerte me captaron con señor estrella de rock cuando se despidió de mí con un guiño además me llamaron bomboncito nuevo modelo, genial simplemente genial ¿Acaso soy un maldito auto? Claramente ambas esperaban una respuesta pero no sabía que decir
- ¿¡Cuándo planeabas decirlo!?
- ¡No es cierto!
- ¿No lo és? Entonces aclarame esto ¿Cómo es que sales en esta foto con Jared cerrandote un ojo?
- ¡Siempre es así! No significa que... ¡No es cierto! - las dos no sabían si creerme o no, cuando digo la verdad no vacilo con mis palabras pero hoy casualmente no puedo ni decir hola
- Escuchen, si realmente eso fuera verdad ¿No creen que serían las primeras en saberlo? - de hecho el primero sería Paul, pero ustedes entienden la idea. Por mis ojos notaron que no metían
- La verdad no es para tanto - me tranquilizó Sarah
- además, nadie lee esa revista.
Terminamos la cena y mientras limpiabamos el desastre Angélica encendió la televisión, el canal E! Se encargó de repetir la noticia del Cosmopolitan sólo que le agregaron más detalles y fotografías ¡Hasta mintieron diciendo que ya había cenado con él! Bueno, no todos leen la revista, pero todo el mundo ve la televisión.
Elliot se llevó a Holly en la mañana y yo fui con un saco de nervios al trabajo, cuando bajé del taxi un sin fin de paparazzis estaban el la entrada del estudio de Terry, uno volteó a ver y gritó "¡AHÍ ESTÁ LA CHICA LETO! " todos se vinieron como avalancha sobre mí, intetaba caminar pero realmente era difícil; estaba acostumbrada al flash pero no a las Preguntas incómodas
- ¿Cómo te llamas?
- ¿Es cierto que eres el nuevo bomboncito de Leto?
- ¿Te acuestas con él por dinero?
- ¿Es cierto que estás embarazada del cantante? - espero nunca tener que recurrir a ese medio de fotografía, que digo, eso no está ni cerca de serlo; ignore sus estupideces y de milagro entré al estudio cuando las puertas del ascensor se abrieron un Terry preocupado estaba en la puerta
- Supongo que leíste el Cosmopolitan
- ¿Te hicieron algo?
- sólo me preguntaban cosas realmente incómodas - mi jefe se quitó sus enormes gafas y se frotó el rostro
- Edita las fotografías de Whoppi Goldberg, hoy no vas a salir a recorrer los Ángeles - ambos sabíamos que esa era la mejor opción para todos, el mar de luces se hizo más intenso, el ascensor volvió a abrirse y señor estrella de rock apareció
- Claro ¿por qué no hacer el rumor más grande? - si estaba molesta él lo estaba el doble, después de todo él es el famoso
- Enojate con ellos, no conmigo Margaret ¿¡Por qué no traes a tu noviecito y lo besas en frente de todos ellos para que esta mierda termine!?
- ¿¡Por qué no mejor TU escoges a una modelito y de la llevas a un maldito hotel!? - se acabó señor simpático
-¡Todo es tu culpa! Tú y tu estúpido secreto
-¡Tu fuiste el que me fotografió con su propio teléfono con tus mierdas de Margaret eres hermosa!
- ¡Suficiente los dos! Nos es culpa de ninguno, así que no peleen porque eso es sólo complacer a los imbéciles - Terry intentó calmarnos, el ambiente ya estaba tenso y una pelea no lo haría mejorar pero no iba a permitir que este me dijera algo que no me agradara
- Sé que los dos se llevan bien, no dejen que esto lo cambie - Terry cerró las ventanas para que nadie espiara, ambos nos calmamos un poco, en eso mi teléfono indicó un nuevo mensaje
"¿Estás bien? " Era de Elliot, Paul se encargó de contarle todo y fue la única vez que pude observar que no se hicieran rostros de tercera guerra mundial, no le respondí puesto que prefiero hablarlo en persona. Terry trajo un té calmante para ambos, yo me dediqué a hacer mi trabajo y los dos hombres platicaban en el sofá
- Margaret comprende que cuando me enojo soy otra persona - ¿en serio? - Sin embargo reconozco cuando debo una disculpa
- Yo tampoco fui la reina de la paciencia
- No debí decir eso acerca de Paul
- Ni yo lo de conseguir una modelo - el ambiente se relajó un poco, pero si volvía a decir algo les juro que por más famoso que sea le parto la cara
- ¿Cómo está tu noviecito?
- No es mi noviecito - hizo un gesto de indignación, claro que era bromeando
- ¿lo estás negando?
- no lo niego, pero no es mi noviecito - hasta la palabra me da asco, no porque se trate de Paul sino porque suena tan despectivo y como si yo tuviera un objeto.
Para el final del día los paparazzis siguieron a estrella de rock en cuanto se fue del estudio así que no tuve problema en volver a casa.
Había un par de cervezas en el living, Paul y su amigo James estaban jugando Halo 4, no me agradó ver la cara de ese tipo, es un idiota y una vez se me insinuó estando ebrio y me dio una nalgada en el trasero además tiene el descaro de llamarme Mags como si el fuera mi amigo, pero no puedo comportarme como una mocosa de 12 años.
- ¿Todo bien el trabajo?
- Pudo estar mejor - me dirigí a la cocina y tomé la última cerveza que quedaba, James apareció de la nada
- Eso era mío
- No vi que tuviera tu nombre escrito - se río como si yo estuviera haciendo un stand up comedy, cosa que para él nunca seré graciosa
- ¿Sabes? Todavía recuerdo de aquella vez que nos pusimos acalorados aquí mismo
- ¿Nos? Yo nunca toqué tu trasero ni dije lo bueno que debes ser en la cama - Me alejé de ahí para subir las escaleras pero conejo me detuvo
- Tengo una sorpresa para tí mi ángel
- Ahora no y ya deja llamarme así - no se enojó puesto que sabía cómo estaba mi humor, pero si se molestó y no lo culpo - te prometo que la veré mañana
Paul
Estaba realmente molesta, después de que James se marchara encendí el televisor para ver el noticiero, una vez más mostraron a Leto con Margareth, mi ángel fotografiaba a una chica y Leto a mi ángel ¿estaba celoso? No, no confío mucho en él, pero si en Margaret y eso me basta. La reportera hizo comentarios que muy pronto veríamos un bebé Leto en camino y cosas de ese tipo, realmente no conoce a Margareth además estrella de rock no soportaría verla sin una prenda, yo casi ni logro.
Unos meses atrás
- lo haré
- ¿qué?
- seré tu musa o lo que sea - No puedo creerlo ¿realmente estaba aceptando?
- Margareth no tienes que hacerlo sólo por... - me detuvo con la mano cómo suele hacerlo
- lo hago por mi mejor amigo - la abracé hasta dejarla sin respiración.
...
Me levanté más temprano de lo usual para preparar el lienzos y las pinturas, además quería aprovechar la iluminación de la mañana. Dejé que Margareth se tomara su tiempo, claramente estaba nerviosa nunca nos hemos visto sin prenda alguna, al menos no voluntariamente, y para empeorar la situación ella sería la única desnuda.
Bajé al estudio y Margareth ya estaba allí con sólo una bata puesta, me dirigí al lienzo, me obligué a mismo a respirar varias veces.
- Mira hacia al ventanal mofita, un poco más a la izquierda - hizo lo que le indiqué, la parte que seguía iba a ser realmente incómoda - qui.. - toci nervioso -quítate la bata Margareth - se quedó petrificada por un largo tiempo, incluso yo dudé, estuve a punto de decirle que cancelaramos todo esto, que yo buscaría a otra chica pero antes de que abriera la boca la bata ya estaba en el suelo.
Spaguetti, ese era el mejor sustantivo para denominar a mis brazos y piernas, es mi mejor amiga lo sé, pero he sido incapaz de verla así desde que tenía 7 años. Se sentó y eso me indicaba que ya debía comenzar, sentía un cosquilleo por todo el cuerpo ¡cálmate! No quiero que ella piense que soy un pervertido; voltea a ver a su izquierda, inconcientemente levanta su brazo del mismo lado dejando ver su seno, me está matando, quería plasmarla bien porque se trataba de ella pero no quería que nadie más la viera así, realmente era ver una guitarra fabricada por el mejor artesano así que decidí pintarla como siempre la he visto, mientras pintada cada curva me sentía como el insecto que recorría las colinas color avena, para finalizar mi toqué en su espalda dibujé un par de enormes alas de águila. Cuando terminé le dije que podía vestirse, sé que, tanto ella como yo nos sentíamos aliviados. Satisfechos.